Un F-22 Raptor de la Fuerza Aérea de Estados Unidos se robó las miradas del mundo el sábado tras derribar el supuesto globo espía chino que sobrevoló Norteamérica durante días. Curiosamente, fue la primera muerte aire-aire para el caza de quinta generación desde su estreno en combate en 2014. Algo que resulta por demás llamativo, si consideramos que la aeronave de Lockheed Martin ya ha tenido participación activa en conflictos bélicos.

El uso del caza furtivo estadounidense en esta misión no ha estado exento de burlas, incluso dentro de la misma comunidad aeronáutica. Lo anterior, debido a que su primera muerte aire-aire no fue contra un rival de características desafiantes —y supuestamente similares— como un Sukhoi Su-57 ruso o un Chengdu J-20 chino, sino, básicamente, contra un objeto incapaz de oponer resistencia.

Queda claro que los memes que han circulado por la web desde el pasado fin de semana no le quitan mérito al operativo. La utilización del F-22 Raptor para derribar el supuesto globo espía chino no fue por capricho, sino por necesidad. Las condiciones del vuelo del objeto intruso, que los asiáticos aseguran que no era más que un globo meteorológico que se salió de curso, eran desafiantes, y ningún otro caza de la USAF en servicio era capaz de llegar lo suficientemente alto como para interceptarlo.

Según informó el Departamento de Defensa de Estados Unidos, el F-22 Raptor que concretó el derribo del globo chino pertenecía al 1st Fighter Wing de la Base Aérea Langley de la Fuerza Aérea, en Virginia. El caza de quinta generación disparó un misil AIM-9X Sidewinder desde unos 58.000 pies de altura (casi 18.000 metros), cuando el blanco estaba navegando en una altitud de entre 60.000 y 65.000 metros (18.000 a 21.300 metros, aproximadamente).

Los restos del equipamiento chino cayeron a menos de 10 kilómetros de la costa de Carolina del Sur, sin que se reportaran heridos. Ayer, la Armada de Estados Unidos comenzó el proceso para recuperar los restos del agua para su posterior análisis y estudio.

¿Por qué el F-22 Raptor usó un misil y no sus municiones de 20 mm?

F-22 Raptor | globo espía chino

Ni bien se conoció que el supuesto globo espía chino estaba sobrevolando territorio de Estados Unidos, se especuló mucho sobre cómo podría ser derribado. De hecho, les contamos en Hipertextual que, en principio, la tarea se presentaba como prácticamente imposible. No solo porque el globo llegó a volar a 90.000 pies de altura, fuera del alcance de cualquier caza, incluso de un F-22 Raptor. Si no porque cuando comenzó a descender y a ser más visible a simple vista, todavía se encontraba sobre áreas pobladas. De modo que un intento de derribo podía representar un peligro mayúsculo para el público.

La elección de las armas también representaba un desafío, por las características propias del blanco a atacar. Los misiles superficie-aire MIM-104 Patriot pueden derribar objetos a gran altura, pero no están preparados para impactar aquellos que no tienen movimiento relativo al viento. Por ende, la única opción era esperar que el supuesto globo espía chino llegara a la costa, e intentar un derribo sobre el agua.

A la altura que volaba el sábado, las cosas ya eran más “sencillas” para el F-22 Raptor. En los vídeos divulgados por TV y en redes sociales se aprecia cómo el piloto del caza de quinta generación rodea su objetivo en un par de oportunidades antes de colocarse en posición de ataque. Una vez liberado el AIM-9X Sidewinder, era solo cuestión de segundos hasta que el equipamiento chino resultara destruido y cayera al agua sin remedio.

La explicación

Una de las grandes preguntas que dejó el evento fue por qué no se intentó explotar el globo con las municiones de 20 milímetros del cañón rotativo del F-22 Raptor, en lugar de usar un misil buscador de calor. Según el escritor y exaviador militar C.W. Lemoine, esto se debería a que el uso del AIM-9X ofrecía un “probabilidad de muerte” más alta.

“Un globo de este calibre no es algo que simplemente puedas hacer estallar. Si solo le haces agujeros, se mantendrá en el aire. De hecho, es probable que se vuelva todavía más impredecible, porque va a comenzar un descenso lento, dependiendo de qué tan grandes sean los hoyos. Estamos hablando de municiones de 20 milímetros, que no importa si son incendiarias y de alto poder explosivo. Simplemente, no puedes derribar un globo de forma confiable con una ráfaga de 20 milímetros, y ese es el problema. Tienes un área muy pequeña en la que debes interactuar con este objeto y asegurarte de derribarlo. Y no puedes solo sentarte allí y tratar de dispararle a 60.000 pies del suelo, que es una gran altura para cualquier avión”, explicó.

YouTube video

El experto indicó que la elección del AIM-9X para realizar el ataque desde el F-22 Raptor fue la más lógica. Si bien reconoció que desconocía si el misil podía fijar el blanco sobre el globo, debido a sus características, sí creía que el disparo se había realizado sobre el equipamiento que cargaba. Así, se habría aprovechado la combinación del aire frío del ambiente con la reflectividad generada por los paneles solares del dispositivo chino para ajustar el punto de mira e intentar el disparo. Vale mencionar que el Sidewinder cuenta con una ojiva de fragmentación que se detona al aproximarse a su objetivo, maximizando su poder de destrucción.

La primera muerte aire-aire del F-22 Raptor

El F-22 Raptor de Lockheed Martin | Foto: U.S Air Force en Flickr

Como ya dijimos, el F-22 Raptor hoy es la punta de lanza a la hora de hablar de cazas de quinta generación. La aeronave de Lockheed Martin se ha convertido en la joya de la Fuerza Aérea de Estados Unidos gracias a su tecnología furtiva, su gran maniobrabilidad por el uso del empuje vectorial, y a su capacidad de Supercrucero; es decir, de volar sostenidamente a velocidades supersónicas sin necesidad de utilizar los posquemadores. Las autoridades norteamericanas son muy celosas de su avión estrella, cuya exportación está prohibida por ley para evitar que se divulguen sus sistemas secretos.

Pese a ser de los aviones más letales del mundo, era muy curioso que no registrara ninguna muerte aire-aire en todos sus años de servicio. Y no por falta de acción, ciertamente. Si bien el F-22 Raptor fue introducido en 2005, logró Capacidad Operativa Plena en 2007. Pero su debut en combate se dio recién en 2014, cuando la USAF lo utilizó como bombardero durante la guerra civil de Siria. En sus primeras misiones, el caza furtivo fue aprovechado para ataques con bombas de 1.000 libras guiadas por GPS.

Solo en Siria, el F-22 Raptor completó más de 200 misiones, en su mayoría bombardeando posiciones terrestres. Aunque también cumplió labores brindando apoyo aéreo cercano a las tropas del Ejército estadounidense y sus aliados. Y si bien la aeronave de Lockheed Martin también se utilizó para repeler la presencia de aviones rusos, sirios e iraníes durante el conflicto, nunca se involucró en un combate aéreo cercano (dogfight) que le significara el derribo de un enemigo.

También es una realidad que, previo a su bautismo de fuego en tierras sirias, el F-22 Raptor participó de múltiples misiones de intercepción de bombarderos rusos que se acercaban al espacio aéreo de Estados Unidos. Pero no fueron más que encuentros cercanos que históricamente ambas potencias han llevado a cabo para provocarse mutuamente.

Un objetivo que se hizo esperar casi 18 años

El F-22 Raptor de Lockheed Martin | Foto: U.S Air Force en Flickr

Previo al derribo del globo espía chino, una de las últimas intervenciones oficiales en combate del caza furtivo se dio a fines de 2017. Por entonces, la aeronave volvió a cumplir el rol de bombardero para atacar plantaciones e instalaciones de procesamiento de opio en Afganistán, bajo control Talibán.

Tuvieron que pasar casi 18 años desde su introducción en servicio para que el F-22 Raptor obtuviera su primera muerte aire-aire. Contra el rival más inesperado, sin dudas, pero posiblemente obteniendo algunos otros lauros muy interesantes. El Pentágono todavía no lo ha confirmado, pero el derribo del globo chino sería el air-to-air kill a mayor altitud de la historia; y también representaría el primer derribo aire-aire sobre territorio estadounidense.

En cuanto a lo último, no olvidemos que, el 11 de septiembre de 2001, se dijo que el Vuelo 93 de United Airlines supuestamente había sido derribado por dos F-16 de la Fuerza Aérea estadounidense. Sin embargo, está comprobado que eso no ocurrió. Es cierto que dos cazas fueron desplegados para dicha misión bajo las órdenes del vicepresidente Dick Cheney, pero el avión se estrelló tras la revuelta de los pasajeros contra los secuestradores, antes de que lo alcanzaran. Además, las aeronaves no estaban armadas, de modo que la única forma de destruir el Boeing 757 era estrellándose contra él.

Pero volviendo al tema central de este artículo, todavía queda mucho por decirse de las capacidades del supuesto globo espía chino derribado por el F-22 Raptor. Seguramente se divulgarán más detalles cuando el Departamento de Defensa complete el análisis de los restos rescatados del agua.