Apple habría cancelado su plan para fabricar sus propias pantallas microLED para el Apple Watch. Según los rumores, los de Cupertino pusieron fin a una iniciativa que buscaba minimizar la dependencia a Samsung y otros fabricantes de componentes. El reporte llega a unas semanas de confirmarse la muerte del Apple Car, uno de los proyectos más ambiciosos de la compañía.
De acuerdo con Mark Gurman, Apple canceló el proyecto para diseñar y fabricar sus propias pantallas. El periodista de Bloomberg mencionó que el coste y complejidad de este esfuerzo era demasiado alto, por lo que la tecnológica tiró la toalla. Según las fuentes, la decisión de poner fin a esta iniciativa ocurrió casi al mismo tiempo que la cancelación del Apple Car.
Los detalles de las pantallas fabricadas por Apple se filtraron en 2018, cuando se supo que la empresa experimentaba con esta tecnología. La iniciativa T159, como se le conocía internamente, se originó hace siete años en la división de ingeniería de hardware y más adelante pasó a manos de Wei Chen, vicepresidente de tecnologías de pantalla en Apple.
El proyecto buscaba tener un mayor control sobre el diseño y las capacidades de sus productos, un esfuerzo parecido a lo que vimos con sus procesadores Apple Silicon. Los de Cupertino veían el microLED como una tecnología que ofrecía ventajas, como mayor brillo y un ángulo de visión amplio. Algunos empleados filtraron en su momento que el contenido de estas pantallas "parecía pintado sobre el vidrio".
Para llevarlo a cabo, Apple construyó una fábrica en Santa Clara para probar la producción de paneles microLED que se integrarían en el Apple Watch y posteriormente llegarían al iPhone. Lamentablemente, este proyecto era más complejo de lo que imaginaban en Cupertino.
¿Por qué se canceló la producción de pantallas microLED en Apple?
Gurman menciona que el principal obstáculo de las pantallas microLED es que no se podían fabricar en grandes cantidades. El proyecto tenía como meta integrar paneles propietarios en los Apple Watch de 2020, aunque la pandemia y otras cuestiones internas terminaron por retrasarlo hasta 2025. A eso se suma que Apple no tenía la infraestructura para llevarlo a cabo, por lo que firmó acuerdos con terceros.
Fabricar un panel microLED no es tarea sencilla e involucra dos fases. En la primera se construyen millones de LED microscópicos que representarán los píxeles de color. Esto se hace sobre una oblea a través de un proceso conocido como crecimiento epitaxial, el cual crea capas delgadas de material semiconductor con una estructura cristalina.
La segunda etapa requiere transferir cada LED a un plano y efectuar las conexiones que le permitirán encenderse. Cada LED cuenta con un transistor de película delgada que controla su brillo y color. Esta fase, conocida como Pick-And-Place, es la más compleja de toda la producción, por lo que se requiere una empresa con tecnología de punta para llevarla a cabo.
La complejidad y el coste de producir pantallas microLED habría sido un factor determinante para cancelar el proyecto. El reporte de Bloomberg menciona que Apple despedirá a decenas de empleados en Asia y Estados Unidos, mientras que uno de sus socios anunció que cerrará una de sus plantas de producción de pantallas. Los de Cupertino optarán por las pantallas OLED fabricadas por LG, Samsung y otros proveedores.