Intel y su nuevos ultrabooks, o más bien el intento de Intel por crear una plataforma para los fabricantes de PCs que les permitan desarrollar portátiles ligeros y competir contra Apple en una gama de portátiles única como es el MacBook Air. Samsung tiene su Serie 9, un muy buen portátil pero con un precio demasiado alto para competir contra el MacBook Air. Ya nos comentó Luis hace pocos días que este tipo de terminales no lograrían mantener el precio de los US$1000, una barrera de precio final que se han marcado para dar una posibilidad de competencia con los MacBook Air.
Es el principal problema para el mercado de los portátiles, Apple aunque aun está lejos de ser el fabricante que portátiles vende, se acerca peligrosamente no solo con sus portátiles como el MacBook Air o Pro, si no también con terminales como el iPad, que poco a poco han ido comiendo el mercado a los ordenadores portátiles. Intel no ha logrado entrar al mercado de las tablets, una oportunidad perdida de las que seguramente se arrepentiran en un futuro no muy lejano, mientras quieren contraatacar junto a otras marcas para que por lo menos en el tema de procesadores portátiles, sigan siendo los primeros.
Cuando el precio final es un factor importantísimo, las noticias de que estos ultrabooks no llegasen a ser del mismo, o de un precio menor que el de los portátiles de Apple es un jarro de agua fría para los fabricantes. Imagina que --por ponerte un ejemplo-- Asus lanza su Asus UX21 por un precio superior al MacBook Air porque sus componentes, especialmente unidad SSD y procesador, son demasiado caros. La mayoría de personas que busquen un portátil de este tipo de características irán a por un MacBook Air por varios motivos: llevan bastante tiempo en el mercado, usan hardware de última generación, su relación calidad/precio es buena, se le puede instalar Windows (si de verdad se necesita).
Pero Intel sigue empeñada en anunciar que lograrán marcar el precio orientativo de los US$1000, y yo añadiría aunque les haga perder dinero, porque recuerda que esto no es una guerra contra el MacBook Air (que usan los procesadores Core i5 e i7 de Intel), si no una lucha para captar a los usuarios que comprarían una tablet por ser fáciles de transportar y ligeros, más que un portátil tradicional.
Hay una gran incógnita con este tipo de portátiles, ¿lograrán sobrevivir a las tablets? Ya están comiendo mercado al PC, el MacBook Air parece imbatible desde este punto de vista, pero inundar el mercado con portátiles similares no es que funcionase muy bien en el pasado. Mira el efecto de los _netbooks_, 9 o 10 meses de compras compulsivas para que al final estos portátiles acabaran cogiendo polvo en un cajón, un tipo de portátil que en tan poco tiempo estaba tan saturado que los modelos más baratos eran bastante malos, aunque acabasen siendo de los más vendidos.
Intel tiene la llave para hacer que estos portátiles sean más baratos, ¿pero cuánto estarías dispuesto a pagar por un ultrabook? Miremos los MacBook Air, tenemos 11 pulgadas por 949 euros, de 13 pulgadas por 1249 euros. Un margen interesante para los fabricantes de PCs sería, por lo menos, quitarle 200 euros a estos precios, sobre todo al de 13 pulgadas. No cabe duda alguna que los portátiles que veríamos por estos precios no serían de aluminio como el MacBook Air, volveríamos al plástico tradicional, tampoco veríamos aleaciones de metales como el Samsung Serie 9, tendría unos materiales más simples para controlar el precio.
Veo bastante interesante pagar unos 800 euros por un portátil de 13 pulgadas, con uno de los nuevos Core i5 y siendo un ultrabook.