Huawei se enfrenta a múltiples desafíos. Las restricciones impuestas por el gobierno de los Estados Unidos la ha llevado a tomar complejas decisiones. En noviembre del año pasado debió desprenderse de la submarca Honor para "garantizar su supervivencia". A casi tres meses de aquella operación, Reuters ha asegurado que las marcas P y Mate podrían seguir el mismo camino. Sin embargo, la compañía de Shenzhen no ha tardado en desmentir esos informes.
Según recoge el medio chino The Paper, Huawei no tiene planes de vender su negocio de teléfonos móviles. La firma asegura que continuará fabricando terminales de alta gama para "proporcionar a los consumidores experiencias y servicios de productos superiores". No obstante, es preciso recordar que la compañía china también negó la venta de Honor, división que finalmente terminó en manos de Shenzhen Zhixin New Information Technology.
La agencia de noticias asegura que Huawei empezó a considerar la venta de las marcas P y Mate en septiembre de 2020, un mes después de que la prohibición impulsada por el gobierno de Donald Trump entrara en vigor. Reuters también indica que la firma se encuentra negociando empresas de inversión respaldadas por el gobierno de Shanghai, aunque, la operación podría no hacerse realidad.
El enorme desafío de Huawei: reinventarse para sobrevivir
Las restricciones comerciales impulsadas por el gobierno norteamericano golpearon fuerte a la compañía china. Huawei no puede comprar procesadores de otras marcas como Qualcomm. Si bien sigue esforzándose en diseñar sus propios chips Kirin, tampoco puede tercerizar la fabricación con TSMC. En esa línea, los de Shenzhen estarían evaluando apostar por SoCs MediaTek en lugar de los conocidos Snapdragon.
El veto también ha afectado al software. Los nuevos terminales de la marca no cuentan con los servicios de Google. Esta situación ha llevado a la marca a no quedarse de brazos cruzados y a trabajar en su propio sistema operativo denominado HamonyOS y su propio ecosistema de aplicaciones de la mano de Huawei Mobile Services y App Gallery. Posiblemente este camino lleno de obstáculos impuse a Huawei a enfocarse en el desarrollo de software y convertirse en la Google de China.