Se diría que lo normal en sagas como a la que pertenece Falcon y el Soldado de Invierno (The Falcon and the Winter Soldier, Malcolm Spellman, desde 2021), la serie de Disney Plus, es que cada una de las líneas del libreto esté acotada al milímetro. Así, que los actores se salgan de ellas debiera resultar muy extraño, y ya no hablemos de que se les dé la ocasión para improvisaciones, de que se les permita interpretar con diálogos a su libre albedrío.
Pero, por lo que se sabe desde su mismo comienzo, tal cosa ha pasado un buen número de veces. Por ejemplo, con la famosa frase de Iron Man (Jon Favreau, 2008) en la que Tony Stark (Robert Downey Jr.) se afirma como superhéroe: “Yo soy Iron Man”, suelta fuera del guion.
Y lo repite en ese momento capital de Avengers: Endgame (Joe y Anthony Russo, 2019). O la escena de Los Vengadores (Joss Whedon, 2012) en la que ofrece arándanos a Steve Rogers (Chris Evans) y a Bruce Banner (Mark Ruffalo), aquella del último tramo en la que habla de ir a por comida turca y la de Capitán América: Civil War (Hermanos Russo, 2016) en la que le indica a Peter Parker (Tom Holland) que debe dejarle sentarse. O la de Avengers: Engame en la que le espeta al Capi que “no hay confianza, solo mentiras”. Y otras de sus compañeros.
Pues bien, Amy Aquino, que encarna a la doctora Christina Raynor en Falcon y el Soldado de Invierno, ha dicho que hay una en el episodio “The Star-Spangled Man” (1×02).
Tantos años con estos personajes de 'Falcon y el Soldado de Invierno'...
“Todos sabíamos cuál se suponía que debía ser la forma de la escena y lo que [Anthony Mackie y Sebastian Stan] tenían que hacer y a lo que finalmente debían llegar”, ha explicado la actriz a Collider sobre la sesión de terapia conjunta.
“Pero la directora, Kari [Skogland], que es brillante, [decidió que] tenían que poder simplemente improvisar eso, encontrar su momento, solo hacerlo (…). No había manera de llevarlo a cabo completamente de acuerdo con un guion.
”Así que eso fue en gran parte improvisación. No el principio y el final; teníamos que empezar por donde empezamos y llegar a donde llegamos con el punto en el que intervengo, pero todo lo que había en el medio era [cosa de] ellos. Fueron todos estos años de relación”, cuyo fruto imprevisto se recoge en esta escena de Falcon y el Soldado de Invierno.