Desde hace un tiempo HTC, quienes en su modo iniciarían en el mundo de los smartphones, viene cayendo y este periodo no ha sido la excepción.
El beneficio llega sólo hasta los US$133.2 millones sobre una base de US$2.4 mil millones que entraron en total, diferenciándose bastante del mismo periodo pero del año pasado, donde tuvieron beneficios de US$636.5 millones sobre una base de US$4.6 mil millones entrantes. Esto significa una caída interanual del 79% de beneficio neto, una de las más grandes caídas de la compañía. Si lo comparamos con el Q2 de este año vemos una caída también pronunciada, ya que llegaron hasta los US$247 millones el periodo pasado.
Lo curioso es que HTC lanzó terminales bastante interesantes durante este año, el One S y One X, aunque parece que los androides no lograron convencer al gran público en general, dominado por Samsung y su gama Galaxy. La caída la esperaban en HTC, aunque sus previsiones más pesimistas pasaban por pérdidas de un 22%, que fueron rebasadas.
Realmente espero la salida del HTC Windows Phone 8X y 8S, teléfonos que suenan muy bien sobre el papel y con buen diseño, pero habrá que esperar a ver si Windows Phone 8 es la versión que logra cautivar a las grandes masas, no como su predecesor, que sólo quedaba en buenas críticas, pero no grandes ventas.