La Confederación de Sociedades Científicas de España (COSCE) ha dado a conocer su análisis preliminar sobre la inversión en I+D del proyecto de los Presupuestos Generales del Estado para 2018. El informe de urgencia destaca que "los fondos destinados a la ciencia crecen respecto de 2017 un 6,8% contando la inflación prevista". La COSCE aplaude con reservas el incremento presupuestario, al señalar que "sigue sin corregir los déficits generados en los últimos años, en especial por lo que respecta a la inversión en recursos humanos y su formación".

El Gobierno ha defendido que la subida de la inversión en I+D es de 542 millones de euros, lo que representa un 8,33% más que en el ejercicio anterior en términos absolutos. Sin embargo, el aumento presupuestario se queda en 325,61 millones de euros (5,38% más) para los fondos civiles, mientras que el gasto en investigación militar se incrementa 216,96 millones, un crecimiento que supone un 46,99% más que en los presupuestos pasados. En el libro amarillo de los Presupuestos Generales del Estado, el Ministerio de Hacienda asegura que "la política de I+D+i es una de las que más aumenta, un 8,3%, hasta los 7.044 millones de euros".

Gran parte del presupuesto en I+D no se gasta

Según el informe de urgencia presentado por COSCE, a diferencia de otros ejercicios, el proyecto de los PGE 2018 contemplan una subida de las subvenciones y de los presupuestos en las partidas de investigación. "Los fondos no financieros se incrementan 226,65 [millones de euros], lo que supone un 8,68% más que en 2017 y los financieros 315,93 [millones], lo que representa un 8,1% más", explica la COSCE. La organización, que engloba a las principales sociedades científicas del país, lamenta que no se dé "un aumento significativo del peso de los recursos no financieros frente a los financieros, cuya relación sigue estando alrededor del 40/60 a favor de los segundos".

Esta diferenciación es importante, ya que las partidas destinadas a subvenciones en investigación son las que se ejecutan de forma mayoritaria, algo que no sucede con los préstamos en I+D, que no pueden ser aprovechados por universidades y organismos públicos. De hecho, según las cifras que baraja el propio Ministerio de Economía, se gastan el 98% de las subvenciones para I+D+i, mientras que solo sucede lo mismo con el 10% de los recursos financieros.

Esto convierte buena parte de los aumentos presupuestarios de la ciencia en España en mero maquillaje: de acuerdo con la Fundación COTEC, solo se ejecutan uno de cada tres euros destinados a la investigación, una realidad muy criticada por la COSCE. "Más preocupantes resultan las cifras provisionales disponibles sobre la ejecución del presupuesto de 2017, que solo ha sido del 29,7% de los recursos intervenidos por la IGAE", señalan los autores del informe difundido hoy.

La ciencia en España, en una situación "preocupante"

COSCE también resalta el aumento de presupuesto de 30 millones de euros que recibe la Agencia Estatal de Investigación, que gestiona ahora los fondos destinados a los contratos del programa de Formación del Personal Investigador (FPI), destinados a científicos que realicen el doctorado. No obstante, la entidad lamenta que la otra iniciativa de la que dependen buena parte de los contratos predoctorales en España, la de Formación del profesorado universitario (FPU), se incremente únicamente en 175.000 euros.

Por otro lado, la Confederación critica que solo el INTA reciba un verdadero aumento de la inversión, mientras que otros organismos públicos de investigación (OPI) vean casi estancadas o incluso reducidas sus partidas presupuestarias. "Aunque hay una mejora respecto a los años pasados hay aspectos como los OPI y la formación de personal que necesitan abordarse de forma mucho más intensa", destaca el informe elaborado por José Molero, de la Universidad Complutense de Madrid, y José de No, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas.

"El envejecimiento de plantillas y la estrechez de recursos en los primeros junto con la falta de inversión en recursos humanos y su formación están llevando al Sistema de Ciencia a un debilitamiento del que será difícil recuperarlo", lamenta la COSCE en su análisis preliminar. En ese sentido, por ejemplo, la edad media de la plantilla en el CSIC se sitúa en 54 años, según un estudio realizado por Comisiones Obreras, donde se criticaba la excesiva temporalidad y precariedad laboral en la ciencia de nuestro país.

El informe presentado hoy por COSCE concluye resaltando la preocupante situación de la investigación en España, un grave estado que el proyecto de los PGE 2018 no logra corregir —a la vista de las cifras y de los datos de ejecución presupuestaria—, y que, en opinión de la Confederación, "hipoteca" el futuro del país.