¿Hay vida más allá de la Tierra? La búsqueda de vida es una de las cuestiones que investiga la ciencia que más interés suscita. Por el momento, el único planeta en el que sabemos con certeza que tiene vida es la Tierra. Sin embargo, eso no impide a los científicos buscar vida. Y, sobre todo, buscar vida (no inteligente) en el sistema solar.

En estos momentos el lugar del sistema solar que parece fascinante para encontrar vida es Venus. Se ha encontrado fosfina y se tendrán que realizar más investigaciones para saber si proviene de procesos biológicos, aunque no se descartan otros orígenes para este compuesto. Ya sabemos cómo es Venus, pero ¿cuáles son los ingredientes para la vida?

Ingredientes para la vida

Para que se desarrolle la vida es necesario que haya agua líquida, una fuente de energía y elementos y moléculas biológicamente útiles, indican en ScienceAlert. La fuente de energía suele ser el sol alrededor del que orbita la estrella, que debe estar lo suficientemente cerca para que el agua no se evapore y suficicientemente lejos para que no se congele. También dependemos de la existencia de un campo magnético para proteger a la vida de los rayos solares y cósmicos.

Entonces, ¿qué lugares cumplen con esas características en nuestro sistema solar? Además de la peculiaridad de Venus que nos hemos encontrado (es el planeta más caliente, a pesar de estar más lejos que Mercurio del Sol), se suele hablar de que podría haber vida en otros cuatros sitios del sistema solar: Marte, Europa, Encelado y Titán.

Marte

Este es el lugar que hemos estado observando en busca de vida durante las últimas décadas. Gracias a estas investigaciones ahora sabemos que sus días son muy similares en duración a los de la Tierra (24,5 horas), que tiene casquetes polares que se expanden y contraen durante las estaciones (sí, también las tiene) y que hubo agua líquida en el pasado.

De hecho, hace casi dos años se publicó un estudio que afirmaba que bajo la superficie marciana es posible que haya un lago en el polo sur. Esto significaría que, posiblemente, pudiera haber vida allí. Aunque no estamos seguros y los científicos trabajan para saber más, si hubiera vida en Marte probablemente estaría bajo su superficie.

Además, se han encontrado ciclos de metano. Este compuesto puede ser producido por procesos biológicos, pero también por procesos geológicos. Cualquiera de las dos posibles causas sería muy interesante para los investigadores porque, más allá de si hay vida o no, se pensaba que Marte es un planeta inactivo.

Por último, la atmósfera de nuestro vecino rojo no es suficiente para proteger a la vida, ya que es seca y muy fina. Y casi toda su composición es a base de CO2. No obstante, como apuntábamos antes: si hay vida, seguramente se habrá desarrollado bajo la superficie, para tener esta protección.

Europa

europa
NASA / Jet Propulsion Lab-Caltech / SETI Institute (Wikimedia)

La vida en el sistema solar también se podría haber desarrollado en Europa. Este satélite que orbita al gaseoso Júpiter fue descubierta por Galileo Galilei en 1610. Es un poco más pequeña que la luna de la Tierra y orbita al planeta a una distancia de unos 670.000 km una vez cada 3,5 días.

Europa está constantemente comprimida y estirada por los campos gravitacionales de Júpiter y las otras lunas descubiertas por Galileo, un proceso conocido como flexión de mareas. En el caso de Europa se cree que sí tiene actividad geológica. Porque la fuerte flexión de las mareas calienta su interior rocoso y metálico, y así es como se mantiene parcialmente fundido.

La superficie de Europa es hielo. Por lo que muchos científicos piensan que debajo de la superficie congelada hay una capa de agua líquida, un océano global, que no se congela debido al calor que se flexiona y que puede tener más de 100 kilómentros de profundidad.

"La evidencia de este océano incluye géiseres que hacen erupción a través de grietas en la superficie del hielo, un campo magnético débil y un terreno caótico en la superficie, que podría haber sido deformado por las corrientes oceánicas que se arremolinaban debajo", apunta en Gareth Dorrian, estudiante posdoctoral en la Universidad de Birmingham. "Este escudo helado aísla el océano subterráneo del frío extremo y el vacío del espacio, así como de los feroces cinturones de radiación de Júpiter".

¿Y qué podríamos encontrar en este helado planeta? Quizás haya respiraderos hidrotermales y volcanes del fondo del océano. "En la Tierra, tales características a menudo sustentan ecosistemas muy ricos y diversos", comenta Dorrian.

Encélado

Como Europa, Encélado es otro satélite cubierto de hielo con un océano subterráneo de agua líquida. Encélado orbita Saturno y se cree que podría ser habitable porque se descubrió, por sorpresa, que tenía enormes géiseres cerca del polo sur. "Estos chorros de agua escapan de grandes grietas en la superficie y, dado el débil campo gravitacional de Encélado, se esparcen al espacio. Son una clara evidencia de una reserva subterránea de agua líquida", indica Dorrian.

Esta investigación encontró cosas muy interesantes. Como agua, moléculas orgánicas, y lo más importante: "pequeños granos de partículas de silicato rocoso que solo pueden estar presentes si el agua del océano subterráneo estaba en contacto físico con el fondo del océano rocoso a una temperatura de al menos 90ºC", explica Dorrian.

"Esta es una evidencia muy sólida de la existencia de respiraderos hidrotermales en el fondo del océano, que proporcionan la química necesaria para la vida y fuentes de energía localizadas", afirma el experto.

Titán

Titán es la luna más grande de Saturno y la única luna del sistema solar con una atmósfera sustancial. Ya hemos comentado que el hecho de que uno de estos lugares tenga la protección de la atmósfera es muy importante para el desarrollo de la vida. "Contiene una espesa neblina naranja de moléculas orgánicas complejas y un sistema meteorológico de metano en lugar de agua, con lluvias estacionales, períodos secos y dunas de arena en la superficie creadas por el viento", cuenta Dorrian.

El principal elemento de la atmósfera es el nitrógeno y es muy importante para que se formen las proteínas en todas las formas de vida que conocemos. Las observaciones, además, han dado con la presencia de ríos y lagos de metano y etano líquidos. Y posiblemente Titán cuenta con criovolvanes, que son como volcanes, pero que hacen erupción de agua líquida en vez de lava.

Entre nuestro astro rey y este satélite hay mucha distancia. Esto significa que las temperaturas en la superficie de Titan son muy bajas, de unos -180ºC. Es decir, demasiado frías para el agua líquida. A pesar de esto, contiene tantas sustancias químicas para la vida, que todo el mundo especula con la posibilidad de que sí la haya. Eso sí, es bastante probable que "con una química fundamentalmente diferente a la de los organismos terrestres", apunta Dorrian.

Aunque hayamos encontrado fosfina en Venus, este sigue sin ser el único lugar del sistema solar en el que debemos buscar vida. Hay más opciones, tan cerca... Quizás nunca encontremos vida inteligente (o sí, quién sabe), pero lo más probable es que sí encontremos vida. Vida que a simple vista no se ve, pero que ha conseguido desarrollarse en mundo que jamás imaginamos.