Hace unos días compré el adaptador de mini-DVI a VGA para el MacBook con la intención de usar un monitor externo cuando la ocasión lo requiera y, como siempre, el hardware del portátil de consumo de Apple me ha vuelto a dejar boquiabierto al comprobar lo bien que funcionan las cosas cuando están bien hechas.
Este fin de semana, en uno de esos momentos de desesperación que sufren los niños pequeños cuando se aburren, tuve que ceder el ordenador para tareas menos interesantes pero no menos divertidas como es ver una película de dibujos animados aprovechando la unidad lectora de DVD. Entonces recordé que llevaba encima el adaptador y que la tele de la que disponíamos era una Samsung de 37" con entrada VGA por lo que en cuestión de segundos los tenía conectados con el resultado que podéis ver en la imagen adjunta:
Sin problemas, sin necesidad de instalar software adicional, todo funciona a la primera... ¿he dicho alguna vez que me encantan los Mac?
