Una patente registrada por Samsung en enero de 2019 hace referencia a un smartphone de pantalla plegable capaz de expandirse y retraerse de la misma forma que el Mate X de Huawei.

El Galaxy Fold, anunciado el pasado mes de febrero, cuenta con dos pantallas: una externa de 4,6 pulgadas y una interna de 7,3 pulgadas capaz de plegarse. El Mate X de Huawei, cuya mecánica es similar a la descrita en la patente de Samsung, cuenta con una única pantalla de unas ocho pulgadas que se pliega hacia dentro y, a la vez, hacia fuera. De esta forma, se reducirían costes –al montar una única pantalla– y se adelgazaría el dispositivo.

El diario norteamericano Bloomberg informó la pasada semana que la compañía surcoreana trabaja actualmente en un smartphone de formato similar al Mate X, el cual podría anunciarse oficialmente a finales de 2019 o comienzos de 2020. Las fuentes consultadas por la publicación también aseguran que Samsung trabaja en un smartphone plegable de formato concha.

Los teléfonos plegables son una de las mayores tendencias de la industria telefónica actual. Samsung y Huawei presentaron sus primeros modelos en febrero, y se espera que Xiaomi realice un movimiento similar durante los próximos meses.

El precio de los primeros modelos plegables duplica el de los smartphones de alta gama actuales, llegando a costar hasta 2.300 euros en el caso del Mate X. Se espera que, conforme aumente la demanda y se facilite la producción, estos productos reduzcan progresivamente su precio de venta.

¿Por qué ahora los teléfonos plegables? Breve historia de las pantallas flexibles