El pasado mes de enero, Elon Musk anunció que, por primera vez, su compañía Neuralink había logrado colocar de forma exitosa uno de sus implantes cerebrales en un ser humano. En aquel momento no tuvimos muchos detalles al respecto. Con el tiempo hemos ido sabiendo más sobre el afortunado. Se llama Noland Arbaugh y quedó tetrapléjico en 2016 durante un accidente de buceo, cuando tenía solo 22 años. Poco a poco, lo hemos ido viendo superando hitos como jugar una partida de ajedrez o a videojuegos como el Mario Kart o el Civilization I, solo con la mente. Pero no todo ha sido perfecto. El Wall Street Journal acaba de dar a conocer el primer error detectado en el implante. No es algo grave, pero demuestra que el procedimiento no fue infalible.

Concretamente, parece ser que algunos de los cables colocados en el cerebro de Arbaugh se han salido de su lugar. Como consecuencia, el implante no puede recoger tanta información de una sola vez. Neuralink está investigando las causas, pero de momento descartan extraer el implante.

La compañía de Musk insiste en que, si bien esto reducirá un poco el potencial que puede alcanzar Arbaugh con su implante, no supone ningún riesgo para su salud y tampoco es tan contraproducente como para someterlo a una nueva intervención.

Aunque aún no tienen una respuesta definitiva, los científicos de Neuralink creen que el implante ha fallado por un fenómeno conocido como neumocefalia. Esto consiste en la entrada de aire en la cavidad craneal. Puede ocurrir por muchos motivos, pero su origen suele estar principalmente en lesiones traumáticas o intervenciones quirúrgicas. Por eso, lo más probable es que se produjese durante la colocación del implante.

El implante consta de 64 cables en forma de hilo, más finos que un cabello humano. Cada uno contiene 16 electrodos, que recogen las señales del cerebro del paciente y las traducen en información que se procesa como en un ordenador. La salida de algunos de esos hilos de su lugar supone menos electrodos recogiendo señales cerebrales, por lo que el procesamiento no es tan eficaz. Aun así, Neuralink sigue mostrando vídeos de Arbaugh, agradecido por todo lo que ha aprendido en este tiempo. Porque sí, en realidad se trata de un aprendizaje.

Poco después de la intervención, el paciente contó que recibió el alta médica un día después y que en ese momento aún no era capaz de usar el implante. Tuvo que recibir un entrenamiento para poder pensar adecuadamente en lo que quería hacer. Gracias a eso, su vida ahora es más sencilla, incluso con menos cables en el cerebro.

¿Agudizará esto las críticas?

Las críticas de la comunidad científica hacia Neuralink son bastante recurrentes. Hay varios motivos para ello. Por un lado, que aunque se promocione como algo super novedoso en realidad no lo es tanto. Existen muchísimos grupos de investigación que han desarrollado implantes similares a Neuralink y no se les ha dado tantísima importancia. También existen críticas hacia el verdadero objetivo de la compañía. Ahora mismo el plan es usar el implante con personas tetrapléjicas, como Arbaugh. No obstante, lo que buscan es que en el futuro vivamos en una realidad similar a la de Black Mirror, en la que las personas que puedan pagárselo sean capaces de realizar tareas como almacenar sus recuerdos o controlar gadgets con la mente. Esto no es posible aún, sobre todo lo primero, pero se acerca mucho a sus próximos retos.

Elon Musk, Neuralink
Elon Musk planea colocar el implante a otras 10 personas. Crédito: Neuralink

De cualquier modo, el principal motivo de las críticas recibidas por Neuralink es la posible falta de seguridad del implante. Científicos despedidos de la empresa han explicado que el trato a los animales de laboratorio no era el mejor y que muchos de ellos murieron por razones distintas a las declaradas por Neuralink. Supuestamente eran animales de mucha edad o terminales, pero estos denunciantes afirman lo contrario.

Sí que se dieron a conocer varios casos de infecciones que preocupan mucho a los especialistas de la materia. Pero, aun así, Neuralink insiste en que todo está bien. De hecho, plantean colocar el implante a otras 10 personas en lo que queda de año. La polémica seguirá existiendo, sobre todo ahora que parece que algunos cables se han salido de su lugar. No es un inconveniente grave, pero los precedentes son suficientes para preocupar a muchos de sus detractores. 

Recibe cada mañana nuestra newsletter. Una guía para entender lo que importa en relación con la tecnología, la ciencia y la cultura digital.

Procesando...
¡Listo! Ya estás suscrito

También en Hipertextual: