Google y Facebook (Meta, ahora) son dos gigantes del mercado publicitario en línea, y su dominio se encuentra nuevamente bajo la lupa de los reguladores. Es que tanto Reino Unido como la Unión Europea anunciaron que investigarán a ambas corporaciones por supuestamente caer en una conducta anticompetitiva; y el punto de partido es un acuerdo entre las mismas que se conoce como Jedi Blue.
Básicamente, la Comisión Europea y la Autoridad de Competencia y Mercados británica buscarán probar que Google y Meta se confabularon para dominar el negocio de los anuncios online, sin molestarse entre sí e impidiendo que otras compañías puedan ganarse un lugar en el sector.
Según indicó Margrethe Vestager, comisaria de Competencia del órgano regulador europeo, el acuerdo entre las firmas estadounidenses habría apuntado a debilitar las tecnologías que pudiesen competir contra Open Bidding, de Google, para excluirlas del mercado y evitar que se las utilice para mostrar anuncios en aplicaciones y sitios web. "Si nuestra investigación lo confirma, esto restringiría y distorsionaría la competencia en el ya concentrado mercado de la publicidad, en detrimento de las tecnologías de publicación de anuncios rivales, los editores y, en última instancia, los consumidores", aseguró.
Por el lado de la Autoridad de Competencia y Mercados de Reino Unido, la visión es similar. "Nos preocupa que Google pueda haberse asociado con Meta para poner obstáculos en el camino de los competidores que brindan importantes servicios de publicidad gráfica en línea a los editores. Si una empresa tiene un dominio absoluto sobre un área determinada, puede dificultar que las startups y las empresas más pequeñas ingresen al mercado y, en última instancia, puede reducir la elección del cliente", aseveró Andrea Coscelli, director ejecutivo del ente británico.
No es la primera vez que Google y Meta quedan bajo fuego por Jedi Blue
Lo que se conoce como Jedi Blue es un acuerdo que Google y Facebook aparentemente firmaron en 2018. En el mismo, los de Mountain View habrían dado ventajas a la red social para acceder a su sistema de subastas para anuncios en línea; a cambio, los dirigidos por Mark Zuckerberg habrían abandonado el desarrollo de su propia tecnología publicitaria destinada a competir con la de Google.
Como consecuencia de esto, la compañía ahora conocida como Meta también habría abandonado definitivamente la inversión sobre cualquier otro sistema publicitario en línea. Por ello, los reguladores de Reino Unido y la Unión Europea se proponen saber si las empresas avanzaron con este arreglo a sabiendas de que podría ser muy dañino para el resto del mercado.
En Estados Unidos, Jedi Blue ya se encuentra bajo escrutinio legal. Recordemos que, si bien la asociación entre Google y Meta se habría dado hace al menos 4 años, se conoció públicamente a comienzos de 2021. Desde entonces, 15 fiscales generales estatales han demandado a ambas firmas por este tema.
Desde la Comisión Europea han mencionado que no existen plazos legales para entregar los resultados de la investigación antimonopolio. Esto significa que los reguladores se tomarán el tiempo que consideren necesario para tratar de demostrar su punto; y también explicaron que habrá una cooperación con la Autoridad de Competencia y Mercados británica durante su correspondiente investigación.
Será interesante ver cómo avanza esta historia. Recordemos que tanto Google como Meta han tenido históricamente una tensa relación con los reguladores del Viejo Continente. Entre los eventos más recientes, la firma de Mark Zuckerberg está en plena puja con Reino Unido por la compra de Giphy; y también amenazó (aunque después reculó) con cerrar sus servicios más importantes en Europa, en desacuerdo con su normativa de privacidad.
Google, en tanto, ha tenido un sinfín de cruces con la Comisión Europea, con grandes multas incluidas. Los de Mountain View han estado bajo escrutinio anteriormente por su negocio publicitario, su popular buscador, Android, y hasta por su asistente virtual.