Como cuando "cosechas lo que siembras". Después de que más de 70 mujeres acusaran a Harvey Weinstein de acoso sexual en octubre pasado, desatando una ola de acusaciones en Hollywood de la mano del movimiento #MeToo, su compañía ha comenzado a pagar los platos rotos por su conducta sexual inapropiada a lo largo de décadas.
The Weinstein Company, la empresa co-fundada por el productor en desgracia, se ha declarado oficialmente en bancarrota, informó la compañía en una declaración publicada la noche del 19 de marzo. La demanda de bancarrota ha sido presentada ante el Tribunal de Bancarrotas de los Estados Unidos en Delaware, según recogen medios estadounidenses.
Junto con la declaración de suspensión de pagos, también ha finalizado todas sus cláusulas de "no divulgación". Eso significa que las víctimas y/o testigos han quedado liberadas "con efecto inmediato" de los acuerdos legales que les impedían hablar sobre los casos de acoso sexual.
"Desde octubre, se informó que Harvey Weinstein utilizó los acuerdos de confidencialidad como un arma secreta para silenciar a sus acusadores. Con efecto inmediato, esos 'acuerdos' terminan", indicó la compañía en un comunicado enviado por correo electrónico a Reuters.
Los casos clave que destaparon el acoso sexual en Hollywood
El hundimiento de The Weinstein Company
Aunque el productor sigue negando haber tenido relaciones sexuales no consensuadas, como resultado de una investigación por conducta sexual inapropiada, la fiscalía de Nueva York presentó el pasado 11 de febrero una demanda por violación de derechos civiles en contra de Weinstein, su hermano Bob y la compañía dirigida por ambos.
Harvey Weinstein fue despedido como CEO en octubre pasado de su compañía a raíz de las acusaciones en su contra. Desde entonces, The Weinstein Company ha enfrentado dificultades financieras. Al haber solicitado la protección del Capítulo 11 de la Ley de Quiebras, pretende facilitar su venta parcial a una firma de capital riesgo.
Quién era Harvey Weinstein en Hollywood antes de su escándalo por depredador sexual
El estudio de cine y televisión, que desde 2005 ha dado vida a películas como Malditos Bastardos (2009), El Discurso del Rey (2010) y Django (2012), ha estado en busca de un comprador o inversor desde hace meses. En la denuncia de bancarrota, ha incluido un acuerdo con la firma de capital privado Lantern Capital Partners para la adquisición de los activos de la empresa por 500 millones de dólares durante el proceso de quiebra. Aunque Lionsgate y Miramax, las cuales fueron también fundadas por Harvey y Bob Weinstein, ya habían hecho ofertas y aún podrían ser oferentes, de acuerdo con Reuters.
Entre las más de 70 mujeres que han acusado el comportamiento inapropiado del productor se encuentran las actrices Lupita Nyong’o, Rose McGowan, Ashley Judd, Gwyneth Paltrow, Angelina Jolie, Uma Thurman, Kate Beckinsale, Lena Headey, Cara Delevingne y Léa Seydoux, entre muchas otras. The Weinstein Company señala en su comunicado, según recoge The New York Times:
Nadie debería temer hablar o coaccionar para mantenerse callado... Sus voces han inspirado un movimiento para un cambio en todo el país y en todo el mundo. La compañía lamenta no poder deshacer el daño causado por Harvey Weinstein, pero espera que los eventos de hoy marquen un nuevo comienzo.
Harvey Weinstein enfrenta actualmente una demanda colectiva en los Estados Unidos, es investigado por la Policía de Nueva York y de Los Ángeles y tiene 11 querellas en su contra en Reino Unido. También ha dejado de formar parte de la Academia Británica de las Artes Cinematográficas, la cual otorga los premios BAFTA, y su confraternidad con el British Film Institute ha sido revocada. Por otro lado, se han realizado iniciativas como una línea de ayuda 24 horas para las víctimas. Además, la la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas ha creado nuevos estándares de conducta, mientras que el Sindicato de Productores de América ha establecido reglas para evitar el acoso sexual y ofrecer capacitación a los miembros del equipo de producción.