Durante el fin de semana, Elon Musk lanzó una encuesta con la siguiente pregunta: "¿Debo renunciar como director de Twitter? Me atendré a los resultados de esta encuesta". En ese momento, e independientemente de los resultados, quedó claro que el magnate, al menos, había considerado dimitir. Sin embargo, según la información de David Faber, de CNBC, Musk está buscando un nuevo CEO Twitter desde hace tiempo.
Primero hay que decir que Faber es una de las fuentes más confiables en cuanto a información de Twitter se refiere. Según sus fuentes, Elon Musk inició la búsqueda de un sustituto previo a la publicación de dicha encuesta. Por lo tanto, sus resultados, inclinados por una mínima diferencia hacia la renuncia, poca relevancia tendrán. Musk ya tenía decidido hacerse a un lado en cuanto encuentre a un sustituto adecuado.
Lo anterior, sin embargo, no debería sorprendernos. Elon Musk ya ha dado señales muy claras de que su intención es dejar la dirección de Twitter. A mediados de noviembre, durante un juicio por su compensación de 54.000 millones de dólares en acciones de Tesla, comentó: "Espero reducir mi tiempo en Twitter y encontrar a alguien más para administrarlo". Poco después dijo que, en realidad, no quiere ser CEO de ninguna empresa.
De hecho, previo a cerrar la compra de Twitter, Elon Musk ya había expresado su deseo por colocar a otra persona como máximo líder. ¿Por qué no ha dado el paso? Bueno, es mucho más complejo de lo que parece. En primer lugar, Musk pretende estructurar bien el organigrama de Twitter; una tarea nada sencilla si consideramos que miles de empleados han abandonado la compañía desde que la compró.
Por otro lado, la persona que asuma la dirección de Twitter debe ser consciente de que está recibiendo la empresa en la peor época de su historia. Hay una crisis administrativa y una fuga masiva de anunciantes que han impactado negativamente en los ingresos; sin olvidar que el discurso de odio ha aumentado significativamente desde la llegada de Musk. Dicho en otras palabras, el nuevo CEO de Twitter tendrá una bomba en sus manos.
"La cuestión no es encontrar un CEO, sino encontrar uno que pueda mantener vivo a Twitter", reconoció el propio Elon Musk.
¿Quién se atreverá a tomar ese lugar? Esa es la gran pregunta que nadie ha logrado responder con contundencia. Algunos creen que Jack Dorsey, fundador y ex CEO de Twitter, debe regresar para enderezar el rumbo. Entre las diversas alternativas podría ser la mejor opción, pero a estas alturas Elon Musk nos puede sorprender con un perfil completamente opuesto. Suele rodearse de gente bastante polémica, así que no descartemos que otra figura controversial tome las riendas.
Eso sí, Elon Musk debe pisar el acelerador con la búsqueda del nuevo CEO de Twitter. ¿Por qué? Importantes accionistas de Tesla ya comienzan a cuestionarlo porque, desde que se convirtió en dueño y director de Twitter, el valor de la automotriz eléctrica se ha desplomado. Leo Koguan, uno de los principales inversores, dijo que Musk debería renunciar como CEO de Tesla porque no está desempeñando sus funcionas a tiempo completo. "Elon ha abandonado a Tesla y Tesla no tiene un CEO en funciones", agregó.