Por mucho que nos intenten hacer creer lo contrario, escribir en una pantalla táctil es mucho más molesto que hacerlo en un teclado mecánico, que tiene una respuesta física muy necesaria, además de estar adaptado a las necesidades ergonómicas de los usuarios. Pero hay muchos, y todos hacen exactamente lo mismo, de una u otra forma. Por ello, hemos decidido hacer una lista con cuatro de los mejores teclados que se pueden encontrar por menos de 80 euros.
Establecer el precio máximo para entrar en una lista es algo complicado, pues depende de diversos factores, además de las preferencias personales de cada persona. Sin embargo, superar los 80 euros ya nos aleja del terreno de los teclados destinados a un trabajo y un uso de ocio normal y ya se acerca a las cantidades que piden los fabricantes de modelos para gaming o para otras actividades concretas. De todos modos, cuanto más se acerquen al límite que hemos puesto, más les exigiremos a estos periféricos.
Logitech Wireless Keyboard K360
No hay mucho que decir de Logitech Wireless Keyboard K360, pero eso —en este caso— es bueno. Es pequeño (pero sin ser incómodo), es ligero y es inalámbrico. No hay más. ¿Y por qué es uno de los mejores teclados? Porque es justo lo que se le tiene que pedir a un dispositivo como éste, en el que lo importante es que combine estas características con un precio adecuado. Lo hace.
El precio de venta al público en la web de Logitech ya es bastante ajustado (30,90 euros), pero es fácil encontrarlo todavía más barato en Internet. Si a esto sumamos un diseño elegante y atractivo, sin estridencias pero no por ello aburrido (recuerda al de K810, estamos ante un magnífico periférico.
Eso sí, no hay muchas opciones adicionales ni de personalización. Cuenta con 6 teclas de acceso rápido y 12 teclas F programables, pero nada más. Para el usuario medio será suficiente, pero para quienes quieran controlar por completo su ordenador puede quedarse algo corto. Además, aunque es inalámbrico (la compañía asegura que las pilas duran hasta 3 años), necesita un puerto USB, así que no es compatible con teléfonos y tablets.
Logitech Washable Keyboard K310
De nuevo, un dispositivo de Logitech, aunque en este caso lo que hace que entre en esta lista con los mejores teclados baratos es completamente diferente. Y es que Washable Keyboard K310 está pensado para la gente que no quiere preocuparse por ensuciar su teclado o, incluso, de derramar líquidos sobre él. ¿Por qué? Porque es completamente lavable.
Esto impone algunas limitaciones, como el necesitar un cable. A cambio, tiene un tamaño mayor (es un teclado completo) y afortunadamente no renuncia al diseño. Las teclas son grandes y llamativas y las líneas son similares a las del K360 visto anteriormente, pues también es elegante y alegre. Su precio, 41,50 euros, es bastante asequible.
Multi-Sync Keyboard
Hace poco os hablamos de Multi-Sync Keyboard, pero conviene recordar qué hace que este teclado sea especial, aparte de su evidente parecido con los periféricos que comercializa Apple. Aunque tampoco hay que ser un genio para deducirlo, porque el nombre lo deja claro: funciona con varios dispositivos.
No es el único que lo hace, pero los 69 euros que cuesta hacen que sí sea uno de los más baratos. Y, como el resto de entradas en esta lista de teclados, lo hace sin renunciar al diseño. También apuesta por la sencillez, algo que siempre es de agradecer.
Por lo tanto, podemos sincronizar hasta 3 terminales por Bluetooth y otro mediante USB (está diseñado con dispositivos iOS y OS X en mente, pero es compatible con Android y Windows). Para cambiar entre ellos únicamente hay que pulsar un botón y empezar a escribir en la nueva pantalla en la que estemos trabajando.
Microsoft Wedge Mobile Keyboard
El teclado Wedge de Microsoft entra en la lista de los mejores teclados por poco, ya que su precio es de 79,95 dólares. Pero lo cierto es que merece la pena hacer el desembolso, ya que a cambio se obtiene un teclado Bluetooth (es decir, no ocupa puerto USB y se puede usar con smartphones y tablets) pequeño, ligero, elegante y, lo que es más importante, cómodo.
La apariencia de Wedge puede engañar, ya que la impresión es que sus teclas tienen muy poca separación. Sin embargo, acostumbrarse a su tamaño apenas requiere unos minutos. Además, hay varias teclas con funciones específicas para Windows 8 y la tapa que cubre el periférico funciona a la vez como soporte para tablets. Cuando se vuelve a colocar sobre el teclado, éste se apaga automáticamente.