La sonda solar Parker ha dado con una extraña señal en Venus, el segundo planeta del sistema solar. La misión que va de camino a nuestro Sol ha encontrado al hacer una maniobra en Venus que hay señales de radio de baja frecuencia en el planeta.
La sonda solar Parker tuvo que descender a una distancia de 833 kilómetros de la superficie de Venus y ahí fue donde sus instrumentos registraron una señal de radio de baja frecuencia, según explican en Science Alert. En realidad, este suceso no tiene nada de extraño. Es, más bien, un signo de que la misión Parker había atravesado la ionosfera de Venus. Pero, ¿qué es la ionosfera? Se trata de una capa de la atmósfera superior del planeta, pero que también podemos encontrar en otros como la Tierra.
Esta novedad podría parecer poco importante, pero no es así. Esta es la primera vez que un instrumento pudo registrar mediciones directas in situ de la atmósfera superior de Venus en casi 30 años. Además, estos nuevos registros "nos permitirán comprender mejor los cambios de Venus en respuesta a los cambios cíclicos Sol", indican en Science Alert. "Estaba muy emocionado por tener nuevos datos de Venus", comenta en un comunicado de prensa el astrónomo Glyn Collinson, del Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA.
Los datos fueron recogidos el pasado mes de julio. Sin embargo, primero tienen que llegar los datos hasta nosotros y siempre se tarda un poco en analizar los datos que nos llegan. En este vídeo se puede escuchar la señal a la vez que entra la sonda Parker en la ionosfera:
Dos planetas muy similares a la par que distintos
Venus y la Tierra son dos planetas muy similares en tamaño y composición. Pero a la vez tienen muchas cosas que les diferencian. De hecho, se puede decir que Venus es la versión infernal de la Tierra, ya que se trata de un planeta tóxico y abrasador por sus altas temperaturas.
Esas similitudes y diferencias fascinan a los expertos. Especialmente para los científicos planetarios y astrobiólogos, ya que comprender cómo es Venus puede ayudarnos a saber más sobre cómo surge la vida. Y también podría ayudarnos a buscar exoplanetas que sí puedan tener vida más allá de las opciones (sin confirmar) dentro de nuestro sistema solar.
A pesar de toda la información nueva que podría darnos Venus, no es una prioridad en la actualidad. Esto se debe, sobre todo, a que es un planeta al que es imposible enviar una misión a su superficie, al menos por el momento. Ya que no sobrevivirían a los 462 grados centígrados. Por eso, nuestra principal baza para buscar vida en la actualidad es Marte.
Sonda Parker
La sonda solar Parker es una misión de la NASA al Sol. En su camino, el satélite tiene que hacer una serie de acercamientos a los planetas que se encuentren en su camino. La Tierra, Venus y Mercurio sirvieron (y servirán) a la misión a tomar impulso hacia el Sol, que es su verdadero objetivo. Sin embargo, por el camino también va registrando datos de lo que se encuentra. La señal de radio de baja frecuencia con la que se ha topado la sonda Parker es un ejemplo de esto.
La misión Parker buscará respuestas a grandes misterios relacionados con el Sol: qué pasa en la corona del astro y por qué se producen los vientos solares. Para ello cuenta con una protección especial a las altas temperaturas, ya que será el objeto creado por el ser humano que más se acerque al Sol.
¿Vida en Venus?
El pasado mes de septiembre, el planeta Venus protagonizaba una esperanzadora noticia: podría haber vida en las nubes altas de Venus. O, al menos, esa fue la conclusión de una investigación en la que se había encontrado fosfina.
Sin embargo, después se ha seguido investigando al respecto y todo apunta a que seguimos sin evidencias suficientes para afirmar que la vida existe en el segundo planeta del sistema solar. No obstante, los científicos esperaban el acercamiento de la sonda solar Parker, también conocida como Parker Solar Probe, a la superficie de Venus para saber más sobre este tema. También el acercamiento del Solar Orbiter de la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas) debería de aportar más datos. Por el momento, nada hace indicar que haya vida en el planeta nombrado como la diosa romana del amor.
En definitiva, todavía nos queda mucho por saber sobre el planeta Venus; pero poco a poco podremos ir conociéndolo mejor. Y eso podría ayudarnos a saber más sobre la vida en el universo.