Sabemos que desde hace tiempo, Apple es considerada la empresa más valiosa a nivel mundial. Parte de esta distinción es gracias a su éxito dentro de la industria móvil, en donde Apple sigue destrozando a sus rivales, incluso es mayor medida de lo que algunos podríamos pensar. De acuerdo a un estudio de la firma Raymond James, Apple se llevó un 77% de las ganancias generadas por la industria móvil durante el segundo trimestre de 2012, al mismo tiempo que obtuvo 43% de los ingresos. Bestial.

Para volverlo un poco más asombroso, el segundo trimestre ni siquiera fue destacado para Apple en cuanto a las ventas de iPhone. Con tan solo 26 millones de unidades vendidas durante esos tres meses, Samsung superó a los de Cupertino con sus 50 millones de smartphones vendidos. Aunque vender el doble de smartphones que Apple es un gran logro por parte de Samsung, los de Cupertino siguen superando ampliamente a la empresa surcoreana en ganancias con un 77% por un 29% de los asiáticos.

Pero el éxito de Apple no preocupa solo a Samsung. En Estados Unidos, las operadoras móviles ya mueven sus piezas para hacer frente a la compañía de la manzana. Sí, cuando AT&T se convirtió en la primera operadora en ofrecer el iPhone, su base de usuarios aumentó así como también se presentó un incremento en las ganancias obtenidas por cada uno; asimismo, los usuarios de iPhone son más fieles, por lo que raramente cancelan su servicio.

En el aspecto negativo, entre más clientes compran un iPhone, las operadoras obtienen menos ingresos por vender más dispositivos. Esto es debido a los subsidios. Con Apple vendiendo cada iPhone a alrededor de $620 dólares, las operadoras tienen que ofrecer un subsidio de $420 para poder vender el smartphone en $200; en contraste con Android, donde los subsidios son de máximo $300 por dispositivos de gama alta.

El primer paso por parte de las operadoras fue aumentar el tiempo en que los clientes pueden hacer cambio de equipo. En marzo de 2011 pasó de entre 12 y 18 meses, dependiendo del plan, a un plazo de 20 meses. Además, las operadoras han aumentado sus tarifas para el cambio de dispositivo. Estas conductas parecen funcionar hasta ahora, pero habrá que ver si logran mantenerse así durante el cuarto trimestre con la salida del iPhone 5 y los nuevos Windows Phone.

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