Tras anunciar la compra de Respiro hace unos días, SEAT llegaba al Mobile World Congress de Barcelona para presentar su nueva propuesta de movilidad del futuro. Xmoba, como ha sido bautizado el proyecto, tendrá como principal objetivo identificar, testear, comercializar e invertir en proyectos que contribuyan a impulsar soluciones que mejoren la movilidad del futuro.

Dentro de Xmoba, destacan dos iniciativas, la primera es Justmoove, una plataforma que permite la reserva y pago de parkings, peajes e incluso repostajes en gasolineras. La segunda, es la integración de Respiro.

Con relación a la compra de esta última, el presidente de SEAT, Luca de Meo, es consciente de que la compañía llega con cierto retraso al negocio del carsharing. “Hemos llegado tarde, pero no queríamos entrar a cualquier precio. Nos consta que otras compañías han invertido grandes cantidades, nosotros hemos pagado una cantidad aceptable. Ahora queremos ver cómo funciona y evoluciona todo”.

Hemos pagado una cantidad aceptable por la compra de Respiro. Otras empresas han invertido mucho más por entrar en el mercado del coche compartido

De Meo ve el retraso en la llegada a este mercado como una ventaja ya que han tenido tiempo "de pensarlo bien". "Es un proyecto a largo plazo, no para especular. Queremos usarlo como base para ver cómo se comporta la industria en general. Respiro es un embrión de todo lo que puede ser a largo plazo".

En cuanto a los cambios que sufrirá Respiro en los próximos meses Arantxa Alonso, consejera delegada de Xmoba confirma que inyectarán nuevos recursos para mejorar la plataforma, mantendrá a los trabajadores y que su estrategia será la de ir cambiando los vehículos de la flota actual por coches de la marca SEAT. De manera progresiva, sin plazos y sin prisas.

Vehículos eléctricos: sin confianza en el modelo actual

SEAT anunció hace unas semanas el nuevo SUV que comercializarán muy pronto, el modelo Tarraco. Un segmento en el que parece poner interés como nueva línea de negocio, junto a la nueva marca Cupra. Sin embargo, todavía no comercializa ningún vehículo eléctrico. El motivo, según De Meo, son los tres problemas actuales que existen de cara al usuario: la poca autonomía de las baterías, la escasez de puntos de carga, y el precio considerablemente superior comparado con un vehículo de combustión.

"Tenemos fijado el 2020 como el año de nuestro primer vehículo eléctrico. No nos preocupa no haber sacado otro modelo previamente ya que seremos la segunda marca del grupo Volkswagen en comercializarlo".

De Meo y el resto de la compañía se han fijado el año 2020 (inicialmente iba a ser en 2019) porque creen que el coche eléctrico actual no es una alternativa al coche de combustión, al menos hoy en día. "Sólo cuando el coche eléctrico sea mejor que el de combustión, será el momento de comercializarlo. En 2020 saldremos con un producto perfectamente preparado para ser vehículo eléctrico, donde todos sus componentes hayan sido diseñados y preparados para un coche eléctrico y no una adaptación del vehículo de combustión como se ve hoy en día".

Para el presidente de SEAT, nadie compra hoy en día un coche eléctrico por su elevado precio y sus baterías de autonomía insuficiente. “Si tienes un buen teléfono, con buena cámara, buenos componentes y buen rendimiento, pero es caro y la batería sólo dura dos horas: no te lo compras".

Por ello, el verdadero salto cualitativo en el mundo de los vehículos eléctricos será la siguiente generación, en la que SEAT sí estará presente.

El futuro del vehículo autónomo

Pese a los avances que ha realizado SEAT en ayudas a la conducción, De Meo se mostraba escéptico ante la llegada del coche autónomo, al menos en la situación actual. En su opinión, ningún usuario se comprará un coche autónomo para su uso particular, al menos dentro de las ciudades.

De Meo sí ve útil el coche autónomo para mejorar y reducir la movilidad en las ciudades. "Cuando analizas todos los gastos que tienen las plataformas de movilidad, ves que existen una serie de gastos elevados relacionados con el aparcamiento. Pero imagina que tienes un coche con nivel de conducción autónoma 5 circulando las 24 horas de día por ciudad llevando a las personas de un lado a otro. La cuenta de resultados es diferente".

Pero para lograrlo, está convencido de que el camino es largo, y que aún es necesario arreglar muchos aspectos y algoritmos a la hora de la toma de decisiones. Por ejemplo, entre atropellar a una persona o sufrir un accidente.

En cuanto al futuro de la industria del automóvil en general, De Meo cree que los carlovers tendrán que adaptarse, y nadie se comprará un coche propio. Se despide de la entrevista utilizando una frase de Ferdinand Porsche para reforzar esa idea. "El último coche que se comprará una persona, será un deportivo. Sólo como un capricho".