Aunque se creía que el cambio de administración en Estados Unidos iba a significar una modificación de las relaciones comerciales con las compañías chinas como Huawei, lo cierto es que no será así. Al menos de momento.

El veto de Trump hacia algunas de estas grandes corporaciones se mantendrá con la administración Biden. Así lo ha confirmado Gina Raimondo, la actual secretaria de Comercio, que no ve razones para levantar las restricciones.

De esta forma, las compañías chinas en la lista negra, como Huawei, se mantendrán de momento. Esto significa que el fabricantes chino seguirá sin poder usar los servicios de compañías norteamericanas. En otras palabras, Huawei seguirá estando vetado para usar de Google Play y otros servicios en sus terminales.

Huawei seguirá vetado en Estados Unidos

La Secretaria de Comercio apunta que es razonables que estas compañías sigan en la lista negra en tanto lo están por ser consideradas un riesgo para la seguridad nacional o para los intereses de la política exterior de los Estados Unidos:

Entiendo que las partes se incluyen en la Entity List y en la Military End User List porque representan un riesgo para la seguridad nacional de EE. UU. o para los intereses de la política exterior". - Gina Raimondo, Secretaria de Comercio de los Estados Unidos.

Parece que, después de todo, las razones del veto a las compañías chinas iniciado por Trump continuará con la administración Biden. De esta forma, las compañías que esperaban un cambio en la política y las listas negras, tendrán que seguir adelante con su plan B.

En el caso de Huawei, parece que HarmonyOS será la apuesta de la compañía para intentar sortear estas restricciones, ofreciendo un sistema operativo propio lejos de los servicios de Google.

Y es que en el mercado de los terminales Android no disponer de los servicios de Google o del acceso sencillo a aplicaciones especiales como WhatsApp, o a los servicios de Facebook, representa una barrera competitiva enorme para operar en los mercados occidentales.

Sea como sea, la guerra comercial, aunque más laxa, sigue en marcha entre los Estados Unidos y las empresas chinas que quieren operar en territorio estadounidense.

Sobre este aspecto, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Wang Wenbin, reafirmó la oposición del país a dichas restricciones. Y apuntó que instan a detener esta opresión desenfrenada contra las empresas chinas. De momento, eso parece que no va a pasar.