En The Creator del director Gareth Edwards, la batalla entre las máquinas y el hombre es definitiva. Joshua (John David Washington), deberá encontrar la manera de no solo destruir la amenaza de la inteligencia artificial que intenta devastar a los últimos sobrevivientes. También, comprender hasta qué punto las relaciones entre las máquinas y sus creadores, pueden indicar el final de una guerra total. Entre la reflexión filosófica y la primera mirada a un universo pleno de detalles visuales y de contexto, la película imagina una confrontación inquietante. La que llevaría al hombre a plantar cara al fruto de su inventiva e imaginación.

No se trata de un tema nuevo. La película resume varios de los tropos más conocidos de la ciencia ficción, algunos de los cuales son el centro de cintas clásicas. Desde Blade Runner de Ridley Scott hasta el animado Akira de Katsuhiro Ôtomo. La perspectiva acerca de un futuro distópico en que la inteligencia artificial sea un dictador, también es una alegoría acerca de las paranoias colectivas. Mucho más en nuestra época, cuando la tecnología avanza tan rápido como para ser cada vez más autónoma e impredecible. 

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Te dejamos cinco películas en las que los robots y los seres humanos han batallado entre sí. De un clásico de la ciencia ficción contemporánea a una metáfora acerca de la maternidad y la pérdida, en medio de un enfrentamiento cibernético. La selección incluye varios de los mejores largometrajes acerca de los límites de la tecnología y cómo el ser humano es capaz de comprenderla. 

Terminator 2: El juicio final

La secuela de la exitosa película estrenada en 1991 y dirigida por James Cameron, marcó un antes y un después en el cine de la ficción especulativa. Ampliamente considerada como una de las mejores secuelas de todos los tiempos, también es aclamada por su innovadora tecnología de efectos especiales. La cual, sostiene un guion que narra la posibilidad de un ataque robótico contra el mundo. 

Ambientada en un futuro postapocalíptico en que la que inteligencia artificial Skynet tomó el control del mundo, relata el exterminio de la humanidad. El punto ya se había tocado en la película anterior, pero además, se mezcla con una paradoja temporal. Enviado desde el futuro, un androide reprogramado (Arnold Schwarzenegger) debe proteger a John Connor (Edward Furlong), venidero líder de la resistencia humana. Sin embargo, un artefacto más avanzado y letal, el T-1000 (Robert Patrick), tiene la misión de eliminar al joven.

Más allá de sus avances en efectos especiales, la cinta también exploró temas como la responsabilidad biotécnica, el destino y la predicción algorítmica. Todo, en medio de un escenario en que la destrucción de la raza humana, depende de una serie de acciones que podrían cambiar el porvenir. Su mayor y más extraña moraleja. 

Yo, Robot

Dirigida por Alex Proyas y basada libremente en relatos del escritor Isaac Asimov, la cinta se centra en un enfrentamiento entre robots y seres humanos. Por lo que está ubicada en un futuro en que los artefactos con inteligencia artificial son comunes y utilizados para diversas tareas en la sociedad. Una premisa distinta a la habitual en la que la robótica es una fuente de asombro e incluso, un tema peligroso. 

El argumento sigue al detective Del Spooner, (Will Smith) quien investiga la muerte del Doctor Alfred Lanning (James Cromwell). Este último, un científico especializado en inteligencia artificial y su aplicación cotidiana, que aparentemente se ha suicidado. A medida que Spooner profundiza en lo sucedido, descubre una conspiración que involucra un conflicto tecnológico y pone en peligro la vida de los seres humanos.

A pesar de ser criticada por su interpretación poco fiel del autor ruso, Yo, Robot plantea dilemas de interés. Desde la interacción entre humanos y los droides hasta la desconfianza por el avance técnica. El guion de Jeff Vinta plantea preguntas acerca de la capacidad de los robots para tomar decisiones morales. También, profundiza en la posibilidad que la inteligencia artificial, pueda evolucionar más allá de su programación inicial y desarrollar una conciencia propia.

Las brigadas del espacio

Estrenada en 1997, es la adaptación de Paul Verhoeven de la novela del mismo nombre escrita por Robert A. Heinlein. La película es conocida por su enfoque satírico acerca de la interacción entre el hombre y la máquina, además de su mezcla de acción, humor negro y crítica social.

De la misma forma que la ficción en la que se basa, la cinta utiliza la percepción de la tecnología como alienante. A siglos en el futuro, la humanidad está en guerra contra una raza alienígena conocida como los Insectos. La historia sigue a un grupo de jóvenes reclutas, liderados por Johnny Rico (Casper Van Dien), mientras se unen a las Fuerzas Móviles. Todo para enfrentar a los peligrosos enemigos en el campo de batalla.

Aunque la inteligencia artificial no es el centro de la trama, se asume como una forma de manipular la opinión colectiva. El argumento analiza el militarismo, el fascismo, la propaganda y la presión de los medios de comunicación. Eso, a través de la dominación corporativa y tecnológica. A la vez, critica la glorificación de la violencia en la sociedad y cuestiona la naturaleza de la guerra y el sacrificio.

Vengadores: La Era de Ultrón

Una de las películas más criticadas de Marvel, tiene por centro el debate alrededor de la tecnología capaz de tomar decisiones independientes. La secuela de Los Vengadores, abandona luchas galácticas para reflexionar sobre la seguridad de la humanidad. Lo anterior bajo la idea que la inteligencia artificial, pueda ser una forma de defensa. 

El director Joss Whedon, plantea como Ultron, un robot creado por Tony Stark/Iron Man (Robert Downey Jr.) con la intención de proteger al mundo, se cuestiona sus objetivos. En particular, porque llega a la conclusión que la única forma de impedir la destrucción del planeta es cometer un genocidio. En medio de su toma de conciencia, construye cientos de robots idénticos a sí mismo, que, a su vez, le obedecen en una especie de conexión de conciencia colmena. 

Al margen de las batallas y la aparición de superhéroes icónicos, el mensaje es uno. Las consecuencias de la creación de una inteligencia artificial avanzada. Un tópico que subyace en medio de la aparente trama sencilla que se narra en el guion. 

Madre/Androide

La película de Netflix dirigida por Mattson Tomlin, enfoca la versión sobre la inteligencia artificial como enemigo, en el personaje de Georgia (Chloë Grace Moretz). La joven embarazada debe enfrentar un mundo que los androides, indistinguibles de los seres humanos, se rebelan contra sus creadores. Pero no solamente eso. También, intentan destruirles con la convicción que es la única manera de vencer una posible resistencia. 

El largometraje muestra a la tecnología como el límite entre el ser humano y un tipo de crueldad despiadada. Asediados y cazados como criaturas salvajes, los últimos sobrevivientes deben huir. Incluyendo a Georgia, su esposo y el futuro bebé a punto de nacer. Solo para encontrar que lo que les espera entre bosques y territorios dominados por la inteligencia artificial, pondrá a prueba su concepto acerca de la vida. En particular, sus complicadas relaciones con lo tecnológico. 

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