A finales de la semana pasada comentaba en esta casa que el ciberactivismo por una red neutral había arrancado como consecuencia directa del rechazo en el Senado de la enmienda presentada por el Partido Popular sobre el tema que nos ocupa. Pues bien, en las últimas horas el movimiento se ha hecho más potente.
Por un lado tenemos que esta publicación junto a unas cuantas más han publicado a primera hora de hoy un documento, que todo aquel que quiera puede apoyar y difundir, bautizado con el nombre de “Manifiesto por una Red Neutral”. En él básicamente se deja muy claro lo que se entiende comúnmente por neutralidad de la red junto a once conceptos básicos más en forma de puntos relacionados con el espinoso asunto (para algunos, otros lo tenemos perfectamente claro).
Por el otro la Asociación Española de la Economía Digital (Adigital), que está compuesta por más de 500 empresas, también se ha subido al carro de las presiones, protestas o como lo quiera llamar cada cual, y ha publicado cinco puntos clave alrededor de los cuales según su criterio se debería desarrollar un nuevo marco regulatorio de protección de la neutralidad de la red. Concretamente son estos:
- En ningún caso los paquetes de datos pueden ser discriminados por razones de origen, destino, protocolo o contenido.
- Las operadoras no pueden alterar el libre mercado y la libertad de competencia introduciendo en sus servicios factores que distorsionan la competitividad.
- La circulación de los datos a través de la red de cualquier proyecto empresarial, institucional o privado debe ser libre, y no sujeta a posibles acuerdos con los teleoperadores. Estos acuerdos obstaculizarían la innovación y el desarrollo en este canal.
- Las restricciones al tráfico en internet sólo deben producirse en casos excepcionales, y deben realizarse de forma pública y con un criterio de máxima transparencia.
- Es imprescindible que la Ley incorpore un marco sancionador y un procedimiento eficiente para la resolución de los conflictos que surjan en este ámbito».
¿Por qué justo ahora estas reacciones? os estaréis preguntando algunos y la respuesta es bastante fácil. Ambos movimientos han llegado hoy, además de por el rechazo a la enmienda que decía arriba, ya que en las próximas horas tendrá lugar en el Senado un segundo debate sobre la neutralidad de la red que se centrará en la nueva enmienda confeccionada por todos los grupos que tiraron hacia atrás la anterior y la cual a muchos nos parece una peligrosa a la par que engañosa chapuza (esto será tratado en profundidad aquí en cuanto finalice el mentado debate. Mientas, puedes ir abriendo boca con el artículo “Red neutral: 2º asalto” publicado por Enrique Dans en Expansión hace unos días). Además para rematar la jugada este mes Bruselas presentará conclusiones de la consulta pública sobre neutralidad de la red que realizaron a nivel europeo entre junio y septiembre de este año.
Y dicho todo esto cierro con una conclusión y dos peticiones (por pedir que no quede). La conclusión no es otra que como vemos, y aunque algunos políticos lo considerarán “factores externos degradantes”, los diferentes estamentos sociales --desde ciudadanos hasta agrupaciones de empresas-- ansían participar activamente en este debate, lo que sin duda son geniales noticias tanto para el debate concreto sobre neutralidad de la red como para la democracia en general.
Finalmente las peticiones. La primera que quiero hacer es que, si te sientes representado por el texto “Manifiesto por una Red Neutral”, te adhieras a él como más te guste y le des toda la promoción que esté en tus manos, y la segunda va por el sendero de lo que decía al final del post “Arranca el ciberactivismo por una red neutral, ¿te unes?”: hay que seguir impulsado/apoyando medidas de presión y acciones concretas (la creación de una organización ciudadana por ejemplo) así como mantenernos unidos y no dispersarnos por minucias en pos de la tan vital neutralidad de la red.