La película El cantor de Jazz de 1927, tiene un doble peso en la historia del cine. Por un lado, es el primer musical en la industria cinematográfica a nivel mundial. El director, Alan Crosland, convirtió el relato de un hombre en busca de llevar adelante su vocación como músico, en una puesta en escena artística. Basada en el musical de Broadway del mismo nombre, combinó una narración aguda y bien contada acerca del dolor humano, con un apartado musical destacado.
Lo que convierte al largometraje en otro hito en la industria del séptimo arte. También se trata de la primera película que profundiza en su narración desde la óptica del drama. De la vida de un personaje trágico en busca de redención, hasta su triunfo sobre el escenario, luego de largos años de lucha. La cinta enaltece lo mejor del ser humano, a la vez que profundiza en el miedo y al final la esperanza a través de un punto de vista artístico y sin duda, alegórico. Fue el primer paso a un género que se ha hecho capital en el cine y que le brindó varias de sus obras más recordadas.
Las plataformas streaming no son ajenas a su influencia. Por lo que varios de sus mejores contenidos pertenecen a los relatos que enaltecen las emociones y una perspectiva espiritual. A la vez, los que exploran, los grandes dilemas morales e intelectuales. Para profundizar en el tópico, te dejamos las mejores cinco series dramáticas estrenadas en Netflix este año. De un debate acerca de la ética y el dolor que provoca un hecho violento, hasta una crisis social cada vez más grave. La selección abarca todo tipo de historias interesantes con un elemento en común. La naturaleza humana en sus defectos y virtudes.
Una familia normal
Adam (Björn Bengtsson) y Ulrika (Lo Kauppi), llevan una vida corriente, hasta que su hija Stella (Alexandra Karlsson Tyrefors) de quince años, es violada. A pesar de la gravedad del delito, deciden guardar el secreto, para prevenir un juicio complicado que pueda hacer toda la situación más traumática. Pero las secuelas emocionales de un hecho de violencia semejante, se extienden años después.
El guion de Hans Jörnlind y Anna Platt, adapta la obra del escritor Mattias Edvardsson a partir de su premisa central. La forma en que un suceso brutal, puede marcar el futuro no solo de la víctima, sino de todos los que le rodean. Poco a poco, el argumento muestra la forma en que el miedo y la culpa se convierten en puntos críticos en los primeros años de la vida adulta de Stella. A la vez, en una grieta irreparable en la relación de sus padres.
Con la fotografía sobria de Gustav Danielsson, que convierte a los espacios en alegorías de la soledad, la serie es una reflexión tortuosa sobre la violencia. Asimismo, un debate ético que no encuentra respuestas, pero que deja, a su paso, una moraleja agria. Nadie puede escapar de las consecuencias de sus actos.
La luz que no puedes ver
Basada en el libro del mismo nombre de Anthony Doerr, la serie relata un ángulo poco común de la Segunda Guerra Mundial. De los jóvenes que deben enfrentar la ocupación nazi y someterse a sus filas para evitar morir, a los que luchan en secreto contra el enemigo. La luz que no puedes ver, analiza el dilema de la neutralidad y la posición moral en medio de un conflicto bélico devastador.
Mucho más, medita acerca de las razones por las cuales las personas, actúan de manera activa contra actos injustos. Entre un relato con tintes morales y una mirada dramática acerca de un suceso que marcó el siglo XX, la serie también analiza la ética contemporánea. Todo, a través de la necesidad de mantener la humanidad en mitad de un suceso brutal que destrozó a Europa y dejó secuelas irreparables.
Para sus capítulos finales, la producción deja a su paso un mensaje poderoso. El de la capacidad de cualquier persona, para detener el sufrimiento, el miedo y la violencia. Quizás, el punto más esperanzador de esta trama pesimista.
La reina Charlotte: Una historia de Bridgerton
Bridgerton, basada en los libros de Julia Queen, ha sido un suceso de audiencia y crítica. Por lo que no es de extrañar, que la historia de uno de sus personajes más emblemáticos, se convirtiera en un spin-off de la premisa central.
No obstante, la miniserie que cuenta el romance entre la reina Charlotte (India Amarteifio) y el rey George (Corey Mylchreest), es mucho más que una producción derivada. En realidad, es una sensible narración sobre el amor en medio de una situación trágica y sobre todo, en el centro del escenario del poder.
Ambientada durante la juventud de ambos monarcas, el guion detalla no solo el primer encuentro entre los jóvenes, sino la enfermedad mental del rey. Un elemento que convertirá el matrimonio real, en un desafío emocional e intelectual para la pareja. A la vez, en un dilema con el que Inglaterra tendrá que lidiar entre los hilos de la influencia y la manipulación. El escenario más complicado de un relato que se mueve entre varios géneros distintos, pero que encuentra en el drama sus mejores momentos.
El cuerpo en llamas
El 4 de mayo de 2017, el cadáver del policía Pedro Rodríguez, fue encontrado calcinado por la Guardia Urbana de Barcelona. Sería el comienzo de uno de los casos más duros y trágicos a los que ha tenido que enfrentarse tanto la ciudad como el cuerpo policial. El crimen, involucraba no solo a la esposa de la víctima, sino a otro de sus compañeros en un retorcido triángulo amoroso. Por lo que se convirtió rápidamente en un caso que puso en tela juicio la ética de la institución.
La serie El cuerpo en llamas, relata los pormenores que rodearon la investigación judicial y criminalista del caso. A la vez, detalla cómo la relación entre Rosa Peral (Úrsula Corberó) y Albert López (Quim Gutiérrez) pasó de ser un romance clandestino, a una circunstancia más peligrosa. En especial, cuando fue el terreno ideal para planear el violento asesinato de Pedro (José Manuel Poga). Gradualmente, la pareja de amantes construyó un escenario en el que encubrían las coartadas mutuas. No obstante, una vez descubierto el asesinato, ambos se volvieron enemigos implacables.
Entre el true crimen y la ficción, el argumento aborda puntos espinosos como la degradación moral, el sufrimiento del entorno de la víctima y la violencia de los culpables. Eso, gracias a un estupendo guion que logra abarcar el drama siniestro desde todas sus facetas.
Medicina Letal
La producción, de seis episodios, mezcla el artículo La familia que construyó un imperio del dolor de Patrick Radden Keefe y Pain Killer: un imperio del engaño y el origen de la epidemia de opioides de Estados Unidos de Barry Meier. Ambas aproximaciones profundizan en la gravísima crisis de opioides que en la actualidad se considera un problema de salud pública en Norteamérica. Pero más allá del testimonio de datos y referencias concretas, el argumento se centra en cómo las adicciones son una herida visible en la cultura del país.
De la formulación del analgésico de amplio espectro OxyContin y el crecimiento del fabricante Purdue Pharma. La serie enfoca su interés en el trasfondo oscuro del mundo farmacéutico y su importancia en la actualidad. No obstante, el punto más sensible es la forma en que analiza el sufrimiento de los adictos. Primero, víctimas de enfermedades y lesiones debilitantes y por último, de circunstancia médica violenta. El punto más dramático de la trama.
