El año 2014 está siendo un año complicado para Samsung en lo que a resultados económicos se refiere. En el segundo trimestre fiscal de este año 2014 anunciaron unas cifras realmente pesimistas, con un descenso considerable en ventas y beneficios (especialmente en su división de móviles). Y eso que el segundo trimestre se supone que es el fuerte de la compañía, pues su flagship (Samsung Galaxy S5), llegó a las tiendas en ese periodo. Pero ni así lograron evitar el descenso de beneficios.
En el tercer trimestre fiscal (Q3 2014), los resultados, tal y como la propia Samsung anunció hace semanas a sus inversores, han vuelto a decepcionar, llegando a niveles que no veíamos desde el último trimestre de 2011 en la empresa asiática. Concretamente, Samsung ha presentado unos beneficios netos de 3.900 millones de dólares, una cifra que contrasta con los más de 7.800 millones que presentó en el mismo periodo del pasado año. Esto supone un descenso del 50% en los beneficios en un año, una caída importante en un periodo de tiempo relativamente reducido.
Samsung necesita reaccionar, y el Note 4 puede servir como punto de inflexión
La división más afectada es obviamente la de telefonía móvil, que ha experimentado una caída en ventas del 15% respecto al trimestre anterior (Q2 FY2014). Si comparamos los resultados de ventas con los del mismo trimestre del año pasado (Q3 FY2013), la caída es aún más dura, oscilando el 35% de descenso. Estas cifras reflejan claramente la situación de Samsung, la cual, aunque no es crítica –aún tienen un margen relativamente amplio para reaccionar–, sí comienza a ser preocupante.
A comienzos de año ya adelantábamos en Celularis que el reinado de Samsung podría llegar a su fin a lo largo del año 2014 debido al auge de la competencia (la cual está reduciendo precios y perfeccionando sus productos al máximo). Meses más tarde, esas sospechas iniciales que ya teníamos antes incluso de conocer al Samsung Galaxy S5, parecen confirmarse poco a poco. Para evitar que la caída siga siendo más dura en los próximos trimestres, Samsung necesita un punto de inflexión, y ese puede ser el Samsung Galaxy Note 4, un terminal excelente en todos los sentidos y que refleja algunos síntomas de cambio en la compañía asiática. Pero, ¿será eso suficiente? Todo dependerá de cómo reacciona el público general ante este terminal y, sobre todo, de cómo se traduce eso en beneficios y ventas, que es lo que realmente importa al final del trimestre en una empresa.