Parece que Netflix nos hará esperar hasta principios de 2019 para poder disfrutar de la tercera temporada de Stranger Things. Pero mientras aguardamos a su estreno vamos conociendo nuevas novedades de la exitosa producción. Según ha confirmado durante el evento See What's Next su jefe de contenidos, Ted Sarandos, la serie incorporará dos nuevos fichajes: Jake Busey, que interpretará a un periodista sin escrúpulos llamado Bruce, y Cary Elwes, que dará vida al político Larry Kline.
Ambos actores se unirán a la plantilla de Stranger Things, en la que ya se conocían otras novedades para la tercera temporada. Netflix había anunciado que Priah Ferguson, hermana de Lucas en la ficción, tendría un mayor protagonismo, mientras que la joven Maya Thurman-Hawke era otro de los fichajes de la producción de los hermanos Duffer. La hija de los también actores Uma Thurman y Ethan Hawke llegará a Hawkins para interpretar a una chica alternativa llamada Robin.
Además, según había desvelado el productor ejecutivo de Stranger Things, Shawn Levy, durante una entrevista con Glamour, la relación entre Mike y Eleven se afianzará durante la tercera temporada. La serie de Netflix tendrá lugar durante el verano de 1985, donde veremos cómo ambos protagonistas —de entre 13-14 años de edad en la ficción— mantienen una relación que no será sencilla ni estable, según informó The Hollywood Reporter. Otro de los grandes descubrimientos en Hawkins de las pasadas temporadas continuará en su "rol paternal". Así lo aseguró hace unas semanas Levy, que desveló que mantendrían la magia alrededor de Steve Harrington, interpretado por Joe Keery.
Las novedades anunciadas por los creadores de Stranger Things llegan tiempo después de que los hermanos Duffer fueran acusados de plagio. Charlie Kessler, director del cortometraje Montauk, aseguró que la serie de Netflix estaba basada en su filme. "Después del éxito masivo de Stranger Things... los demandados han hecho enormes sumas de dinero al producir la serie basada en los conceptos del demandante", sostiene en su denuncia. Los creadores de Stranger Things respondieron a las acusaciones diciendo que eran completamente infundadas. La exitosa serie de Netflix siempre ha sido relacionada con un libro de ciencia ficción rodeado de teorías conspiranoicas, el proyecto Montauk.
