Cuando acecha la maldad de Damién Rugna le da un giro por completo nuevo al género zombi y al de las películas de terror. En especial, porque lo mezcla con el tópico de las posesiones, para crear una historia en que la paranoia, el miedo y la repulsión se convierten en el centro de la premisa. Poco a poco, lo que comienza como una serie de eventos inexplicables en el campo argentino, termina por demostrar la raíz y la esencia del mal. A la vez, de los elementos espeluznantes como parte de la naturaleza humana y la forma en como interpretamos la oscuridad de la locura y la desazón. 

La cinta sorprendió y fascinó a partes iguales a los amantes del terror durante el año pasado. Lo que le permitió ganar el Festival de Sitges 2023 y labrarse un lugar como uno de los argumentos más icónicos del cine de género. Algo que le convierte en una rareza dentro de las premisas parecidas. También, en la demostración que los argumentos dedicados a los relatos espeluznantes, se encuentra en constante renovación y evolución. Mucho más, cuando deben calar en un público más joven, con nuevas sensibilidades y al no es sencillo sorprender.

Para explorar en largometrajes parecidos, te dejamos cinco películas de temática tan — o incluso más — retorcidas que Cuando acecha la maldad. De un conjunto de historias escalofriantes, la ansiedad convertida en un monstruo a un pequeño experimento que se convirtió en éxito. Esta selección de películas de terror abarca las más recientes y la manera en que se ha convertido en un tipo de experiencia que trasciende al mero propósito de causar miedo. Uno de sus mayores atributos. 

Aterrados

Damién Rugna tiene un buen tiempo explorando en el terror. Pero fue en esta película del 2017, en la que mostró toda su curiosa perspectiva acerca del género. El argumento, que cuenta la historia de una serie de incidentes sobrenaturales que ocurren en una zona residencial de Buenos Aires, comienza con una tragedia. Sin embargo, lo que parece un evento circunstancial, pronto se transforma en una condena tenebrosa que se extiende como una infección entre todos los involucrados.

Es entonces, que el director — que también escribe el guion — encuentra la manera de dar un giro por completo nuevo a varios tópicos. Desde el de las apariciones, eventos paranormales y agresiones de entes invisibles, al punto de vista acerca de los zombis. Nada escapa a la manera en que el director enlaza el terror cinematográfico a las fobias e incluso, temores primitivos. 

Para su inquietante final, la cinta no explica demasiado lo que ha ocurrido. Lo que le brinda a todo el argumento un aire de misterio y enigma, que refuerza su premisa escalofriante. Un elemento que el realizador llevó al siguiente nivel en Cuando acecha la maldad, ahora su obra más conocida.

Háblame

El dúo de directores Danny y Michael Philippou, convirtieron los ya conocidos retos entre Tiktokers, en un relato de miedo a la medida de la generación Z. El resultado es una de esas películas de terror más escalofriantes de los últimos tiempos. A la vez, una perspectiva novedosa acerca del tema recurrente de las posesiones y apariciones espectrales. Háblame es mucho más que una premisa que quiere provocar sobresaltos. Y de hecho, se acerca más a un ingenioso juego macabro que se convierte en una pesadilla colectiva. 

Mia (Sophie Wilde), apenas se recupera de la muerte de su madre. Además, debe lidiar con las sospechas que pudo ser un suicidio. En medio de la desazón y el miedo, termina por encontrarse en mitad de un juego macabro que consiste en permitir ser poseída por aparentes entes invisibles. Al principio, todo parece ser un chiste retorcido, hasta que la experiencia se sale de control y comienza a cobrar víctimas tras víctimas.

La que se considera una de las películas más macabras del 2023, es, al mismo tiempo, una demostración de la flexibilidad del género. A mitad de camino entre burlona sátira y una escalofriante dimensión del sufrimiento, la cinta sorprende. A la vez, deja claro que los relatos terroríficos en la actualidad son mucho más atrevidos y ambiciosos de lo que podría suponerse. 

Posesión infernal: El despertar

La saga de películas de terror sobrenatural y sangrienta de Sam Raimi tuvo un nuevo capítulo en el 2023. Pero además de continuar con la popular mitología de la franquicia, la cinta de Lee Cronin dio un nuevo sentido a sus elementos más conocidos. Entre ellos, todo lo relacionado con el Necronomicón, los clásicos deadites y el sentido de lo malévolo que rodea a la premisa. Eso, a partir de un giro contemporáneo, que equipara lo aterrador a una herencia malsana imposible de evitar.

Ellie (una magnífica Alyssa Sutherland), es una madre recién divorciada que vive con sus tres hijos en un edificio que está por ser demolido. Allí recibe a su hermana Beth (Lily Sullivan), que intenta ordenar su vida luego de quedar embarazada. Gradualmente, las fuerzas invisibles que contiene el conocido libro maldito de la saga, terminarán por convertir la última noche de ambas hermanas en una pesadilla. 

Con numerosos guiños al conjunto de películas previas, Posesión infernal: El despertar es tanto un homenaje como una entrega novedosa de la saga. Mucho más, una exploración sobre la raíz de lo siniestro en una época urbana, claustrofóbica y descreída. 

Beau tiene miedo

Beau tiene miedo

El tercer largometraje del director Ari Aster, también es el más personal. El relato del sufrimiento mental y físico de Beau (Joaquin Phoenix), es un recorrido por las ansiedades modernas. Pero no desde un punto de vista psiquiátrico, sino convirtiendo a la mente del personaje en un escenario terrorífico. 

Desde su nacimiento hasta los años adultos, Beau deberá enfrentar fobias, traumas y dolores a través de un entorno macabro y aprensivo. Mucho más, cuando descubra que la mayoría de los monstruos que teme y de los que intenta escapar, están vinculados con su vida de manera inevitable. 

Aster, conocido por su punto de vista inquietante sobre las relaciones familiares y lo tenebroso, encuentra en Beau tiene miedo un terreno nuevo. Asimismo, una cuidadosa visión acerca del bien y del mal, que se hace mucho más malsana con el paso del tiempo. Es una de las mejores películas de terror recientes.

Sonríe

El realizador Parker Finn debutó en el cine con una de esas películas de terror destinadas convertirse en un ícono del género. La premisa de una condena sobrenatural que se extiende como una infección ponzoñosa, se convierte, en mano de Finn, en una reflexión sobre el dolor emocional. No obstante, el relato va mucho más allá y profundiza en los horrores de una entidad cruel y maliciosa que mata con violencia en cada oportunidad posible.

Probablemente, lo más siniestro en la narración, es que el enemigo a vencer, puede ser cualquiera. En especial, cuando el guion se hace más brutal en toda su oscuridad sugerida. Nadie está a salvo de morir en medio de sus temores más profundos. Una idea que se vuelve un escenario siniestro que abarca cada punto de la historia. 

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