Cuando parecía que el excitante y hasta cierto punto extenuante panorama de las películas de superhéroes se tomaba un descanso tras los anuncios de la Fase 4 de Marvel o los nuevos trailers del Joker de Joaquín Phoenix -ese con el que DC puede ganar tiempo a la vez que hacer buenas películas mientras reorganiza su propio universo-; la bomba estalló.

Los últimos días de agosto llegaron con las filtraciones y posterior confirmación por parte de los actores implicados de que Spider-Man estaba fuera del Universo Cinematográfico de Marvel. Sony y Marvel han roto su acuerdo de colaboración, ese que en 2015 consiguió devolver al trepamuros a la La Casa de las Ideas, y que hizo que el Peter Parker de Tom Holland se convirtiera en apenas cinco películas en, según parecía, el heredero a largo plazo de Tony Stark.

Ahora todo eso se ha roto. Según las informaciones más concretas, Marvel, que hasta ahora producía y escribía las películas para Sony pero solo se llevaba un 5% de los ingresos brutos más el merchandising, pidió a la empresa japonesa que aumentara ese porcentaje al 30%. Sony rompió la baraja negando la mayor y por lo tanto devolviendo a Parker a sus propias películas, con el objetivo aparente de envolverlo en su propio Universo junto con Venom, Morbius y su cuadrilla de acompañantes.

La situación de Marvel desde el principio era de precaridad en cuanto a este acuerdo. En concreto, desde que a mitad de los 90 vendiera los derechos del hombre-araña a Sony por una cantidad ridícula. De ahí salieron la primera y aplaudida trilogía de Sam Raimi y las denostadas películas de The Amazing Spider-Man, fracaso que hizo que Sony cambiara de rumbo para buscar el apoyo de Marvel.

En los últimos días, al albur de estas noticias, en redes se ha abierto un debate sobre si Disney podría dar un golpe sobre la mesa y comprar Sony Pictures, cerrando así cualquier debate, una opción que es preferible descartar a priori, primero porque no ha salido de la rumorología, y segundo, porque aunque Disney cuente con un músculo económico casi infinito, las vigilancias anti-monopolio propias de Estados Unidos se lo pondrían muy difícil después de hacer lo propio con FOX.

La tortuosa historia de los derechos de Marvel hasta reunir a los Avengers y X-Men

Con el ánimo de muchos fans tocado, nos proponemos ver y analizar desde un punto de vista algo más luminoso cómo puede salir el Universo Cinematográfico de Marvel "bien" parado de esta y qué opciones maneja Sony; partiendo de la base de que viendo los éxitos cosechados (*Lejos de casa ha sido la película más taquillera de la historia del estudio nipón y del personaje), pero valorando también que el mayor rival de Spider-Man puede estar en su propia casa, en Sony, compañía que en los últimos años ha sufrido unos cambios en su junta directiva que, cuanto menos, traen dudas.

Marvel: Un Spider-Man Universo Cinematográfico de Marveldependiente y un Kevin Feige atareado

Marvel tiene un problema importante: Kevin Feige había desarrollado las película del personaje para convertirlo en el futurible líder de los Vengadores. Una de las escenas finales de Endgame que dejaba claro ese paso del testigo de la generación Stark-Rogers a la venidera era aquella en la que, en medio de la batalla final contra Thanos, varios personajes se van pasando el guantelete como si fuera una jugada de la NFL. De Black Panther a Spidey, y por último, a Capitana Marvel. Seguramente la nueva trinidad del futuro marvelita del cine, esa que recoge tanto buena parte del impulso de los cómics como la apuesta por la igualdad y la diversidad que Disney está intentando impulsar, a veces incluso dando demasiado la impresión de que no es más que otro movimiento de marketing.

Elegir a Spider-Man como heredero de Stark tenía su lógica. Él es el personaje más famoso de Marvel de todos los tiempos, y Feige había conseguido con su versión encarnada por Holland reverdecer al Hombre-araña para las nuevas generaciones. Sin contar el drama del Tío Ben, con una tía May nunca vista tan joven, y Tony Stark como padrino del chico.

Pero lógicamente, esto tenía un gran problema. Marvel no era el dueño de Spider-man. ¿Podemos pensar que Feige ha pecado de iluso en lanzar así un personaje del que no tenía el control total? Él ha contado en declaraciones a Variety que las películas que ha podido hacer para Spider-Man en el UCM, han sido “un regalo con el que no contaba”, pero sería atrevido creer que un estudio como Marvel y una mente como la de Feige, constructora de este universo (casi) sin fisuras, se haya dejado enredar tan hasta el fondo en las telarañas de uno de sus personajes favoritos.

Sin embargo, el drama de Marvel puede ser el mismo que el de Sony. El Spider-Man de Tom Holland es un hombre-araña marveldependiente, y en concreto de su universo cinematográfico. Stark es hasta cierto punto un trasunto del tío Ben, el faro que desaparece y que hace que Peter Parker pase de la niñez a asumir sus poderes y sus responsabilidades. La sombra de Iron-man también es el origen de sus primeros villanos (El Buitre y Siniestro), ambos dotados de sus poderes gracias a tecnología de Empresas Stark. En pocas palabras, el Spidey de Holland existe como es dentro del UCM, y eso es algo con lo que también deberá lidiar Sony.

Lo que la salida de Spider-Man deja colgado en el UCM

A partir de aquí se cuentan spoilers sobre las escenas finales de Spider-Man: Far from home

No obstante, no queda duda de que si la situación no da un giro inesperado, la ausencia de Spider-Man en las próximas películas del Universo Cinematográfico de Marvel puede ser extraña. Principalmente porque en las escenas post-créditos de Far From Home es donde se nos muestra que en realidad una parte de los personajes han sido suplantados por Skrulls -en concreto Nick Furia y sus acólitos de S.H.I.E.L.D.- y aunque ya sabemos que los Skrulls son buenos extraterrestres y mejor personas, no como en los cómics, ese cliffhanger de ver a Furia en medio del espacio por no se sabe muy bien qué parecía claramente el inicio del próximo arco argumental del Universo Marvel.

Qué significan las escenas poscréditos de ‘Spider-Man: lejos de casa’

Está claro que el futuro de Marvel a medio plazo pasa por las sagas cómicas -Capitana Marvel, Los Eternos, la llegada de Los 4 Fantásticos o Los Guardianes con Thor son ejemplos evidentes- y el final de Far From Home comenzaba a enseñárnoslo, a la vez que daba otro golpe sobre la mesa: la otra escena post-créditos en la que todo Nueva York conocía la identidad de Peter Parker, capa narrativa con la que también debería partir Sony si no quiere que nadie se quede con cara de idiota en la butaca.

Kevin Feige, presidente de Marvel Studios

Parece evidente que tanto a Marvel como a Sony les interesa no despegarse demasiado, no romper el juguete negando los primeros lo ocurrido con Spidey y los segundos sacándolo del contexto que se ha contado hasta ahora, para no matar a la gallina de los huevos de oro.

Pero volviendo a la revelación skrull, ¿cómo puede el UCM obviar esto y todos los galones que ha dado al trepamuros sin descolocar demasiado a sus fans? La respuesta más cercana quizá sea abrumando. Marvel ha presentado este verano 10 productos nuevos de su Fase 4, la mitad películas y la mitad series, que iremos viendo de aquí a 2021, dentro de poco más de dos años. A ello se suman los anuncios ya oficiosos de Blade, Los 4 Fantásticos, y ver qué hacen con los X-Men y el fastuoso universo mutante.

Los 4 Fantásticos y X-Men ya son parte del UCM: ¿cómo puede introducirlos Marvel?

En otras palabras, Kevin Feige tiene material para alejarse todo lo que quiera y después construir todo de nuevo, quien sabe ya si con las aguas calmadas y con Sony volviendo al regazo de Marvel junto con Spider-Man. Hay que tener en cuenta que Sony ya había amagado en más de una ocasión con volver a recuperar a su personaje más cotizado, cuando lo hizo en 2018, después de que 'muriera' en Endgame y Amy Pascal, entonces responsable de Sony Pictures, dijera a los medios que "no sabía si llorar" por lo que estaban haciendo con él.

Con un mar de personajes por desarrollar el camino a seguir pueden ser lo visto hasta ahora en las series de Netflix. Estas transcurrían según el canon en el mismo mundo y tiempo que el UCM, aunque las referencias entre sí eran mínimas, quedando relegadas a pequeños huevos de pascua y explicaciones en los manuales sobre los canons. Quizá tanto Marvel como Sony opten, por conveniencia, por seguir una rutina similar: un Spider-Man enfrascado en sus aventuras con Venom y compañía mientras en las películas producidas por Marvel los héroes cósmicos, Shang-Chi y compañía proceden sin preocuparse por qué ocurre en la Gran Manazana.

Sony: Spider-Man puede dar mucho por sí solo, aunque el enemigo puede estar al frente

En el otro lado del tablero está Sony, que lógicamente también tiene un problema: el Spider-Man que mejor les ha funcionado en taquilla y también en crítica tras la trilogía de Raimi es el de Holland, que como decimos, está enredado hasta el fondo en el UCM.

Los planes de Sony parece que pasan a medio plazo por aprovechar que Tom Holland tiene dos películas más firmadas e incluir sus historias formando su propio 'spider-verso' con el Venom de Tom Hardy o la planificada Morbius.

Su baza es, como ha podido demostrar a pequeña escala Spider-Man into de Spider-verse, es que el hombre araña y todos sus personajes anexos dan para mucho por sí solos. A Venom, Morbius, Kraven se suman estimaciones que dicen que Sony podría tener cerca de 500 personajes relacionados con Spider-Man entre sus derechos, dado el vasto contenido de todas sus décadas de cómic. Eso, definitivamente, da para mucho y como decimos, puede hacerlo sin necesidad de negar del todo la conexión con el UCM por si a futuro le vuelve a interesar negociar con Disney; o bien construyendo una versión más pegada a las viñetas del héroe, con el desaparecido Tío Ben y otros puntos comunes, además de añadir una versión más oscura y adulta que parece que hasta ahora Disney se ha negado de pleno.

Pero sería también iluso negar que todo este panorama sea beneficioso. Los principales perjudicados del cese de las negociaciones son los seguidores de Spidey, y que Sony tampoco es un seguro a la hora de plasmar películas de superhéroes. Más aún, cuando el hombre que actualmente ejerce como cerebro de Sony Pictures es Tom Rothman. Rothman, productor con solera en la industria tomó el relevo a Amy Pascal hace un par de años, después de desarrollar en su carrera cargos de alta responsabilidad en FOX.

Hasta ahí todo bien. La mala noticia es que Rothman fue el padre desde la producción de algunas de las peores películas que ha dado el cine de superhéroes, y que en muchos casos llevaba el sello de FOX: el Daredevil de Ben Affleck, o el desaprovechado argumento de X-Men Origins: Wolverine. En esta producción en concreto fue fuertemente criticado años más tarde porque descartó la idea de hacer una película de Deadpool en solitario o afirmar que “los superhéroes eran una moda”. El tiempo parece que le quitó la razón. Veremos hasta qué punto su mando puede influir en el rumbo de Spider-Man o no.

Quizá, más allá de un divorcio definitivo, lo que nos espere sean unos años en el que las dos compañías saquen a la luz tramas divergentes, pero sin olvidarse de sus puntos en común: Marvel centrada en sus nuevos personajes y su lado cósmico, mientras Sony explora muchas pequeñas aventuras del trepa-muros. Todo, queriendo pensar bien, con la vista puesta en volver a unirse. A fin de cuentas, están condenados a entenderse para llegar a sus cotas más altas.