El pasado 29 de julio, Sundar Pichai, CEO de Google; Tim Cook, su homólogo en Apple; Jeff Bezos, fundador de Amazon; y Mark Zuckerberg, confundador y máximo responsable de Facebook, comparecieron por vía telemática ante el Subcomité Antimonopolio del Poder Judicial del Congreso de Estados Unidos.
El objetivo: inquirirles sobre las prácticas monopolísticas que el Congreso lleva investigando desde hace más de un año, y que ha ocasionado sanciones en Europa.
La comparecencia tuvo un tono uniforme en los discursos de los que son, a la postre, cuatro de los hombres más poderosos del mundo. Todos arguyeron que no son tan grandes como parecen por sus cuotas del mercado y en casos indefendibles, apelaron a que el fin de sus compañías era “prestar el mejor servicio a sus usuarios” -palabras de Pichai, de Google- que “las empresas grandes son necesarias porque hay cosas que las pequeñas no pueden hacer, como generar tanta riqueza” -Bezos, por Amazon- o que si directamente no existieran, habría otras “compañías extranjeras que ocuparían su oposición” -Zuckerberg, por Facebook, en clara referencia a empresas chinas-.
Tras la investigación -que tiene un marcado carácter político y que aún tendría que cambiar mucho para trasladarse a leyes que en un momento dado pudieran ‘trozear’ estas compañías- se esconden patrones comunes. La práctica generalizada de estas ‘Big-Tech’ de adquirir star-ups y competidores que puedan suponer una competencia, o el uso de sus plataformas para frenar la expansión de otras empresas.
¿Pero qué ha hecho cada una hasta llegar aquí? Este es un viaje por sus principales acusaciones.
Amazon: el gigante del comercio acusado de aprovecharse de sus proveedores
Jeff Bezos fue, según todos los analistas, el CEO más exprimido durante la comparecencia. Junto con Zuckerberg respondía al máximo número de preguntas (16), frente a la 13 del responsable de Google o las 7 de Tim Cook, que parece que fue el que salió más airoso -no en vano, su intervención duró 25 minutos frente a la media de 50 de los demás-.
El punto de partida: No hace faltad decir que Amazon es la mayor empresa del mundo en el apartado del comercio electrónico. Cada año envía más de 5.000 millones de paquetes solo a sus clientes Prime, desde 2019 es la marca con mayor valoración de mercado del mundo, a lo que se suman sus negocios en la nube. Cuadriplica el volumen de mercado de su mayor competidor en Estados Unidos, Walmart, y triplica el de que es ya su mayor competencia mundial, la china Alibaba.
¿Qué se le reprocha?
Debilitar hasta adquirir rivales: Varias cosas, pero todas van ligadas con su poder absoluto en el sector que le permite hacer prácticas que o bien no están bien vistas o están prohibidas en las leyes de libre mercado. Por ejemplo, hace unos años se hizo conocido el caso de Diapers.com, un retail especializado en productos para bebé y en concreto, en la venta de pañales a bajo precio. Amazon consiguió vender pañales a precio por debajo del mercado para acabar aislando a la competencia. Amazon acabó comprando después la matriz de Diapers, absorbiéndola.
Espionaje a sus propios vendedores: Las propias políticas de Amazon prohíben que la plataforma trabaje con datos de sus vendedores, pero parece evidente que lo ha hecho para saber qué productos lanzar -y a veces copiar sin disimulo- para su marca blanca Amazon Basics. A este respecto, Bezos respondió antes el Congreso que “no podía asegurar que su política no se hubiera incumplido”.
Copia productos de star-ups tras conocer sus cuentas: Wall Street Journal también ha publicado varios casos de star-ups que, tras negociar con Amazon supuestamente con interés en la compra, después han visto cómo lanzaban productos similares.
La defensa: Bezos, el más azotado por las preguntas de los congresistas, basó su defensa en la cantidad de puestos de trabajo y negocio que genera Amazon, y defendiendo que el volumen y tamaño de su empresa es así porque si no, no podría existir como tal. "Me encantan los emprendedores de garaje, yo era uno. Pero al igual que el mundo necesita pequeñas empresas, también necesita grandes. Hay cosas que las pequeñas empresas simplemente no pueden hacer", dijo.
Google: la mayor empresa de publicidad del mundo que nos encierra en su ecosistema
El punto de partida: el dominio de Google como buscador es aún más dominante que el de Amazon, con más del 90% de la cuota de mercado en Estados Unidos y más de un 95% en España. A ello se suma toda su gama de servicios adheridos (Gmail, Drive, Meet…) y Youtube, el ecosistema que acaba convirtiendo a Alphabet en la mayor empresa de publicidad del mundo y en un laberinto donde unos servicios te llevan a otros.
¿Qué se le reprocha?
Dominio en la publicidad mundial. Junto con Facebook, ambas se reparten 5 de cada 10 dólares que se mueven cada día en todo el mundo en publicidad online. Una cifra que si hablamos solo de programática sube a 9 de cada 10.
Cerrar su ecosistema: Pero donde hasta ahora más palo le han dado a Facebook es por Android, el sistema operativo dominante en el mundo e imperante en la práctica totalidad de todas las marcas de teléfonos que no son Apple. La UE ya multó a Google con 5.000 millones por aprovechar su posición con Android para marcar por defecto Chrome como su buscador predeterminado, algo que recuerda a las multas que en su momento recibió Microsoft por el impulso de Internet Explorer con Windows.
Compras masivas aunque más discretas: Google también ha comprado muchas empresas y star-ups a lo largo de su vida, aunque seguramente de forma más discreta o con menos renombre que Facebook. Una de las últimas Nest, dedicada a la domótica y la vigilancia, ya fue objeto de sospecha cuando volatilizó sus sistemas existentes para ligarlos a los de Google.
Movimientos del buscador contra la competencia: Google también ha aprovechado su posición dominante en buscadores contra su competencia. O al menos hay sospechas de ello. En 2014, la app de Amazon desapareció una temporada de Play Store, y también fue conocido el caso de Yelp, web que bajó su tráfico orgánico a lo largos de los años conforme iba siendo competencia para las nuevas características de Google Maps.
La defensa: Pichai, con una declaración bastante naíf, insistió ante la Cámara que la intención de Google siempre ha sido “dar el mejor servicio a sus usuarios”. También recalcó la importancia de Android como catalizador de que cada vez más gente tuviera acceso a los teléfonos móviles. "Al utilizar (el sistema operativo para celulares) Android, miles de operadores móviles construyen y venden sus propios dispositivos sin pagarnos ninguna tarifa de licencia. Esto ha permitido que miles de millones de consumidores puedan pagar teléfonos inteligentes de última generación, algunos por menos de 50 dólares", dijo.
Facebook: sin apenas competencia en las redes sociales
El punto de partida: Las redes de Facebook (Facebook, Instagram, Whatsapp y Messenger) ocupan 4 de los 5 puestos más utilizado entre redes sociales de la actualidad, solo con la china WeChat cerca.
¿Qué se le reprocha?
Dominio de redes sociales a base de compras: Todo ello con una política de compra que ahora sabemos que se produjo de forma bastante abrupta y sin mantener políticas de separación de divisiones, como se hizo evidente, por ejemplo en Instagram.
Facebook vs. Instagram: cómo Zuckerberg acabó imponiéndose en su ‘otra’ red social
Si no se compra, se copia: correos de Zuckerberg a los que ha tenido acceso el Congreso muestran que estas prácticas eran un comentario recurrente entre los directivos de la compañía, y que Zuckerbeg también animaba a copiar funcionalidades de otras plataformas, como ocurrió con Snapchat, y ahora parece que ocurrirá con TikTok.
Malas prácticas de privacidad: aunque no es un tema tangente con el monopolio, además de su dominio en la publicidad en internet, ahora sabemos por casos como Cambridge Analytica que sus políticas nunca han sido respetuosas con los usuarios. El año pasado, la Comisión Federal de Comercio de Estados Unidos multó a Facebook con 5.000 millones por estas continuas brechas de seguridad.
La defensa: Zuckerberg fue aparentemente el que menos se esforzó por defenderse en la conferencia, dejando todo su argumentario centrado en el patriotismo. “Si Facebook no fuera americana, habría una compañía extranjera que haría lo mismo que Facebook”, llegó a decir.
Apple: las condiciones de su App Store
El punto de partida: como comentábamos antes, Tim Cook fue el que menos tuvo que responder a los congresistas, en gran parte porque Apple cuenta con unos ingresos más diversificados entre software y hardware, donde sus productos presentan una importante cuota del mercado, pero nunca han sido los mayoritarios en el segmento smartphone.
¿Qué se le reprocha?
La política de su App Store: frente a esto, el uso que Apple ha ido dando a su App Store y su política de cobros, del 30% sobre cualquier pago el primer año y que ya ha sido investigado en Europa, fue el centro de atención. A ello se suman denuncias sobre qué aplicaciones se promocionan más o menos en su ecosistema.
Si no pasas por la App Store, te costará más tener clientes: Todo viene arrastrado desde que en los últimos meses empresas como Spotify o Netflix hayan decidido ‘salir’ de su App Store para no pagar la cuota de Apple. No es que hayan salido como tal, pero un usuario de iPhone ya no puede suscribirse a Netflix directamente desde la tienda de aplicaciones, sino que debe descargarse la aplicación de Netflix, conectarse por navegador a la plataforma, y darse de alta allí, creando una fricción que se ha convertido en el único puente que han encontrado las grandes marcas que, hasta ahora, se han decidido a no pasar por la caja de Apple.
La defensa: Cook se mostró asertivo a la hora de afirmar que las condiciones de su App Store son las que son, y que los cambios desde su lanzamiento han sido para dejar de ganar dinero ellos -hace unos años, el 30% de comisión se mantenía fijo durante los años, ahora es de un 15% después de la primera comisión-. "Tratamos a todos los desarrolladores de la misma manera. Tenemos reglas abiertas y transparentes", dijo.