Probablemente sea el titulo más extraño que haya escrito hasta ahora, pero es absolutamente correcto. Hemos hablado de camaras extrañas, como aquella realizada con un huevo por el fotografo Francesco Capponi, pero esta vez la creatividad (y en cierto modo el estomago) ha llegado a un nuevo limite.
En el blog UrbanPhoto cuentan la bizarra historia de Martin Cheung y su experimentación con las cámaras pinhole. Cheung estudió arte en Melbourne y al mismo tiempo trabajó en un restoran chino. Durante su ultimo año de estudio, Cheung descubrió que el pato asado es un símbolo de la comida china, por lo que quiso saber como un pato asado vea el barrio chino.
¿La solución cual fue? Convertir el pato en una cámara. Los primeros intentos no funcionaron, debido al aceite y los huesos del pobre animal arruinaron el film, pero después de un poco de experimentación, como poner la carne en el congelador un rato antes, logró su cometido: ver a través de los ojos del pato, en este caso, a través de su estomago ya que ahí se ubicaba el material sensible.
Cheung compro su pato asado para convertirlo en una patocamara, fue hasta Guangzhou y tomó una foto de la estatua de Bruce Lee.
¿El resultado? Una extraña imagen de la estatua, vista a través de los ojos-estomago del pato rostizado:
¿Arte? ¿Creatividad? ¿Crueldad? ¿Exceso? ¿Tu que opinas?