Horacio Llorens es el protagonista de uno de los vídeos más espectaculares que hemos visto en los últimos años. No solo por su naturaleza y belleza, por la forma de llevarlo a cabo. Un juego de luces en el que el parapente se fusiona con el hombre y el entorno creando una ilusión con la aurora boreal que deja con la boca abierta a todo aquel que asiste al espectaculo, también de forma virutal.
Y este juego de luces genera un escenario privilegiado en el que todo parece sacado de la realidad virtual de los 80s, mezclado con la más pura naturaleza en uno de los entornos más hostiles y fríos de la civilización, en los que hay tantas cosas que pueden salir mal, y más haciendo parapente, que la gesta de Horacio Llorens ha sido igual de arriesgada de que bella.
Había varias complicaciones respecto a un vuelo normal: para empezar, el tiempo. Había nieve y temperaturas que llegaron a 15 bajo cero, más bajas aún cuando volaba a 300 o 400 metros de altura.- Horacio Llorens en declaraciones a MARCA
No es el único hito de Lorens, que ya ha volado sobre las islas del Pacífico, en África de norte a sur y por la travesía del Cauca en Colombia. Con imágenes como estas, el parapente sigue dejando, después de tanto años, con la boca abierta a propios y a extraños.