Creía que estas viejas guerras habían pasado, pero veo que no, Samsung sigue destacando que el iPad no tiene Flash integrado a diferencia de su Samsung Galaxy Tab 10.1. Eso es lo que podemos ver en un anuncio, en torno al segundo treinta, momento en que la ejecutiva de una empresa está abochornada por no poder ver los gráficos de una presentación en su tablet de la manzana mientras su compañero sí puede.
Está claro que es simple publicidad y como todo hay que entenderlo desde esa perspectiva, pero creo que este tipo de argumentos son un arma de doble filo. Se me ocurren varias cosas que decirle a Samsung pero se pueden resumir en una sola frase: los tiempos han cambiado. Por suerte, hay pocos sitios útiles e interesantes que sigan implantando Flash en sus webs sabiendo que están negando la entrada a un gran porcentaje de usuarios. Diferentes son las páginas webs antiguas o las que aún viven anquilosadas en el pasado.
También hay otra cosa más que decirle a Samsung: todo lo demás que muestran en el vídeo publicitario se hace mejor en un iPad 2 que en un tablet con Android tomando en cuenta la diferencia del número de aplicaciones disponibles. Hace tres meses Honeycomb poseía 100 aplicaciones específicas para tablets mientras que iOS iba por las 65.000. Es decir, para cada una de las situaciones que se simulan en el vídeo habrá miles de motivos más para escoger un iPad que un Samsung Galaxy Tab o dispositivo semejante.
¡Hay que tener cuidado con la publicidad que haces porque se puede volver en tu contra!