Tras adentrarse al mercado europeo después de convertirse en una compañía independiente a Huawei, y después de lanzar varios modelos de gama media, de entrada y gama alta, Honor ya tiene en su catálogo un buque insignia capaz de competir contra los grandes smartphones de fabricantes como Samsung, Oppo o Xiaomi: el Honor Magic 4 Pro.
Este nuevo smartphone de Honor, que destaca por su avanzada cámara, su potente procesador y su elegante diseño, no solo comparte especificaciones con algunos de los modelos más potentes que podemos encontrar en el mercado. Su precio, de unos 1.000 euros también es similar al de su competencia.
Esto, inevitablemente, hace que el Magic 4 Pro no pueda posicionarse como una alternativa más económica. Por lo tanto, y para considerarse una opción frente a terminales como el Samsung Galaxy S22 Ultra, el Xiaomi 12 Pro o el Google Pixel 6 Pro, debe ofrecer alguna característica diferencial frente al resto de modelos o, al menos, superarlos en algún área, como en el apartado fotográfico. Ahora bien, ¿es capaz de realizar alguno de estos dos objetivos?
Diseño y pantalla del Honor Magic 4 Pro: demasiadas curvas
Parece que Honor no quiere perder la esencia de Huawei en algunos de los apartados más importantes de sus terminales, y este Magic 4 Pro no es una excepción. El aspecto del terminal más potente del fabricante hasta la fecha recuerda mucho al Huawei Mate 40 Pro; tanto por sus curvas, como por su módulo fotográfico.
De hecho, el módulo donde se albergan las tres cámaras principales es, probablemente, el elemento más diferencial del diseño de este Honor Magic 4 Pro. Se trata de un módulo redondeado ubicado en la zona superior central de la parte posterior. Es grande, muy grande, y puede hacer que la estética del terminal no sea tan llamativa como en otros modelos de la misma gama. Por suerte, la trasera tiene unos tonos y unos materiales que compensan un poco esa enorme cámara. El color azulado, que cambia de color dependiendo de cómo incida la luz en la trasera, es todo un acierto. El cristal, además, se ve y sienta extremadamente premium.
En el frontal sucede algo similar. La doble curvatura, que está acompañada de unos marcos de aluminio con un tono brillante, hace que el dispositivo se vea mucho más moderno y elegante al mismo tiempo. De nuevo, se nota el mimo en la construcción. Pero esta doble curvatura tiene un pequeño problema. Primero, no obstante, voy a hablar de la pantalla.
El Honor Magic 4 Pro cuenta con un panel OLED de 6,81 pulgadas e incluye una resolución de 1312 x 2848 píxeles (lo que consideraríamos QHD+ teniendo en cuenta que la relación de aspecto de la pantalla es de 15,5:9). Cuenta, además, con tecnología LTPO, que permite adaptar la tasa de refresco de forma automática llegando a los 120 Hz. Ahora bien, ¿cómo se comporta este panel?
La pantalla del Honor Magic 4 Pro, en general, es excelente. Sin duda, está a la altura de la de cualquier otro móvil de gama alta. Tiene un brillo más que suficiente para poder disfrutar del contenido incluso a plena luz del día, unos colores muy bien interpretados y una nitidez asombrosa. Todo ello, además, con una tasa de muestreo que maximiza la experiencia a la hora de navegar por la interfaz. Honor también permite ajustar algunos parámetros, como la resolución de la pantalla o si queremos que la tasa de refresco se adapte automáticamente o, en cambio, se ajuste siempre a la máxima frecuencia.
Pero, ¿por qué la doble curvatura es un problema? Si bien hace que el terminal se vea físicamente más elegante, esta puede afectar considerablemente a la experiencia de visualización y uso de la pantalla por varios motivos. En primer lugar, la zona de la curvatura crea una especie de sombreado que se aprecia, sobre todo, cuando el panel reproduce tonos blancos —la mayoría de las veces, si no está activado el modo oscuro—. Por otro lado, crea una especie de reflejos que en ocasiones puntuales no deja ver con claridad el contenido. También resulta incómoda a la hora de interactuar con la pantalla porque da lugar a pulsaciones accidentadas con el borde de la mano.
Lamentablemente, el Honor Magic 4 Pro no es el único smartphone con este problema. De hecho, la mayoría de móviles Android que compiten con este dispositivo también tienen una doble curvatura que, en mi opinión, no es nada necesaria y que espero que deje de ser un elemento imprescindible para los fabricantes. Aun así, reitero: la pantalla, en términos de calidad, es excelente.
Un rendimiento y una autonomía familiar
Pasemos a hablar de otros dos puntos realmente importantes en el Honor Magci 4 Pro: el rendimiento y la batería. El terminal de la compañía asiática cuenta con el último SoC de Qualcomm: el Snapdragon 8 Gen 1. Incluye, además, una memoria RAM de 8 GB, así como un almacenamiento interno de 256 GB.
El rendimiento es muy similar al que obtenemos en los otros smartphones de gama alta con el mismo procesador y prácticamente la misma configuración de RAM. Es, en general, muy bueno, y permite utilizar cualquier app sin ningún problema. También funciona genial en juegos, aunque en alguna ocasión he llegado a notar algo de sobrecalentamiento. Falla, eso sí, a la hora de navegar por la interfaz. En este último caso no es culpa del procesador, ni de la configuración de RAM o almacenamiento. Es, más bien, del software.
Honor cuenta con Magic UI, una interfaz propia que funciona bajo Android 12 y que recuerda mucho a EMUI, la capa de personalización de Huawei. Incluye, de hecho, apps muy similares a la de los móviles de la compañía china. Añadiendo, además, los servicios y aplicaciones de Google —sí, podemos descargar apps desde Google Play—. El problema, es que la capa de personalización no está correctamente optimizada. Es intuitiva, y cuenta con funciones ya ajustes extra muy interesantes, pero es común ver cortes o lag al navegar por el sistema.
¿Y qué hay de la autonomía? Los 4.600 mAh de este Honor Magic 4 Pro hacen un buen trabajo. Sobre todo, con la frecuencia de actualización de pantalla adaptativa activada y el modo oscuro aplicado. Con esta configuración, de hecho, es fácil llegar al final del día con un 20 % sin ningún problema. Con un uso más intensivo resulta un poco difícil terminar la jornada con ese porcentaje, pero la carga rápida puede solucionar este pequeño inconveniente.
Honor, en concreto, incluye un cargador de 100W en la caja del terminal. Este adaptador puede suministrar el 100 % de la batería en poco más de 30 minutos. El Honor Magic 4 Pro, además, admite carga inalámbrica.
Tres cámaras que demuestran versatilidad
El enorme módulo fotográfico del Honor Magic 4 Pro esconde solo tres cámaras principales. Tres cámaras, eso sí, muy versátiles. La compañía china ha apostado por una configuración muy similar a la que encontramos en smartphones Android de gama premium, con un sensor primario de 50 megapíxeles con apertura f/1.8, una cámara secundaria ultra gran angular de la misma resolución, pero con una apertura f/2.2 y un sensor teleobjetivo de 64 megapíxeles. Esta última cámara, sin duda es la protagonista.
El sensor teleobjetivo cuenta con un zoom óptico de 3,5 aumentos, un alcance algo mayor a lo que encontramos en la mayoría de los móviles. Incluye, además, la posibilidad de capturar imágenes de hasta 10x formato híbrido. Es decir, mezclando el zoom óptico y zoom digital. El alcance máximo es de 100 aumentos. En este caso, en formato digital. Ahora bien, ¿cómo se comporta esta y el resto de las cámaras?
La lente teleobjetivo, que es, en mi opinión, la más interesante, hace un buen trabajo en cuando a reproducción de color y detalle. Sobre todo, cuando tomamos fotografías en un zoom con 3,5x aumentos. Sucede algo similar con los 10 aumentos; mantiene esa buena interpretación de los colores y un procesado que cumple perfectamente, pero pierde un poco de detalle. Esto se debe, en parte, a una pobre estabilización del sensor. Es muy poco preciso, lo que obliga a detenerse completamente para capturar una buena imagen. Ojo, únicamente cuando ampliamos a 10x.
La cámara principal, por otro lado, también ofrece unos excelentes resultados. A la altura, o incluso mejor que los que vemos del zoom 3,5x. La exposición es buena, los colores están debidamente interpretados, no le falta detalle y no oscurece la imagen las zonas con sombra. Con la cámara ultra gran angular sucede algo similar a lo que pasa cuando cambiamos de un zoom de 3,5x a 10x; mantiene esa buena interpretación de los colores y exposición, fruto de un buen procesado, pero pierde en detalle. En este caso, sobre todo, en interiores poco iluminados.
¿Merece la pena el Honor Magic 4 Pro?
Honor ha dado un salto inesperado desde su separación con Huawei, compañía china que continúa batallando entre la vida y la muerte —al menos, a lo que en smartphones respecta— a causa de las restricciones impuestas por Estados Unidos. El Honor Magic 4 Pro es una prueba de ello, y no solo porque incluye los servicios de Google, sino porque sus características son dignas de competir con la de cualquier smartphone de gama ‘premium’. Pero vayamos por partes.
Una de las prestaciones que más me ha gustado de este Honor Magic 4 Pro es su diseño. El módulo fotográfico queda en un segundo lugar cuando sostienes el terminal y notas la excelente calidad en los materiales y ese llamativo tono azulado; muy diferente al del ostentoso color brillante del Honor 50. Al diseño le acompaña una pantalla a la altura de otros móviles de gama alta, aunque con una curvatura completamente prescindible. Todo ello, además, con un rendimiento que no deja indiferente a nadie.
Respecto a la cámara, lo cierto es que las lentes del Honor Magic 4 Pro hacen un muy buen trabajo. Más que calidad — que ojo, los resultados son muy buenos en la mayoría de las situaciones, el apartado fotográfico de este smartphone derrocha versatilidad. Podemos capturar imágenes con distintos alcances, en gran angular, activar el modo noche o aplicar diferentes modos fotográficos que permiten aumentar considerablemente la experiencia.
¿Sus puntos negativos? Pequeñas malas optimizaciones en el software y algún que otro desliz en la duración de la batería cuando hacemos un uso intensivo del terminal; algo que también sucede en muchos smartphones de la competencia.
Ahora bien, ¿Consigue destacar el Honor Magic 4 Pro frente a su competencia? Realmente, el nuevo insignia de Honor no ofrece ninguna característica diferencial frente al resto de smartphones. Pero sí las iguala. Por tanto, podemos considerar este terminal como una opción atractiva para aquellos usuarios que estén buscando un modelo de gama ‘premium’ con un buen apartado fotográfico y que destaque, además, por su buena pantalla y excelente rendimiento. Es, además, una opción muy a tener en cuenta para aquellos usuarios familiarizados con los dispositivos Huawei. No obstante, no debemos olvidar que es un terminal caro, de 1.099 euros, por lo que tal vez sea mejor esperar a que su precio rebaje o, en cambio, escoger una opción algo más económica, como el Xiaomi 12 Pro, que se puede adquirir en portales como Amazon por unos 890 euros.