Cuanto más sabemos del cáncer, una serie innumerable de patologĂas asociadas al malfuncionamiento de nuestras propias cĂ©lulas, mejor entendemos lo difĂcil que es combatirlo. Hace falta usar tĂ©cnicas de lo más punteras y estrategias innovadoras para enfrentarlo. Si no, que se lo digan a este virus y su camuflaje artificial diseñado en un laboratorio. Gracias a Ă©l, la terapia gĂ©nica se convierte en una tĂ©cnica Ăştil contra el cáncer. ÂżCĂłmo puede ayudarnos un virus a luchar contra un tumor?
¿En qué consiste la terapia génica?
Los virus son un enigma inquietante para los biĂłlogos. A estas alturas todavĂa no nos hemos puesto de acuerdo sobre si están vivos o muertos. Parecen encontrarse en la puerta de entrada de lo que consideramos un organismo vivo, pero en realidad son poco más que grandes proteĂnas.
Poseen una parte externa, una cubierta, que emplean para adherirse a la célula y entrar en ella, infectándola. Una vez dentro usan la maquinaria celular para copiar su material genético y reproducirse. Esta misma cubierta es la que los delata. Nuestro sistema inmune la detecta y elimina al virus.
Ahora, imaginemos que podemos coger su ADN y cambiarlo por otro que nos interese. Uno, por ejemplo, que nos inmunice, o que repare una mutación. El virus llegará a la célula e inyectará su material genético, pero este no será dañino sino todo lo contrario.
Esto mismo es lo que pretende la terapia gĂ©nica. La cápsida del virus desaparecerá poco despuĂ©s, mientras que la cĂ©lula será reparada y, lo que es mejor, producirá nuevos virus capaces de "curar" el mal existente en otras cĂ©lulas "rotas". Esto es especialmente Ăştil en los tumores, donde el fallo principal se encuentra en el ADN celular, el cual podrĂa ser reparado de esta manera.
Virus contra los tumores
Ahora bien, la ingenierĂa genĂ©tica no es cosa sencilla. No se puede usar cualquier virus ni hacerlo de cualquier manera. Es importante seleccionar bien la mejor herramienta. En ese sentido, el adenovirus humano 5, que normalmente causa los sĂntomas del resfriado, es un gran candidato.
Este es un virus grande, con una cantidad enorme de material genético. Su genoma puede reemplazarse completamente por uno artificial que contiene solo genes útiles y, sin ninguno de los genes virales restantes, el virus ya no puede replicarse ni desencadenar enfermedades. Además, el genoma del adenovirus es muy grande y no se integra en los cromosomas humanos.
ÂżY por quĂ© no lo usamos para la terapia gĂ©nica? Su uso en la contra de los tumores ha sido muy limitado debido a que carecen de la capacidad de infectar cĂ©lulas cancerosas y, por lo tanto, no pueden inyectar los patrones genĂ©ticos de las molĂ©culas terapĂ©uticas para combatir la enfermedad. Además, los adenovirus son neutralizados por el sistema inmune y eliminados muy rápidamente por el hĂgado.
Esto se debe a su cubierta, la cual es fácilmente reconocida por las cĂ©lulas inmunitarias. Pero ÂżquĂ© ocurre si camuflamos al virus? Precisamente eso es lo que han conseguido los investigadores de la Universidad de Zurich, dirigidos por Andreas Plueckthun. Y para ello han tenido que crear una proteĂna especial.
AsĂ funciona el camuflaje de un virus
Para poder camuflar al virus, tal y como mostraban en el reciente estudio publicado en Nature Comunications, han tenido que crear una cubierta proteica que impida al sistema inmune marcar la cápsida como objetivo. Pero, además, esta cubierta tiene otra función: "Hemos creado moléculas que actúan como un adaptador entre el virus y la célula tumoral", explicaba Markus Schmid, primer autor del estudio.
Sin este "adaptador" los virus, sencillamente, no pueden infectar a las cĂ©lulas, por lo que no importa que no sean detectadas. Con dicho escudo, el virus no solo evita a las cĂ©lulas inmunes y se adhiere a las tumorales, sino que tambiĂ©n evita que el hĂgado lo elimine rápidamente, lo que normalmente imposibilita las aplicaciones terapĂ©uticas.
Este sistema ha sido probado ya con animales de forma muy exitosa, segĂşn cuentan los investigadores en el estudio. Aunque eso no quiere decir que funcione en seres humanos. Aun asĂ, **el equipo cree que se podrán desarrollar nuevas terapias para diferentes tipos de cáncer** a partir de sus resultados.
Las numerosas ventajas de los adenovirus, explican, ayudarán a abordar uno de los mayores problemas de la medicina contra el cáncer: el desarrollo de resistencias contra los medicamentos. "Con este adaptador genĂ©tico hemos abierto muchas vĂas para tratar cánceres agresivos en el futuro, ya que podemos hacer que el cuerpo mismo produzca un cĂłctel completo de terapias directamente en el tumor", explica Andreas Plueckthun.
Y Âżcuánto podrĂamos tardar en ver esta terapia en el mercado? Probablemente, como mĂnimo, una dĂ©cada. Ya os hemos explicado en alguna ocasiĂłn que el desarrollo de terapias y fármacos conlleva años de estudios y miles de dĂłlares. La terapia gĂ©nica está en estos momentos en sus albores, pero no es motivo para desesperarse. Los resultados son muy prometedores. ÂżQuiĂ©n sabe si no tenemos noticias antes de lo que esperamos?