Para los niños de las generaciones más recientes, los juguetes con los que se divertían sus padres a su edad son poco menos que piezas de museo. Atrás quedaron los tiempos de jugar con canicas, cochecitos o muñecas de trapo. Todos esos juguetes han sido sustituidos por otros, fruto del avance de las nuevas tecnologías, como ordenadores, consolas o todo tipo de vehículos teledirigidos.
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En cambio, los cromos son de los pocos juegos tradicionales que se resisten a morir con el paso del tiempo. De hecho, no sólo siguen vigentes, sino que apenas han cambiado su temática. Los futbolistas-hombres, por supuesto- siguen siendo los protagonistas de estas cartas coleccionables, seguidos por algunos animales y todo tipo de personajes de dibujos animados.
Sin embargo, una nueva iniciativa, lanzada por los creadores de la revista Principia-Cristina Escandón, Enrique Royuela y Javier Díaz-Romeral-, ha fulminado esta corriente. Se trata de La Extraordinaria Liga de la Ciencia, una colección de cromos, protagonizados por 156 científicos, en los que se incluyen hombres y mujeres, históricamente importantes. El proyecto se encuentra actualmente en la plataforma de crowdfunding Verkami, donde en apenas diez días han recaudado más del 60% del presupuesto necesario para su financiación.
Una iniciativa necesaria
Según ha hecho saber a Hipertextual Javier Díaz-Romeral, CTO de Principia, el principal objetivo del proyecto es acercar a los niños a un conjunto de mujeres y hombres que mediante su esfuerzo y dedicación han conseguido hacer nuestras vidas un poco mejores.
"Además de una colección clásica de cromos, que mantiene viva la emoción que tiene abrir cada sobre buscando completarla, es también una nueva forma de hacer divulgación científica con la que en última instancia esperamos despertar un sinfín de vocaciones en los más pequeños de la casa".
Decidir quiénes serían estos científicos no fue fácil. “Era necesario mostrar nuevas referencias más allá de las clásicas imprescindibles que todos conocemos, como son Marie Curie y Santiago Ramón y Cajal”-cuenta Díaz-Romeral-. “Durante los más de dos años que hemos estado preparando el proyecto en la redacción de Principia hemos consultado múltiple bibliografía y multitud de historias que nos han mostrado las principales referencias a tener en cuenta. Además, hemos consultado y contrastado con nuestros colaboradores cuáles son sus científicos imprescindibles, que todo el mundo debería conocer”.
El resultado es una colección de 156 hombres y mujeres, organizados en doce equipos: Pioneras, Biología, Física, Química, Matemáticas, Geología, Biomedicina, Tecnología, Astronomía, Inventos, Ciencia española y Ciencia actual. Entre ellos, se encuentran científicos muy relevantes de la historia de la ciencia, tales como Albert Einstein o Hipatia, pero también otros menos conocidos por el público general, como Ángela Ruiz Robles o Charles Lyell. Todos ellos aparecen en forma de simpáticos dibujos, llevados a cabo por las ilustradoras Ángela Alcalá y Marina Mandarina.
Una colección para niños y mayores
Aunque por el formato puede parecer una colección únicamente diseñada para niños, como ha explicado Díaz-Romeral a este medio, también está destinada a llamar la atención de sus padres.
"Por su forma de distribución, que será a través de la página web de Principia y de los puntos de venta seleccionados, si no enamora a sus padres, de difícil manera va a llegar hasta los más pequeños".
De cualquier modo, los creadores de Principia conocen bien al público infantil, ya que éste no es su primer proyecto dirigido a los niños. Con Principia Kids, una revista en la misma línea que Principia Magazine, pero con textos e ilustraciones orientados a los lectores más pequeños, han conseguido captar la atención de niños y adultos. Esto, como también ha contado su CTO, ha sido posible gracias a la utilización de contenidos novedosos y amenos, acompañados de un diseño e ilustración impecables.
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"El papel que juegan los más pequeños en la divulgación científica es sin duda protagonista. Ellos son los primeros que te piden más, que tienen una curiosidad innata que necesitan saciar y ahí es donde no se puede flaquear y hay que proporcionarles contenidos de calidad tal y como hacemos con Principia kids y ahora con La Extraordinaria Liga de la Ciencia".
Hazte con todos
En un inicio, los cromos se venderán a través de la página web de Principia, en paquetes de 10 sobres, a un precio de 10 euros. Más tarde, el objetivo de sus creadores es que también pueda venderse en los establecimientos en los que se distribuyen Principia Magazine y Principia Kids, así como en algunas jugueterías.
De cualquier modo, en caso de que algún niño-o adulto- se encuentre cerca de finalizar la colección, podrá ponerse en contacto con Principia para comprar únicamente los cromos que necesite, sin necesidad de esperar a encontrarlos en un sobre.
Una nueva forma de divulgación
Además de ser una forma muy bonita de renovar la tradicional afición infantil de coleccionar cromos, La Extraordinaria Liga de la Ciencia supone un nuevo método de divulgación científica, con el que acercar a los más pequeños y sus familias las historias de algunos de los mejores científicos de la historia.
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Sin embargo, en el cromo sólo aparecen sus nombres y una ilustración, junto al equipo al que pertenecen. Tampoco hay ninguna referencia a sus vidas y sus hallazgos en el álbum. ¿Cómo puede servir entonces para divulgar su trabajo?
Todo eso también está pensado; ya que, una vez que comience a comercializarse la colección, se incluiría en la página web de Principia una sección con las biografías de todos los científicos incluidos en ella. Así, padres e hijos podrán aprender juntos sobre las interesantes vidas de estos súper héroes de la ciencia.
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Una buena forma de empezar la colección cuanto antes es colaborar en el crowdfunding, en el que se regala a los mecenas, como mínimo, el álbum, diez sobres y cinco chapas o imanes de nevera. Como ha recordado Javier Díaz-Romeral, se encuentran muy cerca de su objetivo, pero aún les queda un poco para alcanzarlo:
"Quiero aprovechar para dar las gracias a todos los valientes que ya se han apuntado a La Extraordinaria Liga de la Ciencia y animar al resto a que se animen, ya que es un proyecto que de verdad merece la pena".
Quizá podamos ver pronto en los patios de los colegios a niños cambiando cromos con las imágenes de todos esos hombres y mujeres que dedicaron su vida a hacer del mundo un lugar un poquito mejor en el que vivir.