Ayer se celebraron elecciones en Suecia, y mientras la derecha se hacia con la mayoría del parlamento, los integrantes del Piratpartiet vieron desintegrarse sus posibilidades de formar parte del parlamento de su país al obtener menos del 1% de los comicios, cuando era necesario un 4% para asegurarse algún escaño. El líder del partido, Rick Falkvinge declaró que:
El Partido Pirata sueco hizo su mejor campaña en la historia. Tuvimos más medios, más artículos, más debates y más panfletos que nunca. Desafortunadamente, el viento no sopló en nuestras velas en esta oportunidad, como lo hizo en las elecciones europeas. Cada generación debe conquistar la democracia. Nadie dijo que iba a ser una pelea fácil.
Esto significa adiós a la inmunidad parlamentaria que ofrecieron para The Pirate Bay y Wikileaks, y que sus planes de legislar hacia la legalización de archivos compartidos sin fines comerciales y la criminalización del abuso de copyright tendrán que esperar.
El resultado de la elección no fue muy sorpresivo para los miembros del partido, que ya lo veían venir según las encuestas previas. Según contó Falkvinge a TorrentFreak, les jugó en contra la poca atención a temas como la privacidad, la cultura y el conocimiento, de alta importancia para el Piratpartiet, pero para nada útiles de mencionar para los demás partidos, dejando estas problemáticas fuera de los debates, y dando poca participación visible al partido.
Podrán volver a presentarse en cuatro años, mientras tanto conservan los escaños ganados el año pasado en el Parlamento Europeo. También ante su actitud pionera, lograron iniciar un movimiento que ya cuenta con partidos piratas en otros 40 países, que empujan por los mismos ideales.
Hubiera sido un gran paso que el partido entrara en el parlamento, un avance en la lucha por renovar las leyes de información por la que tanto está haciendo este partido. Luego de la victoria conseguida en la Eurocámara el año pasado, resulta decepcionante que no hayan logrado conseguir un porcentaje similar en estos comicios, sobre todo teniendo en cuenta que se trata del tercer partido en cantidad de miembros en el país. Algunos se preguntan si tal vez su postura en favor de Wikileaks (y en contra de algunos poderosos en Estados Unidos) no influyó en este resultado, pero lo más probable es que el pueblo sueco tenga en mente otros problemas, y como dice Falkvinge simplemente los temas por los que aboga su partido no lograron un lugar central en el debate del momento, dejándolos olvidados. De todas formas seguirán con lo suyo, organizándose para próximas elecciones, trabajando en la integración del partido internacional, que cada vez crece más, y haciendo ruido cuando los fanáticos del copyright se ponen abusivos.
Vía: TorrentFreak
