Top Doctors es el claro ejemplo de esas empresas tecnológicas que pasan al siguiente nivel de emprendimiento. La compañía, de origen catalán, que cambió su domicilio fiscal a Madrid –por la investabilidad política de su ciudad natal– pasó a estar afincada oficialmente en Estados Unidos allá por 2018. Concretamente a Delaware. Al igual que hiciera Cabify, la región era atractiva en términos fiscales e inversores. Porque mucho antes de la pandemia, el sector edtech ya llamaba la atención. Mucho antes de la pandemia, Top Doctors ya iba bien. Ahora va mucho mejor. Tanto que acaba de cerrar la tercera ronda de financiación de 13 millones de dólares; su mayor récord desde su fundación en 2012.
El francés Impact Partners y el fondo catalán ICF Venture Tech II pasan, de esta manera, a formar parte del accionariado de Top Doctors. Esa que creó un servicio digital de médicos antes de que fuese necesario, o al menos de los que sobrevivieron a los primeros pasos del sector. También antes de que la cuestión de que la despoblación de las zonas rurales fuese tema de portada. Según cifras de la compañía, y en palabras de Alberto,
El francés Impact Partners y el fondo catalán ICF Venture Tech II pasan, de esta manera, a formar parte del accionariado de la tecnológica. Esa que creó un servicio digital de médicos antes de que fuese necesario. También antes de que la cuestión de que la despoblación de las zonas rurales fuese tema de portada. Según cifras de la compañía y en palabras de Alberto E. Porciani, CEO de Top Doctors, "el 46% de los pacientes que recurren al servicio no están localizados en grandes ciudades". Sería, por tanto, una forma de acercar los dos mundos a través de un sistema tecnológico.
De momento, Top Doctors está en ocho ciudades de tres continentes diferentes. Y seguirán así por lo pronto. Con la financiación, el objetivo de Top Doctors es ampliar su capital tecnológico y de empleados. También de invertir en la parte de negocio que más réditos aporta a la compañía.
Top Doctor funcionaría como un repositorio de médicos de la sanidad privada –ahora en auge tras la pandemia– en el que, a través de rocomendaciones y auditorías, dicen contar con los mejores especialistas de cada especialidad.
Los pacientes solo tendrán que buscar al médico y pedir cita, en caso de tener seguro privado, los pagos se articularán a través de la sociedad correspondiente. Top Doctors solo percibiría ingresos en caso de haber un prepago o consulta de telemedicina. De aquí a un tiempo, la división B2B es la genera la mayor parte de los beneficios a la compañía y la que prevé facturar 16 millones de dólares para 2021. Servicios de gestión de citas y pacientes para hospitales o médicos concretos para la digitalización de la sanidad.
"El efecto del coronavirus en la telemedicina ha explotado", apunta el CEO de Top Doctors, "con crecimientos de casi 90 veces respecto a lo registrado antes de la pandemia". Y es una tendencia que se está dejando ver en la industria de la medicina. Sanitas, Además o Mapfre se han subido al carro con sus propias versiones de sanidad digital. También las grandes telcos, con Movistar Salud o la versión de MásMovil interfiriendo en uno de los negocios más apetecibles durante y tras la pandemia.