RIM podría estar teniendo problemas para integrar los servicios de BES y BIS en el Blackberry Colt, el próximo smartphone de la canadiense en llegar con QNX. Al parecer estarían pensando seguir los pasos de la tableta, dejando a un lado la posibilidad de incluir el protocolo que caracteriza a la empresa por ofrecer conectividad encriptada, privada o en manos de los ISP.
Esto no indica, ni asegura, que el dispositivo no los incluirá, pero sí se cree que podría llegar al mercado antes de perfeccionarlo de la misma forma que la tableta que tanto descontento ha causado por depender de un Blackberry para revisar el correo, sincronizar y administrar contactos y eventos.
La razón del por qué se lanzaría un equipo -prácticamente sin terminar considerando casi indispensable estos protocolos- es por el desplome y caídas de ventas que reportó la empresa. A pesar de que se esperan nuevos equipos de RIM con la última versión de Blackberry OS, ejecutivos piensan que la llegada de un terminal con sistema diferente abrirá campo para poco a poco realizar la transición definitiva a QNX. La pregunta del millón es si será correcto correr el riesgo de lanzar un equipo sin las prestaciones que caracterizan a la empresa.
Desde ya los analista aseguran que sería un desastre lanzar un equipo así, sería uno más del montón entre iOS, Android y Windows Phone 7 que llevaría la etiqueta de novato de pulgada a pulgada. Como siempre, el apuro conlleva al cansancio y si se quiere hacer las cosas bien lo mejor es tomarse su tiempo, aunque en este mercado el que se descuida pierde, siendo esto ultimo lo que RIM quiere evitar.
Por otro lado, Blackberry OS 7 sigue siendo el mismo sistema que las versiones anteriores pero con ciertas mejoras que claramente no muestran una evolución determinante para lograr posicionar los dispositivos Blackberry más allá del dichoso PIN. sin embargo, el PIN y la comunicación interna/privada a través de estos protocolos es lo que capta la atención de empresas. Quizás por eso, cuando se lanzó la Blackberry Playbook con un sistema operativo nuevo para las masas con potencia y una interfaz moldeable al gusto del fabricante, se creyó que sería el killer de todos los tablets, de hecho, aún cuenta con lo necesario para lograr posicionar, pero el depender de otro equipo para depender prácticamente en todo para el uso esencial, lo pone en tela de juicio y se seguirá sintiendo como un equipo no terminado sin acceso nativo.
Esperemos que RIM logre solucionar los supuestos problemas de integración de protocolos en QNX y llegue un equipo con la verdadera potencia de un sistema operativo tanto para tabletas como para dispositivos móviles que cuente con el respaldo de lo que hizo crecer a la empresa. La fecha tentativa sería septiembre puesto que se espera, por fin, la inclusión del cliente de correo nativo para Playbook.