Cuando Microsoft anunció su intención de comprar Activision Blizzard por 68.700 millones de dólares, la industria no tardó mucho tiempo en intuir que, en caso de aprobarse la adquisición, Call of Duty llegaría a Xbox Game Pass. Si bien este sería el principal objetivo de los de Redmond, existe un acuerdo previo entre Sony y Activision que dificultaría realizar este significativo movimiento; al menos en el corto plazo…

Gracias al proceso regulatorio que diversos países están haciendo en torno a la propuesta de compra de Microsoft, hemos podido conocer información que pocas veces se hace pública. En un documento que recoge VGC, la compañía estadounidense menciona:

"El acuerdo entre Activision Blizzard y Sony incluye restricciones sobre la capacidad de Activision Blizzard para colocar títulos de Call of Duty en Game Pass durante varios años."

Por lo tanto, incluso aunque los reguladores den luz verde a la compra de Activision por parte de Microsoft, esta última no podría lanzar los juegos de Call of Duty en Xbox Game Pass. La razón es muy simple: existe un contrato legal que debe respetarse.

De hecho, Microsoft no es ajena a este tipo de situaciones. Cuando compraron Bethesda, la editora tenía en marcha el desarrollo de Deathloop, un título exclusivo —temporal— para la PS5. En consecuencia, se vieron obligados a respetar el acuerdo firmado entre Sony y Bethesda. En el caso de Call of Duty tendría que ocurrir exactamente lo mismo.

Call of Duty: Modern Warfare 2, Microsoft

Lo que no sabemos es cuál es el periodo pactado entre Sony y Activision. Los dirigidos por Phil Spencer, desafortunadamente, no mencionaron un tiempo específico.

Quizá otra pregunta que tienes en este momento es: ¿por qué Sony tiene injerencia en una franquicia como Call of Duty? Desde hace varios años, específicamente desde la generación anterior, ambas compañías se asociaron para impulsar el shooter en la plataforma PlayStation. Es por esta razón que, durante los últimos años, los Call of Duty suelen ofrecer contenidos exclusivos en PS4 y PS5. Sin ir más lejos, la beta de Modern Warfare 2 se pudo jugar antes en las consolas de Sony.

Ojo, porque esto no siempre fue así. En la época de la Xbox 360, y parte de la generación de la Xbox One, era Microsoft quien tenía una asociación con Activision por Call of Duty. El problema es que la Xbox One tuvo un ritmo de ventas bastante inferior a lo esperado, y Activision prefirió irse a la casa de enfrente.

Al revelar esta restricción, seguramente Microsoft espera que la CMA, el organismo regulatorio del Reino Unido, disminuya sus preocupaciones sobre el futuro de Call of Duty. Al menos en un principio, no lo veremos en Xbox Game Pass.