Aunque en AppleWeblog solemos agrupar semanalmente las aplicaciones recomendadas, la de hoy quizás merezca un hueco exclusivo. Se trata del simulador futbolístico más adictivo que he visto en iOS, con una jugabilidad y controles excelentes.
Se trata de Dream League Soccer. Si hasta ahora el FIFA 12 se llevaba la palma en cuanto a jugabilidad, este reciente juego ha sido el que, en mi opinión, mejor ha sabido solventar el problema de los controles en la pantalla táctil. Sin diferir demasiado de títulos del estilo (PES, Real Football o el propio FIFA), los botones de pase, pase alto y chut en forma alargada mejoran considerablemente los típicos circulares. Además, la forma de esprintar o de hacer pases por el aire van por delante del resto.
Si los controles son un punto fuerte, la mecánica del juego no se queda atrás. Únicamente podemos jugar en modo carrera, pero es un modo muy logrado. Empezamos con un equipo llamado Dream F.C. con jugadores ficticios. Con cada victoria, empate, gol, progreso, logro, trofeo, etc, iremos recolectando estrellas (¿alguien en la sala recuerda el Primera División Stars 2001 que nos permitirán fichar jugadores, mejorar los que ya tenemos, ampliar nuestro estadio, así como desbloquear contenidos: nuevos modelos de equipación para nuestro equipo, la posibilidad de fichar jugadores clásicos (Pelé, Platini, Maradona, Van Basten...), etc.
Otra forma de conseguir estrellas es viendo de vez en cuando breves vídeos publicitarios, reseñándola en la App Store, o mediante las compras in-app. En cualquier caso, este sistema de recompensas que derivan en mejoras es lo que más engancha.
Naturalmente no es el juego definitivo y tiene carencias frente a competidores, como el número de licencias de clubes, unos gráficos que no pasan de aceptables, o los modos de juego disponibles, pero su 'original' sistema me ha convencido de largo, y creo que lo hará con casi todos los futboleros. Otros detalles a tener en cuenta son la posibilidad de subir a YouTube los goles que queramos, su integración con las redes sociales al más puro estilo Fátima Báñez, y sobre todo... Que es gratuito.