Huawei se encuentra en la cuerda floja. A cuatro años del veto impuesto por Donald Trump, el fabricante chino podría enfrentar una restricción total de Estados Unidos. Fuentes cercanas confiaron a Financial Times que el Departamento de Comercio no otorgará más licencias para exportar tecnología estadounidense a Huawei.
La decisión significaría un veto definitivo contra la que alguna vez fuera candidata a liderar la industria de telefonía móvil. La prohibición para exportar tecnología estadounidense a Huawei forma parte de una estrategia del gobierno norteamericano para frenar el avance en el desarrollo de armas nucleares y sistemas de espionaje en China.
Aunque Huawei recibió un fuerte golpe durante el gobierno de Donald Trump, el veto no le impidió acceder a cierto tipo de tecnología. Al parecer, Biden y compañía quieren apretar más la soga y planean un bloqueo general. Según las fuentes, el Departamento de Comercio notificó a algunas empresas que ya no otorgaría más licencias para exportar tecnología a Huawei.
Hace unos meses, Estados Unidos anunció nuevas reglas que prohibían la exportación de semiconductores a China. En octubre de 2022, el Departamento de Comercio ajustó la Norma de Productos Directos Extranjeros, una disposición en la que EE. UU. extiende sus controles de exportación a productos fabricados en el extranjero. Con ello, Washington limitaría la capacidad del país asiático para acceder a tecnología avanzada y utilizarla en la fabricación de supercomputadoras.
Empresas como Intel, AMD, NVIDIA y productores de maquinaria para semiconductores recibieron el aviso con antelación. Por otro lado, Países Bajos y Japón firmaron un acuerdo con Estados Unidos para aplicar la medida con compañías locales. El bloqueo a China es una de las pocas cosas en las que están de acuerdo los legisladores demócratas y republicanos de ese país.
Huawei vive en una nueva normalidad tras el veto de 2019
En una carta para celebrar el cierre de 2022, el presidente de Huawei, Eric Xu, dejó entrever que las sanciones estadounidenses ya no afectan a la compañía. El líder de la tecnológica mencionó que las ventas crecieron un 0,02% con respecto al año anterior. Xu consideró el veto como su nueva normalidad y aseguró que "están de vuelta en el negocio, como siempre".
Aunque Huawei cree que lo peor ya pasó, lo cierto es que durante estos cuatro años pudo acceder a tecnología estadounidense que no estaba relacionada con redes 5G. El veto total impediría mantener una relación con Intel, Qualcomm y otras empresas con las que trabaja actualmente. Estados Unidos cree que miembros del Partido Comunista y el ejército tienen injerencia en Huawei y que la empresa los ayuda en tareas de espionaje.
Las sanciones impuestas por Trump en 2020 derivaron en un desplome de las ventas de la marca fuera de China. De la noche a la mañana, los smartphones de Huawei desaparecieron de las tiendas de EE. UU. y la prohibición para usar los servicios de Google la obligó a crear su propio sistema operativo. Huawei perdió el liderazgo en la escena de los móviles, aunque China salió al rescate y la empresa se consolidó en otros sectores a nivel local.
Por el momento no existe una confirmación oficial de Estados Unidos o Huawei sobre la posibilidad de un veto definitivo. La administración de Joe Biden sigue analizando los diversos frentes en los que podría bloquear a las empresas chinas para evitar que el país tenga acceso a tecnología de punta. Hace unos meses, el FBI sugirió que las torres de telefonía podrían interferir en el uso del arsenal nuclear de EE. UU. en suelo norteamericano.
Un veto total a Huawei ya estaría sobre la mesa, aunque a estas alturas, es posible que la tecnológica china ya esté más que preparada.