Los niños suelen tener insignificantes talentos que resultan muy graciosos. Antes, los padres llegaban al adiestramiento para lograr capturar orgullosamente a su hijo en una cinta de vídeo que acabaría emitiéndose en el programa de vídeos caseros de turno.
Ahora esos programas parecen haber pasado de moda, al menos en algunos países -America's Funniest Home Videos lleva casi 20 años en antena-, y YouTube ha terminado por acogerlos a todos. Más de un adulto ahora maldice al inventor de la videocámara por haberle arruinado la infancia con un vídeo que no paró de repetirse durante años.
Eso sí, yo ya estoy ensayando mi mirada maligna. ¡Es tremenda!
Enlace: Baby Gives The Evil Eye | Vía: Fresqui