Sandman, nueva serie de Netflix, es un éxito indiscutible. Firmada por el mismísimo Neil Gaiman, y con una puesta en escena de lujo, se convirtió en la mejor adaptación de un cómic en la plataforma. Pero también hizo algo más: demostró el poder del género de la fantasía en el mundo cinematográfico y de los servicios streaming. Y más en las películas de Netflix.
Se trata de un fenómeno digno de interés. Dos de los grandes estrenos que se esperan para finales de año pertenecen al mundo de la fantasía. Por un lado, se encuentra La casa del dragón, el esperadísimo spin-off de Juego de Tronos, que explorará la historia de la casa Targaryen. Al otro extremo, Los Anillos del Poder, primera obra ambientada — que no adaptada — del universo de J.R.R. Tolkien. Y aunque ambas producciones tienen poco en común, las une un punto de considerable importancia: demostrar que el género de la fantasía vive un momento dorado gracias al streaming.
Desde dioses, seres celestiales, entidades cósmicas, hasta tierras extraordinarias llenas de violencia e intriga política. El renacimiento de la fantasía en los principales catálogos online no solo es evidente sino de fundamental interés. Netflix, en especial, tomó la vanguardia a la hora de profundizar en una manera novedosa de contar grandes aventuras y ficciones sobre mundos imaginarios. Su catálogo se encuentra lleno de opciones y una selección de enorme interés para los amantes del género. Te dejamos cinco películas de Netflix de fantasía que están entre nuestras favoritas.
Dioses de Egipto
Hubo una época en que los dioses caminaban por la tierra. O al menos, las grandes y antiguas civilizaciones lo imaginaban de ese modo. En especial, la egipcia, que estaba del todo convencida que sus reyes descendían de la deidad Ra. El director Alex Proyas tomó la premisa de manera directa para crear un recorrido asombroso y trepidante a través de ese mundo misterioso. Y lo hace al mostrar la mitología desde el punto de vista de la fantasía.
El resultado es una historia entretenida, extravagante y un tributo a los grandes símbolos culturales. Bek (Brenton Thwaites) es un ladronzuelo que no está del todo convencido del poder de los dioses. Eso, hasta que se ve envuelto en una intriga palaciega de envergadura cósmica debido a las componendas del Dios Seth para destronar al Rey Osiris. A partir de ese punto, la película toma un rápido camino entre el sentido de lo absurdo, pero también, una peculiar mirada sobre el asombro a lo intangible.
Al momento de su estreno en el 2016, la película de Netflix enfrentó una dura polémica. ¿El motivo? La mayor parte de su elenco está conformado por actores blancos. Y quizás, a eso se debió la indiferencia del público y su paso desapercibido por taquilla. Con todo, esta rareza con divinidades descomunales y una historia de amor a cuestas es lo suficientemente entretenida para disfrutar un buen rato. Y sin duda, un homenaje — a gran escala — al mundo de la fantasía.
Mamá
En el 2008, Andrés y Barbara Muschietti filmaron un corto aterrador de apenas algo más de tres minutos que deslumbró al público. La breve historia, titulada de forma muy apropiada Mamá, contaba lo que parecía la relación de dos niñas emocional con una espeluznante entidad. La producción se volvió viral y casi de inmediato, un éxito resonante entre los amantes de terror en internet. No solo se trataba de una historia narrada de manera asombrosa. También de una, que creaba lo que parecía ser un nuevo universo que merecía ser ampliado y profundizado.
Y así ocurrió cuando el director mexicano Guillermo Del Toro quedó impresionado por el resultado de la película de Netflix. Lo siguiente sucedió muy rápido. Para el 2013, Muschietti dirigía una versión larga del corto con Del Toro como productor. Se trató de una colaboración que dio origen a un largometraje inclasificable a medio camino entre los códigos del terror y el género de la fantasía.
La versión cinematográfica explora la del corto a un nivel novedoso y mucho más terrorífico. Cuando dos niñas terminan por quedar abandonadas en un bosque desolado, una presencia escalofriante se hará cargo de su cuidado. Años después y cuando finalmente son rescatadas, el vínculo con la criatura terrorífica que las protegió será tan fuerte como el amor. Y aunque el film utiliza giros argumentales terroríficos, su doloroso final reivindica su lugar en el mundo de la fantasía. Una agridulce despedida que desconcertó y conmovió al público a partes iguales.
La vieja Guardia
La inmortalidad es un viejo deseo de la humanidad y el film de Gina Prince-Bythewood, basado en el cómic homónimo de Greg Rucka, profundiza en el tema. Pero lo hace desde una dimensión curiosa y novedosa que resulta de enorme interés. Andy (Charlize Theron) es la líder de un grupo de mercenarios, unidos por la eventualidad que ninguno es capaz de morir. O en cualquier caso no saben con exactitud cuando el misterioso proceso que les brindó la inmortalidad se detendrá. Mientras eso ocurre se dedican a llevar a cabo misiones de alto riesgo y, en la medida de sus posibilidades, ayudar a la humanidad.
Pero todo eso cambiará cuando el enigma de su naturaleza se haga más complicado. Un nuevo miembro de su selecta raza acaba de manifestarse y ahora, todo el grupo comandado por Andy deberá buscarle. Como si eso no fuera suficiente, también tendrá que enfrentarse a un codicioso proyecto científico en busca de la inmortalidad. Una cacería complicada que llevará al antiguo equipo a unir fuerzas de nuevo y hacerse preguntas trascendentales acerca de su vida y trascendencia.
La película de Netflix tuvo un considerable éxito y hace algunos meses, se anunció que se grababa su segunda parte, de nuevo, con Charlize Theron a la cabeza. De modo que es una oportunidad ideal para disfrutar de la original y sus extraños planteamientos sobre la mortalidad y el poder de la supervivencia.
Amor de Gata
La película de Netflix de Junichi Sato y Tomotaka Shibayama es una historia de amor. Y podría solo ser un romance gracioso y adorable como varios en las animaciones japonesas, a no ser por su trasfondo. La película, que comienza como un recorrido amigable por la idea del romance primaveral, termina en una curiosa exploración de varias perspectivas distintas. Por un lado, la concepción sobre la intimidad, el deseo, el miedo y la búsqueda de una forma de comprender nuestra identidad.
Por el otro, lo que el amor puede ser en toda su plenitud potente, extraña y siempre voluble. Amor de gata, también es una interesante concepción sobre cómo comprendemos la soledad, el aislamiento y en ocasiones, la realidad. Con una mezcla semejante en su argumento, la película es un recorrido elocuente, acerca de varias dimensiones distintas, acerca de los sentimientos más íntimos.
Al final, la película de Netflix deja claro que el amor es tangible, una fuerza poderosa capaz de sostener su propio lenguaje. Pero también, un recorrido que requiere valor y una poderosa fuerza de voluntad. Quizás, el punto de mayor interés de un film engañosamente simple.
Mowgli: La leyenda de la selva
Andy Serkis tiene la sensibilidad suficiente para llevar al clásico de El libro de la selva de Rudyard Kipling, a una nueva dimensión. Su trabajo detrás de cámara no solo brindó a la historia una elocuente belleza. También, una delicada mirada hacia lo esencial de este relato emocional sobre la naturaleza, la naturaleza humana y su relación con lo primitivo.
Como si eso no fuera suficiente, la película de Netflix construyó un mundo en que la realidad y la fantasía conviven desde una versión de la belleza sublime y emocional. Mowgli: La leyenda de la selva es mucho más que una adaptación. También, es un recorrido sofisticado a través de una historia mayor que brinda nuevo lustre a sus lugares más conocidos. Al mismo, profundiza en algunos por completo inéditos.
El resultado es una versión extraordinaria de un clásico para toda la familia. Una en la que el sentido del amor, la ternura y los vínculos entrañables, es un mensaje poderoso. Y también, un formidable mundo de fantasía que sostiene una narración emotiva de considerable potencia y sensibilidad.
