A finales de 2021, el viceministro de Transformación Digital de Ucrania, Alexander Bornyakov, decía que las criptomonedas son la nueva economía, que son el futuro y que podrían impulsar la economía del país. Fue justo antes de que se aprobara en el Parlamento ucraniano un proyecto de ley para regular las transacciones con criptoactivos. Seguramente, Bornyakov no podía imaginar que, meses después, este marco legal favorable sería una de las principales fuentes de ayuda para el gobierno en medio de la guerra de Ucrania. En Hipertextual hemos hablado con Kuna, la empresa que está detrás del fondo de criptomonedas del Gobierno.
Al momento de la publicación de este artículo, el gobierno del país invadido por Rusia y una ONG destinada a apoyar a las Fuerzas Armadas han logrado recaudar más de 59 millones de dólares, según Elliptic, que incluyen también el dinero de otros proyectos de NFT. Una cifra que no para de subir. A través de su cuenta de Twitter oficial, el Gobierno de Ucrania ha pedido donaciones con Bitcoin, Ethereum y Tether. Por otro lado, la campaña UkraineDAO y diferentes NFT han aumentado la cifra total de donaciones para afrontar el desastre causado por la guerra de Ucrania.
Esta es la primera vez que vemos cómo, de una manera tan directa, las criptomonedas y el blockchain se meten de lleno en una guerra. Ucrania ha tenido que dar pasos rápidos para afrontar las donaciones y aceptar proyectos como UkraineDAO. Pero, como si hubieran ver el futuro, el país empezó a allanar el terreno el año pasado para asumir transacciones con criptomonedas.
El auge de las criptomonedas llegó a Ucrania antes que la guerra
A finales de 2021, el Parlamento de Ucrania aprobó un proyecto de ley para regular todos los activos financieros virtuales. "El desarrollo de una nueva industria permitirá atraer inversiones transparentes y fortalecerá la imagen de nuestro país como un estado de alta tecnología", dijo Mykhailo Fedorov, vice primer de Transformación de Ucrania. Fedorov se ha popularizado en últimos días por pedirle a Elon Musk en Twitter que envíe antenas para conectarse a los satélites de Starlink, de cara a una posible destrucción de la infraestructura de conexión a internet en el país. El CEO de SpaceX y Tesla aceptó.
El objetivo era, en ese momento, que la iniciativa fuera la puerta de entrada del país en el mundo de las criptodivisas y que eso ayudara a las empresas y a la sociedad. Para Ucrania, uno de los países más pobres de Europa, las criptomonedas se ha comprendido como parte de una estrategia para recuperar al país económicamente.
Hasta el inicio de la guerra de Ucrania, el plan estaba empezando a dar resultado. Los ucranianos son uno de los usuarios de criptomonedas más activos del mundo y ocupan el cuarto puesto en el Índice Global de Adopción de Criptomonedas, realizado por Chainalysis.
Además, informó el New York Times, el número de transacciones de criptomonedas dentro de Ucrania ascienden diariamente a 150 millones de dólares, una cifra mayor al volumen de intercambios interbancarios. La medida, que pudiera ayudar al sector empresarial y económico, se ha convertido ahora también en una suerte de salvavidas para la población ucraniana.
Kuna, el centro de las ayudas por medio de criptomonedas para la guerra de Ucrania
Desde que empezó la guerra de Ucrania, el gobierno ha conseguido obtener donaciones a través de un fondo cripto. La empresa local Kuna es la encargada de brindar el soporte técnico para las recaudaciones con criptomonedas.
El primer fondo fue creado por la empresa y, después de ver que estaba dando buenos resultados, el Ministerio de Transformación Digital pidió ayuda a la empresa para la creación del suyo propio.
"Abrimos una cuenta especial para el gobierno y actuamos para ellos como un criptobanco", explica Michael Chobanian, fundador de Kuna, a Hipertextual. "Al principio decidimos enviar el dinero desde nuestra cuenta personal pero ahora actuamos como un solo fondo gubernamental, ya no está dividido", aclara.
Las donaciones, que se gestionan a través de Telegram y redes sociales como Twitter, se reparten para equipo médico y de primeros auxilios, suministros de comida, y equipamiento militar como chalecos antibalas y cascos. La ayuda de este fondo es, continúa Chobanian, transversal, porque va desde la ayuda para el transporte de refugiados hasta las ayudas para un Ejército en desventaja con respecto a Rusia.
El futuro de Ucrania es cripto
Por ahora, el equivalente en criptomonedas de millones de dólares recaudados están siendo el punto central de las donaciones en la guerra de Ucrania. Principalmente el fondo gestionado por Kuna, también las ayudas extras como las iniciativas de NFT cuya recaudación se destina a organizaciones como Come Back Alive.
Michael Chobanian reconoció que hay un "lado oscuro" dentro de esta iniciativa, como las estafas con criptomonedas bajo la promesa de ayudar en la guerra de Ucrania. No obstante, recalcó que "poca gente cae en estas trampas" y que "la mayoría del dinero de la gente va directamente al fondo cripto del gobierno".
El papel de Kuna en el panorama actual era el paso lógico para el desarrollo de la empresa ucraniana. Antes de la guerra, eran los actores principales de la infraestructura de blockchain y criptoactivos. "Todo lo que se hacía en Ucrania a nivel nacional era nuestro proyecto", afirma para este medio.
Ahora son un papel clave para encauzar las ayudas en medio de la guerra de Ucrania. Una situación que, según el fundador de Kuna, marcará un antes y un después en la percepción que muchas personas tienen sobre las criptomonedas.
"Ucrania es uno de los países más 'criptofrendly' del mundo con una gran adopción de cripto per cápita. Es lógico que ahora lo estemos utilizando así. Esto enseñará al mundo que las cosas se pueden hacer de manera diferente".
Michael Chobanian
Michael Chobanian añade que, después de la guerra, los criptoactivos y el blockchain serán la columna vertebral de la economía nacional, y cada vez más a nivel internacional. "Cuando se acabe la guerra, reconstruiremos el país usando las últimas tecnologías, y una de ellas será blockchain".
Kuna: los inicios de una empresa que tenía todas las de perder
Ahora, Kuna ha conseguido ser el actor principal en el sector de las criptomonedas en el país y específicamente en medio de la guerra de Ucrania. No ha sido fácil llegar hasta este punto. La empresa nació en 2014, en un momento en el que pocos conocían en qué consistía esta tecnología. En la primera transacción de Chobanian, se sintió como si estuviera haciendo algo ilegal. Se trataba de una operación con uno de los primeros clientes, que estaba interesado en adquirir Bitcoins. Le dio el dinero en efectivo para que Chobanian lo convirtiera en la criptomoneda. "Pensé que me arrestarían de inmediato", recordaba en una entrevista realizada en el New York Times en 2021.
En ese momento no pasó, pero pareció ser una premonición a lo que iba a suceder meses después. En 2015, la Policía se presentó en casa de Michael Chobanian y estuvieron durante horas registrando todas sus pertenencias. Confiscaron sus teléfonos, ordenadores y hasta los routers.
Fue, a todas luces, un intento de extorsión. Chobanian también recuerda este incidente para Hipertextual y comenta que la policía buscaba dinero en efectivo para "confiscarlo" y enriquecerse. No encontraron el dinero que buscaban y el fundador de Kuna explicó todo el episodio en una publicación en Facebook que se hizo viral.
Los policías que entraron en su casa fueron despedidos y ese fue el final de sus problemas. al menos en este sentido. "Ni yo ni los que se dedican a las criptomonedas tienen ahora problemas en Ucrania. Actualmente estamos ayudando al gobierno, así que ahora nuestro único reto es acabar con la guerra y con el régimen de Rusia. Acabaremos con él y todo será cripto", vaticina.
La primera 'criptoguerra' del mundo
La penetración de las criptomonedas en la guerra de Ucrania ha llegado hasta tal punto que medios como el Washington Post ya la han calificado como "la primera criptoguerra del mundo". Cada bando está utilizando las criptos como una divisa que no está regulada ni tiene fronteras; como en todo, hay dos caras de la misma moneda. Por un lado, se están utilizando para aumentar los recursos y ayudas para los ucranianos. Por el otro lado, también es una figura clave para que Rusia sortee las sanciones económicas.
Sin embargo, esta no es excusa para condenar a las criptomonedas. Como en todo sistema descentralizado, lo bueno y lo malo es que no se posicionan. La clave está en cómo se utilicen.
No hay sistema perfecto, pero será difícil olvidar el importante papel que están teniendo las criptomonedas en la guerra de Ucrania. Del mismo modo que internet ya es un agente más en todos los conflictos, los criptoactivos y el blockchain lo serán cada día más. Esta puede ser la "primera criptoguerra" del mundo, pero es poco probable que sea la última.