Las autoridades de la provincia de Güeldres, en Holanda, han propuesto disparar a los lobos con bolas de paintball. Puede parecer broma, pero para nada lo es, pues es su forma de solucionar el problema de la que ellos consideran casi como si fuese una especie invasora. Ciertamente, piensan que de este modo pueden ahuyentarlos, para evitar que causen daños a los visitantes del Parque Nacional Hoge Veluwe, a la vez que los dejan marcados, para saber sobre cuáles han actuado ya.
Es una medida tan curiosa como polémica, ya que la primera pregunta que debemos hacernos es si realmente tiene sentido ahuyentarlos de su propio ecosistema para proteger a los humanos que están de visita. Es una pregunta compleja, para la que estas autoridades han añadido que, en realidad, también están protegiendo a la fauna local.
Aseguran que algunos herbívoros, como los muflones, están viendo decrecer su población a causa del aumento del número de lobos en la zona. Esto puede afectar a todo el ecosistema, ya que su pérdida puede tener un efecto en cadena sobre otras especies, tanto animales como vegetales. Pero, dejando eso a un lado, ¿por qué están tan desesperados con los lobos en Holanda?
Cada vez más lobos en Holanda
La decisión definitiva de usar bolas de paintball contra los lobos del Parque ha llegado después de que se publicaran las imágenes de uno de ellos caminando muy cerca de una familia con niños. Esto no es lo habitual. Generalmente, los lobos no suelen acercarse a los humanos, por lo que algunos miembros de la asociación de protección animal Faunabescherming han acusado a los responsables del Parque de alimentar deliberadamente a los lobos. Estos han negado haberlo hecho y se apoyan en que el problema reside en un aumento de la población de estos animales.
Este mismo verano, desde el Centro Internacional del Lobo, se reportó que, efectivamente, en los últimos meses ha aumentado la población de dichos animales, con un total de cuatro manadas entre Hoge Veluwe y la frontera de Frisia con Drente. No obstante, en ese mismo comunicado se hacía un llamamiento a la calma y se aseguraba que esto no supone un aumento peligroso.
En él se usan como fuente las declaraciones a Dutch News del experto en lobos de la Sociedad Holandesa de Mamíferos Glenn Lelieveld. Este señalaba que estos animales tienden a evitar a los humanos y que es más probable morir por la caída de un coco en la cabeza que por el ataque de un lobo.
Aun así, el director del Parque inició hace dos años una campaña para que se levantaran las medidas de protección de los lobos y se pudiese controlar su población mediante el sacrificio de algunos ejemplares. La campaña no tuvo ningún efecto, por lo que no ha tenido más remedio que buscar otra opción algo más ingeniosa, en la que las bolas de paintball son protagonistas.
Bolas de paintball solo para ahuyentar
Desde Hoge Veluwe han aclarado que solo los guardabosques podrán disparar a los lobos con bolas de paintball. El objetivo es asustarles para que no se acerquen a menos de 30 metros de los visitantes. Además, al marcarlos con color, podrían saber sobre cuáles han actuado ya.
Es la única medida a la que han podido recurrir que sea compatible con los esfuerzos por conservar una especie que volvió al país hace apenas unos años, después de pasar siglo y medio desaparecida por culpa de la caza indiscriminada.
Desde que volvió, los ganaderos no cesaron en sus quejas por la muerte de algunos corderos, a pesar de que cada año se registran más ataques al ganado por parte de perros. También se ha alertado sobre las muertes en exceso de muflones. Sin embargo, en el momento de la reintroducción se calculó que podrían convivir hasta 20 manadas sin alterar al resto del ecosistema.
Por lo tanto, y como alertan los miembros de muchas sociedades de protección de animales, esto parece más bien una medida fruto del miedo. Los ataques de lobos son sumamente raros, pero aun así tienen muy mala prensa. Lo hemos visto también en el norte de España. Al menos, en Holanda han encontrado una medida que no supone daños a los animales, ¿pero es realmente necesaria? ¿De verdad es una prioridad asustar y marcar a unos animales que lo único que han hecho ha sido volver al lugar del que un día se les eliminó violentamente? Desde luego, son cuestiones importantes. Mientras los guardabosques holandeses juegan su partida más rara de paintball, todos deberíamos aprovechar para meditar sobre ellas.