En 2013, la película Her nos presentaba un futuro muy curioso donde el amor entre humano e inteligencia artificial tenía lugar gracias a un sistema operativo diseñado para satisfacer las necesidades de su dueño. Pues bien, parece que solo nos ha tomado diez años el convertir esto en una realidad. El problema —al menos uno de ellos—, es que podría convertirse en una nueva crisis de misoginia por parte de un grupo ya sensible a ejercer esta violencia.
Un reciente reporte de The Guardian arroja la primera luz sobre este fenómeno. En él entra el tema de las expectativas de género. Por esto, la existencia de chatbots como el de Amouranth, diseñados para "satisfacer las necesidades" de cada persona —mayormente hombres—, puede terminar muy mal.
En Reddit se han descubierto comunidades con comentarios alarmantes de usuarios. Entre los ejemplos, desear que la inteligencia artificial "fuese humana", ya que, en el caso de una persona, le ayuda a sentirse mejor "aunque la soledad sea agonizante por momentos". Asimismo, en las respuestas a este tipo de publicaciones se revela la clara preferencia por referirse a estos chatbots por pronombres femeninos.
No es la primera vez que la inteligencia artificial y la violencia de género se encuentran. Ya hemos visto la manera en la que los hombres suelen maltratar con mayor frecuencia a aquellos chatbots o asistentes virtuales con apariencia femenina. Asimismo, la industria de la pornografía también ha sabido arrastrar sus problemas de misoginia al reino virtual. Por supuesto, aquí se incluye el terrible caso de los bots capaces de "desnudar" mujeres a través de la IA.
Crear a la pareja perfecta a través de inteligencia artificial puede resultar muy caro a hombres y mujeres
Tara Hunter, CEO de Full Stop Australia, organización centrada en ayudar a las víctimas de violencia de género e intrafamiliar, da su opinión al citado medio. Comenta que los peligros de "crear a una pareja perfecta que puedes controlar y que satisface todas tus necesidades es realmente aterrador".
La razón de las declaraciones de Hunter se centra en varios puntos. El primero de ellos es que detrás de la violencia de género se encuentran muchas creencias sociales distorsionadas. En estas, los hombres creen poder controlar a las mujeres en su forma de vestir, pensar y actuar.
Por supuesto, servicios al estilo Replika o Eva AI te permiten generar a la pareja soñada. En esta última es la propia inteligencia artificial quien te insta a utilizar adjetivos como "sensual, divertida y audaz", "tímida, modesta y considerada" o "inteligente, estricta y racional".
Aunque la inteligencia artificial tipo chatbot ha demostrado sus beneficios, también está el peligro de antropomorfizar sus actitudes. Si bien todavía se desconoce los efectos que estas prácticas pueden tener en los seres humanos, ya nos dejan ver la necesidad social que existe en algunos, y la cual no se ve satisfecha por multitud de razones personales. Eso sí, la influencia de la IA en las personas ya se ha dejado ver. Incluso se conocen casos de suicidios e intentos de asesinatos incitados parcialmente por estos servicios.
A nivel global, este fenómeno es algo bastante nuevo. No obstante, países asiáticos ya lo han experimentado desde hace varios años. Es el caso de Japón, donde en 2013 un artículo de la BBC informaba que los hombres —jóvenes y mayores— preferían interactuar con una novia falsa a través de videojuegos que con personas reales.