La NASA sumará a astronautas extranjeros a sus expediciones a la Luna. Por ahora, la agencia espacial estadounidense y la Casa Blanca confirmaron que piensan incluir uno en la tripulación de alguna de sus misiones a finales de esta década.
Aunque la NASA ya ha incluido a astronautas extranjeros en otros viajes al espacio, será la primera vez que los lleve al suelo lunar. Una portavoz del organismo explicó que los detalles se conocerán más cerca de las misiones de alunizaje. Por ahora, adelantó, no hay algún compromiso con ningún país.
«Sabemos por experiencia que la colaboración en el espacio da resultados», dijo Antony Blinken, el Secretario de Estado estadounidense. Citó a modo de ejemplo al Telescopio Espacial James Webb, un proyecto conjunto entre Estados Unidos, Europa y Canadá.
El canadiense Jeremy Hansen formará parte de la tripulación de la misión Artemis II de la NASA, que volará alrededor de la Luna dentro de un año aproximadamente. Es uno de los pasos previos del programa de cara al alunizaje, que en principio está planeado para finales de 2025. El objetivo es probar las capacidades del cohete del Sistema de Lanzamiento Espacial de la NASA y de la nave espacial Orion.
El de Artemis III será el primer viaje tripulado a la Luna en más de 50 años, pero las cosas no vienen tan bien como se esperaba. La Oficina de Responsabilidad Gubernamental de Estados Unidos publicó un reporte este mes en el que señala que es «poco probable» que Artemis logre regresar a los humanos a la Luna antes de 2027. Se ha avanzado en el proyecto, «pero aún enfrenta desafíos», dijo la agencia.
Los retrasos de la NASA en su viaje a la Luna
La NASA ha enfrentado retrasos en las pruebas de vuelo, en el desarrollo del sistema de aterrizaje humano y los trajes espaciales, señaló en su análisis la Oficina de Responsabilidad. A esto se le suman los posibles contratiempos de la Starship, de SpaceX. El módulo de alunizaje de Artemis III se basará en la nave desarrollada por la empresa de Elon Musk, que todavía no ha podido alcanzar la órbita terrestre.
No olvidemos que la primera prueba de Starship, en abril, terminó en explosión sin poder separarse del cohete Super Heavy. Mientras que en noviembre sí se logró la separación de etapas, aunque el vuelo culminó otra vez con una gran bola de fuego.
Así que, antes de definir qué astronauta extranjero invitará, la NASA todavía tiene que asegurarse su primer viaje. De hecho, la tripulación de Artemis III que pisará a la Luna todavía no se ha definido. La que sí está confirmada es la de Artemis II, que orbitará nuestro satélite natural en 2024. Es un equipo histórico, puesto que está integrado por la primera mujer que viajará a la Luna y el primer tripulante negro.
Mientras resuelven todas las necesidades técnicas, la NASA también adelanta una tarea diplomática minuciosa para lograr apoyo internacional a los Acuerdos de Artemis. Se trata de un convenio que Estados Unidos impulsa desde 2020, para fijar principios básicos para la exploración en la Luna. También hacen referencia a eventuales misiones a Marte, cometas y asteroides.
La NASA y el gobierno de Estados Unidos ya lograron que 32 países firmen el documento. En la lista están España, Argentina, México, Japón, Brasil, Alemania, entre otros. Pero India es la única otra potencia espacial que se ha sumado al plan de EE. UU.; Rusia y China, con sus propios planes para ir a la Luna, han rechazado la iniciativa.