Se abre un nuevo capítulo en la historia de las sanciones de Estados Unidos a las tecnológicas chinas. En las últimas horas, el presidente estadounidense Joe Biden firmó la ley que impide que Huawei y ZTE reciban nuevas licencias de equipamiento de comunicaciones por parte de la FCC, la Comisión Federal de Comunicaciones.
Con la entrada en vigor de la Secure Equipment Act of 2021, los norteamericanos le cierran definitivamente la puerta a las empresas del gigante asiático que son consideradas "una amenaza para la seguridad nacional" por sus supuestos vínculos con el Partido Comunista de China.
La nueva ley estipula que la FCC debe adoptar reglas "que aclaren que ya no revisará ni aprobará ninguna solicitud de autorización para equipos que presenten un riesgo inaceptable para la seguridad nacional".
Brendan Carr, comisionado de la Comisión Federal de Comunicaciones, se mostró complacido por la firma de Biden a la ley; y aseguró que la misma ayudará a garantizar que "equipos inseguros" de empresas como Huawei y ZTE ya no puedan ser insertados en las redes de comunicaciones estadounidenses. Además, según el mismo funcionario, desde 2018 a la fecha el ente regulador estadounidense aprobó más de 3 mil aplicaciones de Huawei.
Estados Unidos impone más presión a Huawei y ZTE
La Secure Equipment Act of 2021 se trató en la Cámara de Representantes en octubre, con una votación favorable de 420 a 4. Poco después pasó por el Senado, donde se aprobó por unanimidad. Con la reciente firma del presidente Biden, los norteamericanos han dado un paso más en una historia que no solamente involucra sospechas de espionaje, sino también negocios millonarios.
La FCC prohibió en noviembre de 2019 que las empresas estadounidenses compraran tecnología de Huawei y ZTE para establecer redes 5G utilizando fondos federales. En un principio la medida era transitoria, pero se estableció de forma permanente en mayo del 2020.
También recordemos que el gobierno de Donald Trump vetó a Huawei y ZTE de operar en Estados Unidos durante un año. La determinación se amplió posteriormente, y el ahora expresidente estadounidense llegó a aseverar que el control de Huawei estaba en manos del ejército chino.
A comienzos de este año, la administración norteamericana revocó las licencias de algunos proveedores clave de las tecnológicas chinas, como Intel y Qualcomm. Y la situación no mejoró con la salida de Trump de la Casa Blanca; Biden sostuvo las restricciones sobre Huawei, ZTE y las demás firmas apuntadas por sus aparentes vínculos con las autoridades chinas.
Las sanciones han tenido un gran impacto sobre las compañías chinas. En el caso específico de Huawei, sus finanzas se vieron claramente afectadas por el veto norteamericano, aunque encontró su salvavidas en China. Mientras, el fundador de la empresa, Ren Zhengfei, habló de pivotar la compañía hacia el software, para escapar del azote de Estados Unidos.
Claramente, la entrada en vigencia de la Secure Equipment Act of 2021 podría ser el golpe de gracia para Huawei y ZTE en Estados Unidos. Además, este año la FCC lanzó un programa para que las empresas de telecomunicaciones "destruyan y reemplacen" todo el equipamiento proveniente de las firmas chinas apuntadas; el mismo está valuado en 1.900 millones de dólares.