Se esperaba que Uncharted (Ruben Fleischer, 2022), la adaptación del famoso videojuego de Naughty Dog (2007-2017) con Tom Holland (Cherry), fuese un éxito económico por la cantidad de gamers que lo tienen en un altar lúdico. Con un presupuesto bastante alto para una película de este estilo, 120 millones de dólares cuando Sonic (Jeff Fowler, 2020), Mortal Kombat y Resident Evil: Bienvenidos a Racoon City (Simon McQuoid, Johannes Roberts, 2021), por ejemplo, costaron 90, 55 y 25 respectivamente, ha recaudado 139 hasta ahora en la taquilla mundial.

Que una película recupere lo que sus productores han gastado en realizarla basta para justificar la inversión; y, si se llevan unos billetes adicionales, fantástico. Pero, si al menos logra doblar su coste en las entradas de cine, se considera un triunfo como operación comercial y asegura el derecho a tener continuaciones si sus responsables lo estiman oportuno. Así las cosas, puede que Uncharted aún deba demostrar sus posibilidades financieras, pero hay buenas perspectivas. Y las escenas poscréditos la han preparado para tal eventualidad.

Algo que no ha gustado a ciertos jugadores de la adaptación de ‘Uncharted’

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Sony

Uno de los motores dramáticos del filme de Ruben Fleischer (Zombieland: Mata y remata) es la relación de Nathan Drake (Tiernan Jones y Tom Holland) con su hermano Sam (Rudy Pankow), dos huérfanos a los que separan por el comportamiento incorregible del primero. Al principio, el uno pierde el interés por reencontrarse con el otro porque piensa que le ha descuidado cuando son adultos. Luego, Victor Sullivan (Mark Wahlberg) le ofrece la oportunidad de buscarle y, por la intervención de Chloe Frazer (Sophia Ali), le confiesa que le han asesinado.

Pero, en una de las escenas poscréditos de Uncharted, descubrimos que Sam Drake todavía vive, se encuentra encarcelado y aún trata de contactar con Nathan. Un giro que no ha satisfecho a algunos seguidores de las aventuras originales porque en las mismas no ocurre hasta la quinta entrega, Uncharted 4: El desenlace del ladrón (2016). “La película comete el error de apretar el gatillo en esta revelación sin permitir que pase suficiente tiempo para que tenga un significado emocional real”, dice Baker Husein en Screen Rant, por ejemplo.

Tal revelación, según él, “fue realizada magistralmente por Naughty Dog” y “un shock para los jugadores”, mientras que “se sintió apresurada en la película”; la cual “presenta a Sam, le permite a la audiencia creer que está muerto y luego revela que está vivo, todo en una sola película”. Y “hubiera sido mejor ejecutado si el equipo creativo detrás de la película lo hubiera guardado para una secuela o una trilogía”. De modo que “terminó desperdiciando un punto de la trama que podría haber tenido más impacto en el futuro”.

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Comprender el desarrollo emocional de Nathan Drake en la película

Pero la trayectoria del Nathan Drake de Tom Holland que le marca el guion de Rafe Judkins (Agents of SHIELD), Art Marcum y Matt Holloway (Iron Man) depende en gran medida de lo que experimenta ante las informaciones de su hermano. Y un volantazo final sobre este, con la intención de allanarle el camino a una secuela de Uncharted en la que lo más previsible es que los Drake se acaben reencontrando, supone una sorpresa que entraña todo el sentido del mundo. Y un solo largo debe ser autónomo en este aspecto.

Además, si los jugadores pudieron aguardar a las quintas andanzas de Nathan Drake para enterarse de que Sam sigue en pie, las historias no suelen extenderse tanto en el cine, y reunir a estos personajes emparentados en una segunda película, previéndolo en los últimos minutos de la anterior, resulta perfectamente razonable. En especial, si hasta Uncharted 4, los gamers ni siquiera estaban al corriente de que el protagonista “tenía un hermano en primer lugar”. Conque, por otra parte, el planteamiento del filme de Ruben Fleischer es distinto.