Los tweets de Elon Musk continúan provocado consecuencias legales, pero en esta ocasión para Tesla. El Departamento de Justicia de los Estados Unidos (DOJ, por sus siglas en inglés) está investigando por posible fraude a la empresa de coches eléctricos debido a las declaraciones que hizo su CEO a principios de agosto sobre querer privatizarla.
Después de la polémica que provocó su tweet del 7 de agosto, incluso envió un comunicado a los empleados de Tesla para aclarar que no era una decisión final, sino el plan que él considera que debería de seguir la automotriz para ser más eficiente y rentable a largo plazo.
Elon Musk aclara su idea de convertir a Tesla en una compañía privada
La investigación por fraude que llevan a cabo los fiscales federales desde el mes pasado está centrada en que Musk declaró que tenía los "fondos asegurados" para tal acuerdo, según ha dado a conocer Bloomberg.
Una semana después del tweet en cuestión, el CEO explicó que con esos "fondos asegurados" se refería a conversaciones que sostuvo con el Fondo de Inversión Pública de Arabia Saudí, que había expresado su interés de ayudar a privatizar a la automotriz a principios de 2017. No obstante, que también cree que Tesla cuenta con los fondos suficientes para hacerlo sola.
Un portavoz de Tesla declaró en un comunicado a The Verge:
El mes pasado, después del anuncio de Elon de que estaba considerando privatizar la empresa, Tesla recibió una solicitud voluntaria de documentos del DOJ y ha cooperado para responder a eso. No hemos recibido una citación, una solicitud de testimonio ni ningún otro proceso formal. Respetamos el deseo del DOJ de obtener información al respecto y creemos que el asunto debe resolverse rápidamente a medida que revisan la información que han recibido.
Además de esta investigación criminal, la automotriz está en la mira de dos investigaciones civiles. Por un lado, la Comisión de Bolsa y Valores estadounidense (SEC, por sus siglas en inglés) está investigando si engañó a los inversionistas y violó las leyes federales de valores con las declaraciones de Musk, pues su tweet hizo que el precio de las acciones de Tesla se dispararan. Al menos tres inversionistas han presentado una demanda en la que acusan al CEO de haber manipulado el mercado con su tweet del 7 de agosto.
Por otro lado, la SEC también está indagando a la compañía por posiblemente confundir a los inversores sobre su producción del Model 3. Tesla ha tenido que tomar medidas como prescindir de dos colores de la gama del modelo para acelerar el ritmo de producción. No obstante, sigue en duda si Musk podrá volver a repetir el hito que logró a principios de julio, producir 5.000 unidades del coche en una semana.
Si Musk quiere mantener Tesla y su salud mental debería abandonar Twitter
Apenas ayer lunes, el buzo británico Vernon Unsworth, quien recientemente participó en las labores de rescate de un equipo de fútbol de niños y su entrenador en una cueva en Tailandia, presentó una denuncia por difamación contra Musk, acusándolo de haberle llamado "pedófilo" frente a sus más de 22 millones de seguidores en su cuenta de Twitter y, más tarde, un "violador de niños" por haberse mudado a Tailandia para casarse con una niña de 12 años, en un intercambio de correos electrónicos con un medio.
Las controversias en torno a Musk han puesto en duda su liderazgo. Su más reciente polémica fue durante una entrevista para el podcast de Joe Rogan Experience, en la que estuvo fumando hierba y bebiendo whisky mientras conversaba sobre aviones eléctricos y la importancia del uso de energías renovables.