El uso de las descargas directas para bajarse archivos de Internet ha aumentado mucho durante los últimos años, mientras aquí en España, hablamos de la Ley Sinde y su lucha contra páginas web de enlaces que permiten descargar contenidos o verlos en streaming en Francia la situación es algo más diferente y se penaliza directamente a los usuarios que se descargan archivos mediante redes peer to peer. Hace poco conocíamos que hasta 100.000 usuarios habían sido advertidos por las autoridades francesas por descargar contenidos, lo que hace una media de 2000 emails de advertencia al día.

Según se desprende de un estudio realizado por comScore y del que se hace eco el diario _Le Figaro_ el aumento del uso de servicios de descarga directa ha aumentado considerablemente en los últimos dos años. Este estudio se centra en Megaupload el que ha visto como en ese periodo tiene un 35% más de visitas durante el último año de usuarios franceses que habrían cambiado los hábitos y se habrían pasado a las descargas directas para evitar las sanciones por la Ley Hadopi.

En el pasado mes de noviembre un total de 7,5 millones de usuarios franceses hicieron uso del popular servicio de descarga directa (Megaupload) o de la visualización de contenidos en streaming (Megavideo). El salto en la cifra de uso es impresionante, pasando de los 350.000 usuarios al mes que el sitio tenía en abril de 2008 o los dos millones de usuarios mensuales en abril de 2009.

Si bien la Ley Hadopi ha podido contribuir al aumento del uso de este tipo de servicios no creo que dichas cifras sean completamente culpa de esta ley que penaliza las descargas mediantes redes P2P. El aumento también se ha visto en otros países y se debe principalmente a que entre otras razones la descarga se hace de forma más rápida reduciendo el tiempo de espera para poder disfrutar los contenidos o incluso no es necesario descargarlos, en el caso del streaming. Aunque también hay razones para creer que el aumento se debe a dicha ley, ya que realizando la descarga de contenidos mediante este tipo de servicios se hace más difícil detectar y priorizar dicho tráfico, aunque eso no quiere decir que sea imposible.

Sea como fuere y lo que demuestra el paso del tiempo es que los usuarios se adaptan, buscan alternativas mientras que la industria sigue anclada a un modelo de negocio tradicional. Veremos si en el futuro esto cambia, por el momento en España ya te contamos la reunión que hubo entre algunas partes de la industria y algunos ciudadanos, lo cual es un inicio bastante bueno que hay que ver que siguientes pasos le siguen.

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