Nadie puede negar que No mires arriba (Adam McKay, 2021), el largo apocalíptico de Netflix con una sátira social feroz y un repartazo encabezado por Jennifer Lawrence (La gran estafa americana) y Leonardo DiCaprio (Titanic) como los astrónomos Kate Dibiasky y Randall Mindy, es el que más está dando que hablar en las últimas semanas. Las redes sociales llevan días con esta obra del director de La gran apuesta (2015) y El vicio del poder (2018) como asunto de conversación; y ahora, el astrofísico Neil deGrasse Tyson ha decidido intervenir en él también.
Teniendo en cuenta que el incidente desencadenante de la trama del filme es el descubrimiento de que un cometa desmesurado va a estrellarse contra la Tierra y destruir nuestra civilización, no es de extrañar que al famoso neoyorkino le haya interesado verla. A él le conocemos, en especial, como divulgador científico y anfitrión de las series documentales Cosmos: A Space-Time Odyssey y Cosmos: Otros mundos (Ann Druyan y Steven Sotter, 2014, 2020) o por sus dos apariciones en la comedia The Big Bang Theory (Chuck Lorre y Bill Prady, 2007-2019).
La elocuencia de Neil deGrasse Tyson sobre ‘No mires arriba’
La popularidad de Neil deGrasse Tyson le ha convertido en un referente en la cultura globalizada como para invitarse a participar además en Stargate: Atlantis (Robert C. Cooper y Brad Wright, 2004-2009) o la película Batman v Superman: El amanecer de la Justicia (Zack Snyder, 2016), a doblar a personajes en Gravity Falls (Alex Hirsch, 2012-2016) o BoJack Horseman (Raphael Bob-Waksberg, 2014-2020) y a sí mismo en Los Simpson (Matt Groening, James L. Brooks y Sam Simon, desde 1989) o Padre de familia (Seth MacFarlane y David Zuckerman, desde 1999).
Así, nada hay de extraño en que se le preste atención a lo que piensa sobre el largo de Adam McKay. El pasado 29 de diciembre, tuiteó lo que sigue: “Finalmente, vi la película de Netflix No mires arriba, una historia ficticia de una nación distraída por la cultura pop y dividida sobre si prestar atención a las terribles advertencias de los científicos. Todo lo que sé sobre ciclos de noticias, programas de entrevistas, redes sociales y política me dice que la película era, en cambio, un documental”. Al margen de las 86.000 y pico reacciones que ha logrado, parece difícil discutir su elocuencia.
Algo sabe el famoso astrofísico sobre entrevistas televisivas y oídos sordos
No en vano, Neil deGrasse Tyson, que suma 14 millones de seguidores en Twitter, ha sido invitado habitual en programas estadounidenses como The Tonight Show (desde 1954), Late Night (desde 1982), The Daily Show (desde 1996), Real Time with Bill Maher (desde 2003), The Colbert Report (2005-2014), The Rachel Maddow Show (desde 2008) y otros; conque algo sabrá, como mínimo, sobre lo que sienten sus ficticios colegas Kate Dibiasky y Randall Mindy durante las entrevistas de Brie Evantee (Cate Blanchett) y Jack Bremmer (Tyler Perry).
Por otra parte, No mires arriba se ríe amargamente, hasta provocarnos la más absoluta desesperación, del rostro más cortoplacista, superficial y estúpido en resumidas cuentas del mundo contemporáneo, que conduce a la frustración de aquellas personas que intentan impedir un trágico desenlace para nuestros esfuerzos progresistas mientras muchos hacen oídos sordos. Por ejemplo, con la contaminación, la antropogénesis del cambio climático y las consecuencias devastadoras que tendrá si no le ponemos un freno con resolución.
Neil deGrasse Tyson es consciente de lo que entraña la propuesta cinematográfica de Adam McKay y, por tal razón y según su propia experiencia divulgativa, considera que el filme de Netflix da en el clavo hasta el punto de que su sátira se aproxima tanto a la realidad presente que se asemeja a un documental. Sus palabras en Twitter son una hipérbole, por supuesto; el astrofísico se expresa exageradamente para hacer énfasis en lo que quiere decir. Pero la cuestión es, por desgracia, que no erra el tiro ni por asomo.